Dark

17. Quiere verte

El codo de alguien que desconozco chocó contra mi costilla y casi me tira.

Estúpida gente que no sabe bailar y que le dan codazos a personas como yo.

- ¡Fíjate estúpido! - Rugí enojada.

Seguí caminando entre la multitud tratando de encontrar a Kyle o Melanie.

Era domingo y habíamos decidido salir de fiesta, celebrando que casi salíamos de vacaciones y olvidaríamos la fastidiosa escuela. Tuve que casi rogarle a Melanie para que aceptara venir con nosotros. Era un milagro que no tuviera que hacerlo. Esta vez la rubia aceptó rápido, aunque no le había dirigido la palabra a Kyle desde que llegamos; algo que era normal para los tres.

Había marcado a Me cuando llegué a casa después del atercado con Scott, ella me había dicho que estaba perfecta y se extrañó cuando pregunté por su estado.

- ¡Venus! Aquí.

La voz venía detrás de mí, unas cuantas personas atrás.

Melanie estaba sentada frente a Kyle en una mesa del club. La rubia estaba bebiendo lo que parecía agua pero sabía perfectamente que no lo era y Kyle tomaba una lata de cola.

Caminé hacia ellos, otra vez esquivando a personas.

- ¿Dónde estaban? - Pregunté cuando los tuve enfrente.

- Estuvimos aquí todo el tiempo, hasta te vimos pasar hacia allá. - Melanie señaló hacia donde yo estaba.

Kyle dejó su refresco en la mesa y se levantó para besar mi mejilla.

- Mataré al tipo que te golpeó. - Dijo a mi oído.

- Que no sea literal. - Respondí igualmente.

Él rió un poco y me invitó a sentarme.

Me senté en una silla junto a él y miré hacia la muchedumbre.

- ¿Qué tanto hacías? - Preguntó Me tomando de su bebida.

- El baño estaba lleno. - Me encogí de hombros.

Esta vez me había decidido por unos jeans ajustados y una blusa sin ninguna decoración, en cambio Melanie había traído un vestido de vuelo azul marido, con brillos en la falda del vestido y ajustado en el corsé y Kyle, bueno Kyle vino como Kyle: vaqueros negros y camisa azul marina.

- ¿Quieres algo de tomar? - Preguntó él.

Negué con la cabeza.

Hoy no se me antojaba nada de tomar.

Melanie me dio unos toquecitos en el hombro, la miré e hizo una inclinación hacia la multitud de cuerpos en movimiento, hacia un chico que acababa de entrar al club.

Era un chico alto, de cabello castaño.

- Mira sus hermosos ojos. - Susurró a mi oído.

Miré esta vez sus ojos y vi que Melanie tenía razón, sus ojos eran de un color café claro. Muy hermosos.

El chico nos sonrió levemente y miré a Melanie, la chica estaba roja como un tomate. Kyle nos miraba frunciendo el ceño.

- ¿Qué pasa? - Preguntó.

- Nada. - Respondimos al mismo tiempo.

Kyle miró hacia atrás y vio al chico que mirábamos las dos. Alzó una ceja.

- Espero que vean al chico que baila como pez fuera del agua.

- Sólo esperas que Venus no vea al chico que acaba de entrar al club. - Soltó Melanie. - Está bueno. - Se encogió de hombros.