todo por ti.

|| 032 ||

_¿Me amas?-- Le preguntó. Había comprendido perfectamente lo que ella dijo, pero le encantaba escucharla.

Ella se aferró más a él.

_Te amo... Te amo muchísimo.-- Apretó sus labios, para evitar llorar.

_Yo... _____...-- Se escuchó el celular del castaño sonar. --Tsk... Lo siento.

Shu Yang le acarició la mejilla, en forma de disculpa, y se alejó de ella para ver quien lo llamaba, el número de su padre podía verse en la pantalla. Tragó saliva.

_¿Si?-- Respondió algo atemorizado.

Solamente le gritó. Le gritó con todo el odio del mundo. Shu Yang no podía creer que era su padre, ese que tanto lo amaba.
Colgó. Solo sabía que debía volver a casa. Volteó a ver a la menor.

_Hey, bonita... Te amo, ¿Si? Nunca lo olvides... Por favor.

_Yang Yang...

No la dejó terminar y la tomó de la mano, guiandola hasta el lugar donde estaban los demás.

_Yo volveré, no te preocupes.

[. . .]

_¿Estabas con ella?

Hubo un silencio bastante incómodo.

_Estabas con ella... ¿Cierto?-- Habló entre dientes, estaba cansado.

_Si, si lo estaba.

Su padre rio levemente.

_Esa chica no va a quitarme mi casa.

_¡Tú nos abandonaste!-- Le gritó, con un nudo en su garganta. Le dolía que atacaran a _____.  --¡Ella merece esta maldita casa más que tú!

Se volteó y lo golpeó, fue muy rápido.

_No me hables así... Si ella vuelve a esta casa no la va a pasar bien, Yang Yang...-- Soltó.

Shu Yang miró al suelo.

_Bueno... Es tu decisión, ¿Cierto?-- Dio media vuelta.

_D-dame tiempo...

_¿Dices?-- Su padre sonrió de lado aún de espaldas a su hijo.

_Que me des tiempo... Y-yo... Yo haré que se vaya de casa. No la lastimes...

[. . .]

_¡Yang Yang!-- Saltó a abrazarlo a penas entró a la casa. --Me preocupaste cuando no volviste...

_Lo lamento, princesa... No quise preocuparte...

_Agh, malditos melosos...-- Ami pasó a la casa.

Ambos rieron levemente.

_Chicas... ¿Qué dicen de ir mañana a desayunar? Ya saben, con los chicos. Sé que salimos hoy... Pero bueno, hay que aprovechar las vacaciones.-- El único chico presente apoyó su espalda contra la pared, colocando su mano en los bolsillos y con una pequeña, casi imperceptible, sonrisa esbozada en sus labios.

La sonrisa de Ami se borró en cuestión de segundos.

_Yo me voy mañana... Y...-- Comenzó a hablar.

_Yo estoy encantada.-- Soltó la más pequeña del lugar.

Ami volteó a verla.

_Pero... _____, ¿Estás segura?-- Ami acomodó su cabello, quería preguntarle si se iría pero no podía delante de Shu Yang.

_Claro... Al fiin y al cabo la que se va eres tú, ¿Cierto?

[. . .]

_Mgh... Maldita sea...-- Abrió uno de sus ojos.

La azabache se levantó y fue al baño luego de tomar la ropa que se pondría.

_Detesto madrugar...

Murmuro para sí misma.
Lavo su cara, cepilló sus dientes y peinó su cabello. Hizo una pequeña mueca, realmente extrañaría ese lugar.

Sin pensar mucho en el tema tomó su ropa y se cambió.
Se sobresaltó al escuchar pequeños golpes en la puerta.

_¡Y-ya salgo!-- Avisó algo nerviosa por el susto.

Guardó su maquillaje, que había usado para no parecer muerta, y abrió la puerta.

_Ami, me asustaste.

La observó de arriba a abajo, la analizó.

_¿Aún piensas irte?-- Murmuró, temía que Shu Yang estuviera despierto.

La pequeña rodó los ojos.

_Claro que lo pienso.-- Tomó su pijama y la empujó levemente para poder pasar.

Intentó guardar todo lo que faltaba antes de que Shu Yang despertara y salió lo más rápido de su habitación.

_Vas a decepcionarlo...-- Murmuró.

_Lo hago para no preocuparlo, ¿Si? Solo... Vamos, no quiero que despierte y... Bueno, ya sabes.-- Se dirigió a la puerta, con sus maletas en las manos, y la abrió con decisión.

_Maldita sea _____...-- Ami la siguió, negando con la cabeza.