La mía, entonces

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Cuando el joven dudó en medio de la confusión del beso si debía marcharse, Serena deslizó su mano buscando su vientre.

-Vivo con mis padres -mintió él y volvió a besarla.

-Vale... La mía entonces. -dijo ella mientras besaba su cuello. -Vivo a una cuadra de aquí.

La joven no podía detenerse a pensar... El mundo le daba vueltas y le costaba caminar bien. Los tacones le estaban acribillando los pies, y ahora mismo lo único que podía pensar era llegar a su apartamento y liberarse un poco. Ya no recordaba a Manuel ni a Zulema. Mañana se ocuparía de algunas cosas.

Llegaron rápido, en un estado brumoso de confusión y excitación. Se besaron nuevamente en la entrada y en el ascensor. El joven aún luchaba contra sí mismo... Algo en él sabía que lo que estaba haciendo no era ni remotamente bueno... Y sin embargo se sentía bien.

En el ascensor él la tocó por primera vez. Busco su pecho y presiono suavemente mientras la besaba y daban algunos tumbos contra las paredes.

-Joder... -suspiró él, mientras apresuraba sus manos.

Finalmente entraron al apartamento, desnudándose vorazmente para luego aterrizar juntos en el pequeño sofá cama.

Serena gimió bajo su cuerpo. Estaba a punto de ir a la guerra con un tío que no conocía... Ni siquiera le había preguntado el nombre. La coherencia de ambos estaba ya sumergida en un mar de alcohol y lujuria... Así que había cosas que ya no importaban demasiado.

Finalmente se adentró en ella, con un gemido casi liberador. No era propio de él cazar jóvenes en una fiesta, pero no se encontraba demasiado en sus cabales y para ser honestos ella lo había atraído desde el primer momento. Claro que sin las dosis de alcohol que no estaba acostumbrado a ingerir no hubiera accedido a irse con una desconocida...

...pero qué bella desconocida.

-Dios... -murmuró ella entregándose apasionadamente para luego trepar sobre su cuerpo desnudo y ajustarse a él nuevamente, una y otra vez.

Cerró los ojos y lo sintió latir dentro suyo, en un éxtasis maravilloso... Del que no recordaría mucho la mañana siguiente.

Un invierno en Barcelona (Auronplay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora