OH MY FCKNG DESTINY [EDICIÓN]

22. ¡Esto NO es amor! 2.0

Si vivieras encerrado entre cuatro paredes pero a la vez leyeras historias y todo lo que se debe saber de amor... ¿Crees que al salir sabrías reconocerlo? ¿Cómo saber que lo que sientes es real?

—Enishi

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Enishi se quedó profundamente al dormido junto a Naoya, el dolor que sentía en las costillas le abandonó y le dejó dormir de lado sin molestias por primera vez en mucho tiempo.

Naoya por su parte se sentía pesado con el cuerpo cortado, medio adormilado y le costaba respirar porque se le tapaba la nariz, comenzó a toser gradualmente más y más pero el omega no despertaba a pesar de que estaba ya encima suyo, parecía como si el movimiento en su pecho lo arrullara.

Intentó alejarle cuando reaccionó y le vio pero sentía una extraña paz que no quería perturbar, además su corazón estaba emocionado, terminó abrazandole también. Llegando la mañana, después de un sueño bastante placentero para él, Enishi si bien le costó despertar, al final se dio cuenta de que estaba abrazando al alpha reaccionando rápidamente para intentar zafarse, su aroma le embobaba y le gustaba mucho, se sorprendió al encontrar mojada la camisa de Naoya, la había babeado.

¡Ah! ¡Mierda! Ah... Tu brazoooo, quítateeee... argh...

Después de luchar contra el peso muerto de Naoya y sus brazos que le aprisionaban, se incorporó y se limpió la saliva que se le corría de la comisura de la boca mirando el círculo que había mojado con ella. El alpha no se inmutó a pesar de que poco después comenzó a toser. El omega le tocó la frente y cogió el paño se le había caído.

Su fiebre ya no es tan alta. ¿Qué horas son? Medicina... Necesitamos comer para tomar la medicina... Desayuno... Ok... Vamos.

El omega bajó y cocinó un poco subiendo en dos cuencos pequeños algo de sopa. Al poner eso en el buró cerca de la cama de Naoya éste despertó.

—Hola... Gracias... por tu ayuda. Lamento el alboroto.

—Ah... Ghuah...De... nda— Enishi sacudió su cabeza e intentó hablar pero solo hacía sonidos sin poder formar palabras completas.

—Tranquilo, no te esfuerces— Naoya se sentó apoyado en la cabecera de la cama —¿Te quedaste aquí toda la noche?— el omega asintió de manera seria y calmada. —Tus defensas también son bajas, no deberías haber hecho eso.

Enishi frunció un poco el ceño.

Mmmmmh ya sé... si me enfermo estando así buena la voy a hacer... pero es lo menos que podía hacer vaya, tampoco soy un aprovechado indiferente. ¿No es esto muy poco comparado con lo que ya hiciste por mí en el hospital?

Él le pegó en la cabeza con la palma de la mano abierta, como si se tratara de una katana.

—Oye...duele— El alpha se quejó un poco y al voltearlo a ver el omega le señalaba con la mirada el buró con la sopa y los medicamentos. —Miso shiro... Supongo que uno es mio y el otro es tuyo— Enishi asintió algo avergonzado, salió de la habitación dejando a Naoya algo confundido, regresando después con sus propias pastillas en la mano se acercó una silla y le observó comer.

—Anda... Come— sabiendo que Naoya no podía leer por cansancio optó por agarrar el teléfono y escribir en una aplicación, un traductor servía perfecto, dejando que la voz que éste tenía se volviera la suya.

—Gracias, jajaja cough, cough, cough. Bastante ingenioso.

—Si, si, si de nada.