MI PRECIOSO TESORO

CAPÍTULO 25 VOLANDO A CASA

Precioso Tesoro y Pierre llevaron a cenar a las chicas para despedirlas. Maya y Jamie no quisieron acompañarlos, tenían que reunir dinero. Aunque parecía un buen pretexto, todos sabían que, solo querían pasar más tiempo a solas, sin el abuelo chaperón. No contaban con la señora Chang, que era suficiente para cuidarlos.

Recién comenzaban a comer, cuando se presentó la sorpresa, algo desabrida para el gusto de las jóvenes, por tratarse de un hombre mayor de treintaicinco y desconocido. Las presentaciones formales no respondían la pregunta de las chicas, al verse rodeadas por tres hombres ancianos, a su forma de ver adolescente, hasta que, Precioso Tesoro les explicó. Eric Callaghan llegaba en nombre de la universidad a ofrecerles dos becas estudiantiles completas. Solo tenían que decidir quiénes dos aceptarían.

Saliendo del restaurante, tres "venerables ancianos" y tres adolescentes. Bromeaban y reían, olvidando sus diferencias generacionales. Esclarecieron dudas, hicieron planes, y asignaron roles.

Estaban a punto de despedirse cuando Nailys y Linda recibieron un mensaje en el chat grupal. Linda, no esperó para ver su celular. Su sorpresa fue grande, al darse cuenta que, Madelehing les había escrito. Inmediato lo hizo saber al grupo. Todos se aglomeraron sobre la pantalla para leer el mensaje.

Madelehing les informaba que se encontraba bien. Les ofrecía una disculpa por haberse ido sin avisar. Las buscó en la fiesta, pero no las encontró. Debido a la convulsión sociopolítica de su país, debía retornar inmediato, antes que se cerraran las fronteras. Contactó a la aerolínea para cambiar su vuelo, y pidió al hotel un auto para ir por su equipaje y luego al aeropuerto. Se comunicó en cuanto tuvo oportunidad. Agradeció la amistad y les informó que no sabría cuándo podría volver a comunicarse.

Un sentimiento de tranquilidad fue mutuamente compartido, al saber que Madelehing estaba bien. Era evidente que todos estaban preocupados, pero no lo expresaron.

Los señores dejaron a las jóvenes en el aeropuerto. En menos de tres horas una chica portuguesa y dos chicas colombianas iban de vuelta a sus respectivos hogares. Dos de ellas con un plan a futuro diferente del que imaginaban. El viaje les había dejado buenas experiencias, algunas no tan buenas y otras bastante amargas. Pero respecto a Isa, no volvían con las manos vacías. Antes de dejar el hotel les fue informada la situación, por parte de los oficiales a cargo. Al menos era tranquilizador saber que estaba viva. 

NOTA DE LA AUTORA: PRÓXIMO CAPÍTULO GRAN FINAL....

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