La sangre chocaba violentamente contra mis vasos sanguíneos provocándome cosquillas, mi garganta comenzaba a secarse. Quería desaparecer, quería correr lejos, dormirme para siempre, saltar, reír, escupirle... Besarle. Sentía mil emociones distintas floreciendo en mí totalmente contradictorias, que me volvían loca y me ataban en el silencio.
-Me están esperando -logré decir haciendo ademán de irme, Alec me detuvo-
-No quieres irte y lo sabes -sonrió-
-Quiero estar con mis amigas -me liberé de su agarre-
-Montemos juntos en la nube.
-No.
-¿Prefieres subir con ellas?
-Prefiero ni subir.
-No subas, quédate conmigo -dijo de forma despreocupada-
-Tus amigos te están esperando -dije negando de una forma burlona-
-Pues que esperen -dijo arqueando sus dos cejas-
-¿Vas a dejar plantados a tus amigos?
-Sí si el motivo eres tú.
Me petrifiqué al momento que mi corazón ardía.
-Sorpréndeme -dije-
Alec torció levemente sus labios en una dulce y sexy mueca.
-Demos una vuelta.
Alec comenzó a caminar de forma lenta entre la gente conmigo a su lado, parecía calmado y muy seguro.
-¿No te han puesto hora para recogerte? -soltó una leve risa-
-Pues mira tú por dónde que no.
-Qué rebelde -se puso delante de mí-
-Una cosa loca -reí y lo aparté para seguir caminando-.
-Ven conmigo -me cogió de la mano y caminó más deprisa-
-¿A dónde?
-Tú sólo déjate llevar.
Sonreí y dejé de pensar, sólo sentía el tacto de Alec sobre mi piel. Una sensación tan increíble que me hacía sentir realmente despierta y viva. Nos adentrábamos en el bosque que rodeaba la ciudad y que estaba justo al lado de la feria.
-Alec...
-Sh -me cortó é-
Me sentía segura a su lado, como si nada ni nadie pudiese tocarme y mucho menos, dañarme.
-Ahora no verás nada hasta que yo te haga ver -dijo tapando mis ojos con sus grandes manos-
-Alec me voy a matar.
-Relájate nena -susurró en mi oído-
Mi respiración se entrecortó y supe que Alec lo notó, pues sonrió aún en mi oreja. Tragué con dificultad y puse mis manos sobre las de Alec, que a su vez estaban sobre mis ojos. No quería que la noche acabara, era como si no existieran ni los minutos ni las horas, no existía nada más que nosotros, dos desconocidos que se encuentran, no se soportan pero por alguna razón, conectan.
Los pies de Alec se detuvieron y suspiró. Poco a poco retiró sus suaves manos de mis ojos y pude verlo. Estábamos en una de las zonas más altas del bosque de Montpelier en Vermont. Se veía toda la feria, un juego de luces precioso que fusionaba con las pegadizas canciones de las fiestas y las risas de los niños. Era realmente precioso.
-Sabía que te gustaría -rió-
-Alec es.. Es precioso -lo miré-
-Cuando quiero desaparecer, siempre vengo aquí, me relaja.
![](https://img.wattpad.com/cover/18758027-288-k363350.jpg)