Dios y las excusas...

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Jueces 6:14-16

14 mirándole Jehová, le dijo: Ve con esta tu fuerza, y salvarás a Israel de la mano de los madianitas. ¿No te envío yo?

15 Entonces le respondió: Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo el menor en la casa de mi padre.

16 Jehová le dijo: Ciertamente yo estaré contigo, y derrotarás a los madianitas como a un solo hombre.

A Dios les fascina los casos imposibles y es increíble pensar esto, pero así es... A través de toda la Biblia vemos cómo Dios llama a personas con miles de excusas, lo que nos hace pensar ¿Cuáles son las excusas que tenemos nosotros mismos?

El tener excusas es hasta normal, somos humanos... y sí, le tenemos miedo a los retos, o a salir de la zona de confort, a mi personalmente me pasa y estoy segura que a todos también, pero es allí donde Dios nos quiere llevar a cada uno, a encarar esas excusas con las respuestas que Dios mismo nos da.

Por ejemplo si estudiamos los llamamientos de los hombres de fe, las excusas se repiten, lo vemos en Abraham, Moisés, Josué, Jeremías, Elías entre otros y todos con una excusa perfecta para salir corriendo del llamado.

Gedeón no es la excepción, su excusa es la pobreza de su familia, su posición delante de los demas como el menor de la casa de su padre etc.

En otras palabras ¿Cómo levantaría él un ejército sin dinero? o ¿Cómo animaría a otros?

Pero esas excusas no detuvieron a Dios... al contrario, Dios insiste en levantar a Gedeón.

Y llevarlo al punto que llevara su mente y corazón a la posibilidad de que Dios mismo podía hacer esto a través de Él si él solo confiaba en esa palabra que Dios le estaba dando.

Este capítulo sin duda nos habla de dejar las excusas a un lado y la pregunta es ...

¿Cómo Dios te inspira a nuevos retos enfrentando tus propias excusas?

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