CAPITULO 23
Volví al colegio.
Pilu me convenció. Yo quería quedarme unos días más en casa pero él me dijo que había pensado en lo que yo le dije y que no ganábamos nada encerrados.
Verlo esperándome en la puerta del colegio me mató. Está flaco, más alto. Ya no se esconde debajo de sus gorros. Cuando me vio le cambió la cara y a mí también porque con solo verlo ahí, esperándome, me nació una sonrisa. Cuando nos saludamos me dio la mano y me dijo que no nos soltáramos, que juntos era más fácil.
Mamá me avisó que habían puesto una placa con tu nombre y el de los chicos en el hall de entrada del colegio, pero verla fue re fuerte. Por suerte Pilu me tenía bien agarrada, porque me temblaron las piernas. A él también.
No sabés lo que fue soportar las caras de lástima de todos los profesores. Los chicos de otras divisiones también nos miraban con lástima. Una piba se largó a llorar. Casi le pego una trompada.
Voy a decirte algo que no me atrevo a decirle a nadie: ¿sabés qué pensé hoy, cuando vi a todas las chicas? Pensé en que tendría que haberse muerto una de ellas, no vos. Si esto hubiera pasado dos meses atrás, la que se hubiera muerto por ir a upa de Nico hubiera sido Julieta... A esa sí le entiendo la cara de pena. A los demás, me dan ganas de acogotarlos.
¿Podés creer lo maldita que me estoy volviendo?
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Solo tres segundos [Paula Bombara]
Teen FictionSolo tres segundos en el espacio azul iluminado. Tres, para buscarse. Dos, para encontrarse. Uno, para apretar los párpados y, aún así, verse. Solo tres segundos antes del impacto. Luego, blanco y ruido, ruido ruido ruido en el espacio azul iluminad...