Cute Yoonie 태기 TaeGi •

39.

— TaeTae... no se molestaría conmigo, ¿cierto? —mantenía su cabeza apoyada en el pecho de su novio, estaba ansioso por contarle lo que había hecho.

— No, bebé. Nunca. —sus manos rodeaban el cuerpo del menor y sus ojos estaban cerrados, su voz era suave, ambos estaban tranquilos.

— Bueno... Quiero mostrarte algo. Quizá necesitaré tu ayuda. —se levantó, mirando a los ojos del chico. Estaba emocionado.

— Lo que quieras.

— Ven. —extendió su mano y lo guió con él hacia una de las habitaciones de su casa, esa donde decía dormían sus padres, parecía estar superando finalmente todo lo que le recordaba.

Su mirada se dirigió a Taehyung una vez estaban ahí dentro, buscando descifrar la expresión en el rostro del chico. Sabía que aquello no era del todo correcto, pero la tentación le había vencido, era fácil dejarse llevar cuando había gente que le impulsaba a hacerlo en lugar de detenerlo.

— ¿Cómo lo... hiciste? —miraba confundido el cuerpo de Jungkook amarrado a la cama, en el centro de la habitación. No estaba molesto y ya creía que Yoongi haría algo así, pero de creer a que realmente lo hiciera tan rápido, era diferente, sorprendente.

— Jiminie se aseguró de que en la fiesta terminara lo suficientemente ebrio para creer que iban a follar. —rió. Su amigo había sido bastante importante en su plan, ya solo faltaba su parte.— Bueno, luego es fácil meter droga en la bebida de un borracho, en una habitación a solas donde nadie más lo note.

— ¿Él lo trajo aquí?

— Sí. Lo trajo, lo amarró y lo desnudó. Lo dejó listo para que nosotros sigamos con lo demás. —sonreía de una forma tan tierna. Taehyung no sabía exactamente qué tenía en mente, pero estaba curioso por descubrirlo.

— ¿Qué es "lo demás"?

— Hmm... No lo sé. Cuando despierte comenzaremos, solo quiero que se asuste, pero no vamos a lastimarlo.

— ¿Por qué no? —sonrió, acercándose a su novio para abrazarlo, con un suave puchero en sus labios. Lastimar a Jungkook no sonaba tan mal para él.

— Porque no soy malo, no lastimo. —correspondió el abrazo, riendo suavemente.— No lastimo a nadie.

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— ¡Jungkookie! —gritó emocionado, haciendo a Tae correr hacia la habitación.

— ¿Despertó?

— Sí, sí. —el mayor se acercó a los otros dos, mirando fijamente a los ojos de Jungkook, su rostro lleno de confusión y su cuerpo tembloroso.

Jungkook no entendía exactamente qué estaba pasando, había despertado ahí sin muchos recuerdos recientes y su cuerpo se sentía débil, adormecido.

Sus sentidos fueron incorporándose poco a poco, su mirada dejó de ser borrosa y le permitió observar a Yoongi frente a él, sentado en su estómago. Su mirada examinó su propio cuerpo y un montón de cosas pasaban por su mente al notarse desnudo; aquella noche en la fiesta, había follado con Jimin, ¿cierto? No recordaba qué había pasado, no sabía si mínimo lo habían hecho.

— Jungkook lastimó a Jiminie. —susurró. La mordaza que cubría la boca del chico impedía que emitiera palabra alguna, pero no estaba alterado, Yoongi era inofensivo, no lo creía capaz de hacerle daño.— Jungkook me lastimó a mí. —dijo también, captando completamente la atención de Taehyung.— Jungkook merece un castigo. —rió, girando su mirada hacia Tae.

Se levantó del cuerpo de su víctima, acercándose a Taehyung. Sus manos se posaron en sus hombros y se puso de puntillas, para alcanzar su oído.