Todos andaban de arriba para abajo, preocupados por la salud de Zoro. Chopper les había dicho que se quedaran al margen y lo dejaran trabajar tranquilo, por lo que no sabían nada sobre cómo se encontraba el espadachín.
Mientras tanto, Hikaru se encontraba en su habitación, ajena a todo lo que había pasado. Necesitaba estar a solas y poner sus pensamientos en orden. Sin duda, debía poner distancia entre ella y el peliverde.
La puerta de la habitación se abrió, dejando ver a Robin. Hikaru estaba tan absorta en sus pensamientos, que ni siquiera se dio cuenta de que había entrado.
-Así que estabas aquí.- rió por lo bajo Robin.
-Sí, necesitaba descansar un poco de todo.-contestó la chica.-Hace días que no duermo en una cama de verdad.
-Deberías descansar, estas últimas semanas han sido duras.-dijo condescendiente.-Además, nosotros podemos cuidar a Zoro también.
-Sí, definitivamente será mejor que os encarguéis vosotros de él, aunque ahora que ha despertado no creo que tarde mucho en recuperarse.-contestó, mientras recordaba su último encuentro con el chico.
-Hikaru… no creo que se recupere tan pronto como crees.-le dijo preocupada.
-¿Qué dices?-se le heló la sangre.-¿Le ha pasado algo?
-No te asustes, pero estuvo cenando con nosotros y se desmayó.
-¿El muy imbécil se levantó a cenar?-dijo cabreada.- ¿No podía esperar a que le llevaran la comida?
-Hikaru no fue por eso...se puso demasiado nervioso y eso le afectó.-contestó sin querer contarle todo lo que había pasado.- Chopper está con él, pero todavía no nos ha dicho cómo se encuentra.
-Vale… avísame cuando sepas algo.-le pidió Hikaru.
Robin salió de la habitación, dejándola sola con sus pensamientos. No quería seguir preocupándose de esa manera por él, no después de lo que había pasado, pero por más que lo intentaba la preocupación siempre volvía para atormentarla. Pensaba esperar allí a que Robin le trajera noticias, pero la incertidumbre la estaba matando. Se levantó de la cama y puso rumbo a la enfermería.
La cubierta estaba vacía, no había rastro de ninguno de sus nakamas, así que Hikaru tenía el camino libre para ir a hablar con Chopper sin que nadie se enterara.
Abrió con cuidado la puerta de la enfermería, esperando encontrar al renito. Entró, pero no había rastro de él. Una cortina separaba la camilla de Zoro del resto de la estancia, por lo que decidió asomarse para comprobar su estado, seguro que estaría dormido y no se enteraría de nada.
Al hacerlo, una voz hizo que se sobresaltara, asustandola:
-Pensé que no ibas a volver nunca o eso me diste a entender. ¿Ahora te importa cómo me encuentro?- dijo provocándola.
-En ningún momento he dicho que no me importase.-respondió cortante.
-Si te importara no te hubieras ido de esa manera.
-Sabes perfectamente por qué me he ido así.-dijo con un nudo en el estómago.- Y ahora que sé que estás bien, no tengo nada que hacer aquí. Me voy.
La chica emprendió el camino de vuelta, pero la mano del chico agarró su muñeca.
-Puede que tú hayas terminado de decir todo lo que querías decir, pero yo no.-le dijo desafiante.- ¿Por qué te llaman “La Perla Negra”?
-¿Qué...?-a la chica se le cortó la respiración.- ¿De dónde has sacado ese nombre?
-De tu cartel de recompensa.-dijo incorporándose para poder ver mejor a la chica.- 280.000 berries es una recompensa muy alta para una principiante.
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Verdad oculta [One Piece fanfic. Zoro x Oc]
FanfictionLas personas no son siempre lo que parecen. Una inocente chica puede esconder un oscuro secreto, sin que los demás sean conscientes de ello. ¿Será capaz de ocultarlo o algún espadachín desconfiado descubrirá lo que pretende hacer?