One Shots TsukiKage

HinaKage

One shot para: Naomi722

☆ Yunisu On ☆
De antemano me disculpo por haberlo hecho con un universo alterno, espero que sea de tu agrado.
☆ Yunisu Off ☆

-Conecten los cables transmisores.

Aquellas voces llenas de frialdad, calculando cosas sobre su destino e intentando alcanzar un mundo al cual la ciencia no tiene acceso por decreto y sin más las la electricidad recorre su pequeño cuerpo, duele, sus dedos se contraen pero sus muñecas son sujetadas por grilletes de metal que solo hacen más fuertes las corrientes de electricidad en su cuerpo. Su cuerpo está adolorido, pero ingresa a su habitación con el gesto decaído y su compañero de infierno sale a su encuentro, la cabellera negra lo alegra demasiado y es abrazado, sabe que quizás en ese lugar nadie lo necesite y a pesar de su joven edad conoce el destino que conlleva ser inservible en el lugar.

-Tobio.

Lo rodea con sus lastimados brazos mientras el pequeño entre sus brazos solloza de miedo por todas las heridas que presenta el pelirrojo en su cuerpo. Gracias a todo el esfuerzo que Shoyo llevaba a cabo en el lugar pudo mantener fuera del rango de interés de los adultos con batas blancas qué más que humanos para el pelirrojo eran demonios llenos de avaricia que no se llenaban con nada y destruían todo a su paso.

-Mira, la niña de a lado me lo dio por algo a cambio.

Tobio le ofreció un vaso de fruta seca y algunas semillas, podría considerarse como sus caramelos y era algo muy valioso que ellos recibieran alguna vez aquellas golosinas.

-¿Que le diste a cambio?

Shoyo comenzó a comer alegremente mientras Tobio desviaba la mirada.

-Solo come.

El pelirrojo le miro algo extrañado pero no dijo nada.

-Experimento 009.

Tobio se presentó con su típica ropa blanca y miraba con sus ojos azules a aquellos tipos, de forma seria, sin miedo a lo que fuese que vayan a hacerle.

-La cadena de ADN tiene sus espacios.

-Donde otra información de ADN puede acceder fácilmente.

El círculo de personas protegidas debidamente con cristales por delante reían divertidos por jugar con el complejo cuerpo humano de niños los cuales algunos fueron abandonados y otros arrancados de los brazos de sus padres para llevar a cabo sus intentos de creación, que los poderes pasaron al plano de la realidad.

-Experimento 010.

Lucía más fornido, también su mirada turbia daba un aspecto de total dominio cosa que hacía a aquellos tipos simplemente reír mientras sus cadenas rechinaban.

-Solo tenemos que esperar un poco más.

-¡Shoyo!

La embestida fue con rudeza y le hizo ver algunas estrellas, sabía que el pelirrojo estaba más que molesto al descubrir que no eran nada más y menos que pruebas en un remunerado experimento, la mano del más bajo tomó posesión de su pierna derecha para doblarla hasta que la rodilla del azabache llegó a su pecho.

-Escaparemos.

-¿Cómo piensas que lo haremos?

Observó las piernas de su pareja hasta que desaparecieron tras su camiseta blanca.

-En la visita, pero antes necesito que hagas algo por mi Shoyo.

La mirada de su esposa lo hizo sonreír ampliamente, sin duda ya había pensado en algo. La visita de un funcionario japonés y estadounidense llegó al lugar.

-Me alegra que los avances sean prósperos en este proyecto, comenzaba a pensar que solo era una farsa y retiraría mi apoyo.

Aquellos cerdos reían despreocupados mientras una arena improvisada era preparada.

-Experimento 009 y 010, 009 ha mostrado un digno avance en la telequinesis y 010 en el control elemental, aunque 010 es mucho menos prometedor que 009.

-¡La persona que se niegue se le inyectara el veneno que tienen en sus respectivos collares! ¡Peleen a muerte y demuestren si son merecedores de vivir para servir a su país!

-Ni siquiera sé que país somos.

Los collares cayeron al suelo ante la mirada impactada de los médicos y funcionarios públicos, Tobio alzó las manos brindando un apoyo a Shoyo que brinco para después usar sus llamas contra los vidrios que cedieron al calor derritiendose fue entonces que el de cabellos azabaches usó su poder mental para tomar las armas de los guardias disparando sin piedad alguna a cuanto adulto se encontrase en el lugar. A Tobio no le llevó demasiado tiempo conocer el interior de las armad de fuego y su uso, desarrollo su capacidad hasta el punto de crear campos de fuerza capaces de resistir tanto como un muro de concreto con un metro de grosor por lo que avanzar no fue ningún problema al igual que liberar a sus compañeros de su misma edad.

-Cambiate.

Shoyo le lanzó una gabardina de un verde oscuro a su pareja y compañeros.

-Según los registros en la computadora no somos el único laboratorio.

Hitoka ingresó a la computadora y obtuvo la información necesaria.

-No sé ustedes, pero yo y Tobio iremos por esos laborstorios.

Shoyo se pintó una lágrima debajo de su ojo derecho y una corona al revés en la misma zona pero del lado izquierdo en Tobio. Muchos chicos se fueron buscando la paz que no obtuvieron siendo prisioneros de gente ambiciosa.

-Que tal si esos tipos tenían familia.

Tobio le miro, ya estaban muertos como para pensar en ello, ¿no?

-Y quizás tenían hijos de nuestra misma edad pero jamás pensaron en eso y ahora deja de mortificarte, me niego a aceptar que te dejaras vencer ahora.

Lo sostuvo por sus prendas y se inclino para besarlo a lo que Shoyo caía rendido, solo bastaba un beso para dejar todo la conciencia a un lado y servir a los pies de su reina.

-¡Hasta donde la noche deje de caer!

Entrelazó sus dedos a los de su pareja y con su pequeño grupo de chicos avanzaron por la ciudad, los demás solo los veían como un grupo escolar, no unos chicos con capacidades superiores dispuestos a desmantelar un muy bien remunerado experimento.