Aiden.

Capítulo 5: La bestia.

Amy bajaba por las escaleras junto a Evan, él la tomaba de la mano y se reían de un chiste privado cuando de pronto un chico paso junto a ella y sin querer le golpeó el hombro, la bruja trastabilló hacia atrás y su híbrido la retuvo de inmediato.

–Discúlpame, no me di cuenta –exclamó el chico observando a sus pies puesto que traía un vaso con cerveza y en el tropiezo terminó por arrojarselo a sí mismo.

En ese instante Amy lo miró, en lo profundo de su alma algo le hizo "click" y aceleró su corazón con tan solo haberlo oído, el muchacho ante ella le sonrió amablemente, tenía unos vibrantes ojos verdes pero no llego a decirle nada cuando escuchó como otra persona la llamaba y aquel chico se alejó, no pudo ver exactamente sus facciones en medio de la oscuridad y las luces de colores pero por alguna extraña razón sintió que lo conocía y tuvo un arrebato de sentimiento donde quería hablar con él, sin embargo no pudo.

–Amy, tenemos un problema –le dijo una chica miembro de los cazadores y le extendió un teléfono celular –Es Thomás quien llama.

La bruja tomó el celular pero miró de soslayo por donde se fue a aquel desconocido y una extraña sensación a vacío la recorrió.

–Thomás ¿Qué sucede? –preguntó al atender el móvil, mientras se volteaba hacia Evan y éste que la abrazaba por la cintura esperaba atentamente a cualquier orden.

–Hubo un ataque hace una hora, unos lobeznos vieron como un posible vampiro perseguía a dos chicos, quizás sea un errante o alguna de las criaturas de Dominic enviadas por los Destructores es por ello que debo averiguarlo, estoy llendo hacia el parque Stronger, al parecer hace un momento han encontrado el cuerpo de un chico, estén atentos quizás se trate de un ataque para todos.

Amy asintió y luego colgó, no necesitó decir nada puesto que Evan había oído toda la conversación fácilmente gracias a sus habilidades como híbrido.

–¿Deberíamos cancelar la fiesta? –preguntó la bruja y él negó lentamente.

–Sería sospechoso, además es más seguro que todos estos chicos se queden aquí si es que hay una criatura de Dominic suelta por las calles, no querrás más víctima.

–Tienes razón.

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Thomás alcanzó a unos compañeros lobos hasta un automóvil abandonado junto a la carretera, tenía señales de haber recibido un fuerte golpe al frente pero no había sangre, sin embargo el conductor no estaba y la puerta del acompañante permanecía abierta de par en par. Había llegado hasta allí al recibir un llamado de alerta por parte de sus compañeros y se apresuró a avisar a los demás líderes de los distintos grupos, pronto se percató de que no estaban solos y vio como Austin salía de entre las sombras trayendo en manos una camiseta desgarrada y cubierta de sangre; él era un vampiro sin embargo trabajaba para los cazadores junto a su hermana Amy la cual aún no había llegado.

Al ser vampiro se vería exactamente como el primer día de inmortalidad, con aparentes diecinueve años para el resto de su vida pero solía llevarse bien con ello.

–Debes ver lo que encontramos –le dijo el cazador de ojos verde musgo y sin más volvió a meterse entre los árboles frondosos de aquel viejo parque abandonado.

Thomás fue tras él rápidamente ya que al ver la expresión seria de su amigo sintió que no se trataba de buenas noticias y pronto lo comprobó al encontrarse con el cadáver de una chica la cual fue asesinada de forma brutal; su cabello rubio estaba cubierto de sangre, traía los ojos abiertos con una mirada de dolor y las uñas de sus manos estaban levantadas e incluso rotas pues al parecer había luchado contra su atacante para evitar su muerte, a pesar de ello no lo logró y quien la asesinó la mordió ferozmente en la garganta arrancándole parte de la piel pero a la vez parecía haberse divertido con los órganos de esa muchacha ya que le abrió el estómago y le arrancó partes como si nada.