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     Eran las seis de la madrugada y los párpados de Alice y Harry solo querían descansar. Ambos se quedaron despiertos hasta tarde queriendo pasar todo el tiempo posible juntos.

      La familia Holland y Alice se encontraba en el aeropuerto esperando que los dos chicos Holland terminaran de hacer el check-in de su equipaje.

— Equipaje listo. — Dijo Tom llegando donde su familia. Harry se acercó a su novia y la abrazó.

— Prométanme que se portarán bien. — Les dijo Nikki con una pequeña sonrisa, si bien ya se había acostumbrado a que sus hijos viajaran mucho, aún se le hacía difícil verlos dejar el nido.

— Como siempre lo hemos hecho, mamá. — Dijo el hermano mayor.

— Buen chiste, Tom. — Comentó Sam con una sonrisa haciendo que todos rieran.

     Harry tomó la mano de Alice y la alejó un poco de su familia.

—Yo... eh... te... — El chico soltó un bufido. — ¡Rayos! Pensé tanto en este momento que creí que no sería tan difícil, pero no puedo despedirme de ti, no quiero hacerlo.

—No lo hagas, esto no es un adiós, sólo di "hasta pronto." — Ella colocó sus manos en las mejillas del chico y las acarició con sus pulgares.

—Estaré aquí cuando vuelvas, te estaré esperando, Alice.

    Ambos se besaron con calma y cariño, con los sentimientos recorriendo sus cuerpos desde los dedos de los pies hasta sus cabellos y saliendo por sus labios, conectándose entre ellos.

Aún puedo retractarme de tomar ese avión. — Le dijo Harry en un susurro.

No, cariño. Esta es una buena oportunidad para tu futuro, y quiero que tengas éxito porque te lo mereces. Estas oportunidades no aparecen dos veces en la vida como para desperdiciarla.

— Personas como tú no aparecen dos veces en la vida. — Ambos se observaron unos segundos antes de soltar una pequeña risa. — ¿Muy cursi y empalagoso?

— Solo un poco, amor.

     Harry acarició las mejillas de su novia con sus pulgares, una sonrisa apareció en el rostro de ambos.

Te amo demasiado, Alice Florence. — Una lagrima bajó de los ojos del chico y recorrió la curva de su mejilla.

Te amo mucho, Harry Holland.

     Luego de unos segundos abrazados, Tom le avisó que ya era hora de irse. Aún tenían cosas que hacer como revisar el equipaje de mano y buscar su puerta de embarque. Los dos chicos Holland se despidieron de su familia.

     Sam se acercó a la chica y la abrazó por los hombros.

— Todo va a estar bien, Alice. — Los Holland y ella veían como dos de sus integrantes se alejaban de ellos dirigiéndose a lo que los llevaría a otro país y a su futuro.


Lo sé, Sam, lo sé.




•••

     Aviso: Este es el último capítulo, aún queda el epílogo.

Angels. | Harry Holland.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora