EN EL PRESENTE 1 Y 2

CAPÍTULO 29

#enelpresente2
Capítulo 29
Habían llegado en caravana los 4 vehículos pertenecientes a Sesshomaru, Irasue, Oriushi y Takashi.
Bajaron al mismo tiempo y llegaron a la recepción de Mitsubishi motors corporation.
-señores, no pueden pasar!- dijo la joven rubia encargada de la recepción al ver a los de la competencia entrar como si estuviesen en su casa.
-no me digas, y quien es esa o ese valiente que nos va detener?- dijo la ojidorada pasando de largo y caminando hacia el ascensor.
La joven sólo negó con la cabeza al ver cerrarse las puertas del ascensor con los 4 personajes indeseables; tomó el teléfono y llamó a su jefe quien estaba en el último piso.
-señor Taisho, acaban de llegar el señor Tanaka con su madre y 2 varones más; les dije que no podian pasar y aún así subieron al ascensor y se dirigen a su oficina- informó la joven a su jefe.
*No te preocupes, aquí los recibo gustoso* fue la respuesta del ojiazul.
-disculpeme señor- dijo la chica antes de cortar la llamada.
El tono del ascensor anunció la llegada del cuarteto intruso. Masahiro los esperaba en la puerta de su oficina. La puerta se abrió y dejó ver a dos ojidorados estoicos y sus dos acompañantes.
-bienvenidos!- dijo al verlos -los estaba esperando- agregó.
Salieron del ascensor y caminaron directo al ojiazul.
-en donde están?- preguntó la hermosa ojidorada mirando fijamente a Masahiro.
-no se de que me hablas Irasue- respondió.
-podemos hacer esto por las buenas y sin tanto alboroto o podemos destrozar todo esto en cuestión de segundos, tú decides- amenazó Irasue frunciendo el ceño.
-hablando se entiende la gente, cual es el motivo de su visita? Aún sigo sin comprender- dijo el joven de ojos azules esbozando una sonrisa.
-para donde se fueron mi mujer y mis hijos?- preguntó el ojidorado que a super velocidad se acercó al ojiazul.
-sesshomaru, no me digas que no lo sabias- respondió sonriente.
-saber que?- siseó.
-tu mujer y tus hijos se fueron con Inuyasha- soltó con el ceño fruncido. Los ojos dorados cambiaron de inmediato a un rojo carmesí.
-para donde?- gruñó furioso y tomando a Masahiro por el cuello. Éste sólo sonrió complacido al ver que sus palabras habían causado el efecto deseado.
-sueltalo Sesshomaru!- la voz de Hiromi hizo voltear al aludido.
-tu no te metas!- espetó Irasue parándose frente al kitsune.
-no lo sé- respondió Masahiro. -y aunque lo supiera no te lo diria- agregó haciendo enfurecer aún más a sesshomaru. -sabes que digo la verdad, puedes oler la mentira a kilómetros- dijo soltandose del agarre en su cuello.
-los encontraré y cuando eso suceda... Lo mataré con mis propias garras!- espetó molesto caminando hacia el ascensor, Irasue le siguió al igual que Oriushi y Takashi; salieron de Mitsubishi motors corporation y regresaron a la mansión.
Mientras tanto la avioneta hacia una escala para recargar combustible.
-niños, no les gustaría ir a comer?- preguntó el ojidorado poniéndose en cuclillas frente a los niños.
-no tengo hambre- fue la respuesta de Daiki, no había que ser adivino para darse cuenta de que el pequeño estaba enojado y no le agradaba la compañía de su tío en éste viaje.
-yo si quiero!- respondió alegremente la pequeña azabache. -Daiki, no seas tan agrio; ven con nosotros- agregó mirando a su hermano.
-hmph.
-vamos Daiki, ésta es una oportunidad para conocernos- dijo Inuyasha poniéndose de pie y cruzándose de brazos.
-Daiki- la voz de su madre hizo que el pequeño volteara hacia ella. La joven azabache extendió su mano y el pequeño suspiró resignado al tomarla; caminaron en silencio hacia algún sitio de comida rápida y disfrutaron de unas hamburguesas.
-no piensas comerte eso?- preguntó Inuyasha tomando un puñado de papas fritas de la porción de Daiki.
El pequeño ni se inmutó pues no pretendía comer nada que viniese de su tío y mucho menos después de ver como éste miraba a su madre.
-inuyasha, no seas glotón!- regañó la azabache al ver al hanyou tomar otro puñado de papas. Fué en ese momento que se dió cuenta de que el ojidorado aún conservaba el collar de subyugacion.
-no molestes kagome, tu hijo no quiere comer y yo si tengo mucha hambre- respondió el joven hanyou tomando de un solo trago su lata de soda.
-por que aún llevas puesto ese collar?- preguntó la joven pues no comprendía el por qué ya que él había tenido una relación con Kikyo y ella bien pudo haber deshecho el hechizo y dejar libre de aquel collar al ojidorado.
Al escuchar la pregunta Inuyasha se atragantó y tuvo un ataque de tos.
-tio estás bien?- preguntó la nena al ver en ese estado al peliplateado.
-es un idiota- espetó Daiki poniéndose de pie.
-Oye!- exclamó kagome en tono de regaño.
-Yo no quise que ella me quitara el collar- dijo el joven hanyou al reponerse. -era el único recuerdo que tenía de ti- agregó poniéndose de pie.
-como dices!- estaba roja hasta las orejas. -pensé que odiabas ese collar.
-y como no iba odiarlo si cuando estabas enojada conmigo te desquitabas estampandome contra el suelo!- reclamó frunciendo el ceño.
-es que tú siempre fuiste tan impertinente y grosero; no me dejabas de otra, aún recuerdo cuando te ibas a buscar a Kikyo y me dejabas como tonta con los muchachos o cuando me esmeraba cocinando para todos y tú solo pedías tus malditas sopas instantáneas!- repuso muy molesta la joven azabache.
-y tu te ponías celosa de verlo con esa tal Kikyo? Que demonios pasó entre ustedes dos?- preguntó Daiki frunciendo el ceño.
-ustedes... Tuvieron una relación?- preguntó Rin poniéndose de pie.
Ambos adultos se pusieron rojos cual tomates y dieron la espalda a los niños.
-inuyasha, eres un idiota!- exclamó kagome molesta pues se habían puesto en evidencia ante los pequeños que aún permanecían expectantes.
-y yo por qué? Tu eres la tonta que empezó a hablar de este tema!- respondió el joven hanyou volteando desafiante hacia la azabache.
-no me digas tonta, tú eres el tonto que decidió quedarse con ese maldito collar puesto!- gritó desafiante.
-la única tonta aquí eres tú por casarte con el estúpido de Sesshomaru!- gritó el hanyou y al darse cuenta de lo que había dicho abrió los ojos como plato y su boca formó una perfecta o.
-no te voy a permitir que te expresas así de mi padre!- espetó el furioso niño quien ya preparaba sus garras venenosas.
-inuyasha... ABAJO! ABAJO! ABAJO! ABAJO! ABAJO! ABAJO! ABAJOOO!!!- gritó Furiosa la joven azabache y a su vez se sorprendió al ver que el hechizo aún funcionaba.
Los niños se quedaron petrificados al ver el efecto de esa simple palabra.
Segundos después kagome y los niños salieron del local dejando estampado contra el suelo al hanyou bocón.
-maldita seas!!!- gritó el ojidorado tratando de ponerse de pie.
Toda la gente que estaba en aquel local no comprendían lo que habia sucedido puesto que no hablaban el idioma de aquel singular cuarteto.
Minutos después volvieron a abordar la avioneta y continuaron su largo viaje; aún tendrían que hacer alguna que otra escala pues no estaban ni a la mitad del camino pero el hanyou prefería ir haciendo escalas antes que pasar demasiadas horas soportando el espantoso mareo que le causaba volar en aquellos aparatos... Juraba que de no ser tan largo el viaje él mismo se encargaba de llevar sobre su espalda a la azabache hasta su destino; los niños le importaban cinco pues le recordaban que su adorada kagome tenía una relación con su estúpido medio hermano.