La Vida Que Construimos

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estúpida. Ella había sido tan estúpida. Ella nunca había tenido una sola noche en su vida (Que, para ser justos, no había tenido demasiadas oportunidades con ni siquiera tres años de actividad sexual en su haber...) y ese fue el momento en que decidió sumergirse de cabeza en uno. En retrospectiva, culpo a la locura temporal del dolor por la muerte de su madre, pero eso todavía no era una excusa ya había pasado unas cuantas semanas y se seguía maldiciendo sus actos de aquella noche con Castle .

Justo en el exterior del metro, Kate tropezó con un poste de luz y se encorvo, pensando que estaba a punto de vomitar. Ella se amordazo y sintió que se le revolvía el estomago, pero logro evitar sacra todo lo que había engerido durante la tarde. Dios que desastre. Considerando todo, ella tuvo un primer trimestre relativamente fácil. Solo había habido un puñado de mañanas que había pasado encorvada sobre el baño de la habitación de su dormitorio, y todo lo demás había sido tranquilo al menos físicamente. Emocionalmente fue una historia diferente.

Kate estaba segura de que había pasado mas de las diecisiete semanas anteriores llorando que antes en su vida anterior, y se había duplicado. Entre la muerte de su madre, el descubrimiento de su embarazo, y todo lo que sucedió después de que ella, en pocas palabras en ese momento su vida era un desastre total. había estado tratando de tomar medidas en la dirección correcta, y aunque sabia que debía hablar con Castle; todo fue parte de hacer lo correcto.

Hasta esa mañana, Kate todavía no estaba segura de como o si le diría algo. Su compañera de habitación, la única de sus amigas que sabia sobre el embarazo (Sobre todo porque mantener el secreto de ella había sido casi imposible.), le pregunto en varias ocasiones por el padre. Kate simplemente lo tacho como alguien con quien nunca tuvo la intención de involucrarse, pero su compañera de cuarto continuo insistiendo. En parte también aliento a Kate para hablar con el padre del bebe, si no fuera porque no significaba que no estaba sola.

Durante las ultimas cuadras hasta el desván del edificio de Castle, en la calle Broome, kate ensayo en su mente lo que le diría a Rick. Estaba dispuesta a decirle que no tenia nada de que preocuparse; ella nunca tuvo la intención de ir tras el para que mantuviera a su hijo o pedir su apellido a través de otros medios. De hecho, ella no quería absolutamente nada de el, por que su bebe, iba a ir en adopción. En veintitrés semanas podría dejar atrás el incidente y olvidar todo lo sucedido.

- Vamos entra.-

Dijo Rick, cuando abrió la puerta del departamento, sin molestarse a saludarla, y en realidad ella no lo culpaba mucho por la actitud que estaba tomando con ella; ella tal vez ni se merecía estar hay.

Su cabello se encontraba revuelto y sobresaliendo en ángulos extraños, era obvio que sus manos lo habían provocado hace algunas cuantas horas antes. Sus ojos también estaban mas sombreados de los habitual, y su postura era tensa. Hizo un gesto para que ella se sentara en el sofá y mientras se dirigía hacia allí, le pregunto...

- ¿Puedo traerte algo par beber?-

- ¿Tal vez un vino...? Bromeo...- bromeo con el intento de aligerar la tención, sin embargo, la broma fue embana, cuando el escrito maldijo en voz baja y se tapo la boca con la mano.

-¡Ni siquiera tienes la edad suficiente y con el estado en el que te encuentras para beber algo!...-

- Gracias.- Ella lo corto antes de sentarse ene el sofá. El la hizo sonar como si fuera la niñera de dieciséis años que había arrancado de los pasillos de una escuela secundaria. Mientras que ella ya era lo bastante grande de edad, y de manera realista los siete años y medio que el le sobrellevaba tampoco estaba tan bien..

Es cierto que ambos se encontraban en distintas etapas de su vida en ese momento particular, pero ¿Habían tenido algún problema si ella tuviera veintinueve y el treinta y pocos? Tal vez no habría ningún problema y la diferencia de edad seria menos a lo que ahora.

El escritor maldijo de nuevo. -Mierda. Lo siento, no debería haber dicho eso. Empecemos de nuevo....- El no estaba sentado en el sofá junto a ella, si no en la mesa de café que se encontraba enfrente de ella, asiendo que quedaran un poco juntos...

- ¿Estas embarazada?-

- Si.-

- ¿Y es mío...?-Ella sacudió la cabeza.  

- No podría ser de otra persona...- Antes de Rick, la ultima vez que se había acostado con alguien había sido en noviembre, justo antes de que rompiera con su novio Rogan por ser un gilipollas egoísta. Y debido a su dolor, ella no había estado con alguien desde entonces.

El escritor negó con la cabeza, como si todavía luchara por comprender lo que estaba sucediendo. 

- Dijiste que estabas tomando la píldora.-

Kate apretó los labios fuertemente, parecía como si pronto se le partieran por el esfuerzo, entendía todas y cada una de las reacciones de Castle, el solo había preguntado sobre su natalidad, y estaba siendo sincera con todo, pero que le reprochara ahora.

- Y lo estaba, pero me olvide de tomarla al otro día después de entrarme con lo que había sucedido con mi madre. La tome al día siguiente creyendo que no importaría si un día se me olvidaba. Pero supongo que con un solo día necesite par que todo esto pasara. Lo siento yo tengo en realidad toda culpa...-

A decir verdad ella tenia toda la culpa de este embarazo, no solo por que ella había iniciado el sexo, si no por no tener la suficiente responsabilidad como para cuidarse.

- No, no es... tu culpa. Estas cosas suelen suceder.- se miraron el uno al otro durante treinta segundos antes de que Rick se levantara de la mesa y comenzara a pasearse de un lado a otro a un costado del sofá, con una mano en la cabeza y otra rascándose la barbilla.

- WOw, ummm... ni siquiera se que decir.-

kate respiro hondo y cruzo sus manos en su regazo, aquí era hora en donde decía todo lo que había preparado y a lo que ella llamaba discurso...

- No tienes que decir nada. Incluso puedes olvidarlo como si nunca hubieras sabido nada, si quieres... Voy a darlo en adopción.-

- ¿En... ¡Adopción!?- El farfulló.