IV

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- ¡Vamos al baño, al toque! -me ordenó la Nacha.

La seguí aún impactada por lo que había visto hace unos segundos en el celu de la Ágata.

- ¡Alto ahí! -nos dijo el inspector más hueón del colegio-. ¿A dónde van?

Ah, no...

Miré a la Nacha sin saber qué decir.

-Inspector, la Lidia se siente pésimo... Mírela, ¡está pálida! Parece pantruca...

-Tiene que ir a inspectoría -viejo culiao señalando inspectoría como si no supiéramos dónde queda-. Y creo que puede ir sola, ¿o no?

A este viejo le falta viagra para que le cambie la cara de amargao.

-Pucha, inspector... Es que usted sabe... La Lidia anda con su... período -dijo en voz baja mi mejor amiga-. Y se manchó... por eso tengo que acompañarla.

-Sí... -dije avergonzada.

Buen aporte, Lidia.

El inspector suspiró.

-Se apuran.

-¡Sí! -afirmó la Nacha con entusiasmo.

Caminamos como un metro y el inspector culiao nos preguntó si estábamos sin profesor. Ahueonao el viejo. Y después cuando entró a la sala, corrimos al baño.

- ¡Ahueoná! -le pegué a la Nacha en el brazo.

-¡Auch! -se quejó-. Agradéceme por lo menos.

-Le dijiste al inspector que andaba con la regla -me crucé de brazos.

-¿Y? Es verdad. Y además -agregó-. Fue terrible chistoso -se rió.

La miré asesinamente y entré a un cubículo sin cerrar la puerta.

- ¡No me digai que te vai a cambiar la toalla! -me hueveó con un tono de diversión.

-No -la miré feo-. La Ágata se puede dar cuenta de que le saqué el celular y puede venir al baño a buscarme.

-Cierto... -se quedó pensativa.

- ¡Entra luego!

Entró, cerré la puerta y nos metimos al celular de la Ágata de nuevo.

- ¿Qué vamos a hacer con esto? -me mostró la cosa que nos dejó impactadas.

- ¡Shhh! Habla más despacio -susurré.

Se tapó la boca con la mano.

- ¡Sácale foto con tu celu!

Puso una cara de asco.

- ¡Duak! No me interesa tener una foto de la Ágata en pelota -comentó en voz baja-. ¿Por qué tendrá fotos en pelota?

-Porque es maraca po.

-Ah, chucha, verdad.

La Ágata tenía lo mismo que yo; tetas, vagina y toda esa hueá, pero igual me impactó que tuviera fotos en pelota. Yo sabía que era maraca, pero no pensé que llegaría a ser tan maraca po, porque ya, está bien que guarde las fotos solo para ella, pero la hueona se la mandó a un contacto por WhatsApp. Y ya, también está bien que sea al Alonso, porque es el pololo, pero era un contacto que no tenía guardado en el celular y que no tenía foto de WhatsApp y más encima tenía el típico y estúpido estado que dice "Hey there! I am using WhatsApp."

-Nacha, si querí evidencia, sácale foto.

- ¡Qué feo así po! Mejor le saco pantallazo y me lo mando por WhatsApp, así se vería más mejor.

Enamorá de un ahueonaoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora