Un invierno en Barcelona (Auronplay)

Sara y Serena

Serena se quedó tan dura como la piedra cuando hizo contacto visual con Raúl, que no había aparecido sólo claro está.
Sara, la novia, miraba la situación a su lado.

-Hola... Soy Serena -dijo saludando -Pasen por favor.

El joven enmudeció por completo pero atinó a saludarla y a entrar, escoltando a la rubia.

-Que hermosa casa... Soy Sara. Un gusto...

-El gusto es mío -replicó Serena incómoda, sentándose al lado de Zulema.

La morena por su parte, vio la situación desde la cocina y se acercó a saludar con Xavier.

Tío, sería una noche jodidamente larga.

***

Sara observó a Serena fijamente hasta que durante la cena lanzó:

-Hostia, sé quién eres tú.

Serena creyó que había dejado de respirar y Raúl sintió que podría usar sus cojones de sombrero.

-Eres furor en instagram... -comentó la rubia, simpática. En otro mundo hasta podrían haber sido amigas.

-Me está yendo bastante bien, la verdad -comentó Serena aliviada. -Es un buen momento.

Zulema opinó mientras se servía una ensalada.

-Es la puta ama de las redes sociales, mí coleguilla

-Tía es cierto que sales con ese jugador de fútbol?

-Qué jugador? -preguntó Raúl, hablando por primera vez en la noche. Tenía ganas de partir algo.

Serena rió.

-Le han inventado varios romances y tal pero... Quizás sí se lo he follado alguna que otra vez. -acotó Zulema, sirviendo más vino a sus invitados.

Sara rió y Raúl comenzó a toser. Se había atragantado con la comida.

-Joder tío, no sabes comer? -le arrojó Xavier golpeando la espalda de su amigo, enviándole una mirada de "Ten los huevos bien puestos, hombre"

-Coño... -murmuró el joven bebiendo más vino para bajar la comida. Por qué le molestaba? Después de todo, él había apostado a su relación con Sara... Y ella tenía derecho a rehacer su vida... Con el puto tío que mejor le quedara.

-Entonces no estás en pareja? -preguntó Sara con interés.

<<No pero antes se follaba tanto a tu novio todas las noches que te mueres, rubiaca. Eran casi casi casi una pareja>> Pensó Zulema bebiendo de su copa.

-No, no me siento preparada para tener una pareja aún, estoy bien sola.

Raúl se sentía incómodo de cojones. Quería morirse de un ataque al corazón o que la tierra lo comiera. No quería saber nada de la vida romántica de Serena ni mucho menos que sea su novia la que le preguntara a su ex amante por sus conquistas.

-Ya llegará el amor a tu vida y verás cómo estarás mejor.

<<Joder pero por qué eres tan simpática? Ayudame a odiarte un poco, tía.>> Pensó Serena y asintió <<El amor había llegado a mí vida, y casualmente tenía el rostro y la polla de tu novio>>

-Como estás tú, Xavier? -interrumpió Raúl para evadirse de la conversación de sus mujeres.

-Pues yo muy bien, la convivencia mola y pues... muy tranquilo.

-Ya te venía bien eso de una vez, cabrón.

-Pues sí, ya era hora. Y qué tal tú?

-Yo, pues no me puedo quejar...