Tiempo había pasado, Jean se sentía muy bien en brazos de su alfa. Protegido, amparado, se sentía querido. El contacto entre ellos era realmente lo que quería, dejarlo no estaba en sus planes. No importaba si a su padre no le gustaba la idea, el estaba enamorado, aunque se oyera raro se había enamorado del hombre que lo compró cual mascota.
Flash back
—es todo papá, deuda pagada.
La última parte del dinero estaba siendo entregada en unos callejones. Por fin se libraba de la carga de estar fingiendo.
—si hijo, muchas gracias —Steve beso su mano —pronto iré a sacarte de esa casa hijo
Jean ya había terminado de juntar el dinero para la deuda de su padre, como estaba prometido debía sacarlo de la mansión, alejarlo de Sebastián.
El ya no quería eso.
—eh No, papá... Mira esta bien yo... quiero quedarme con Sebastián — declaró Jean algo nervioso. Había buscado a Steve mientras huía del susodicho precisamente para escapar pero claro eso fue antes de enamorarse de el.
La cara de su padre era extraña, parecía estar procesando todo muy lentamente.
—¿acaso te gusto ser su puta? —siseo, su padre le dijo puta así con todas sus letras.
—pa-
—Alex regresó! — interrumpió su padre—regresl por ti Jean, si es por el dinero que estas con Sebastián no hay problema Alex también tiene y en demasía.
El menor no podía creer las palabras de su progenitor ¿por el dinero de Sebastián? Claro que no, ¡jamás! ¿A quien Diablos le importa el dinero? Si de amor se trata, eso puede chuparle los huevos. Además ¿Alex?
—a mi que carajos me importa el dinero papá... Que tiene que ver alex en todo esto? No lo he visto en tanto
Alex westall su viejo amor de infancia, a los 9 años desapareció él y todo su familia del barrio, nunca volvieron a verlo o a tener contacto si quiera.
—El volvió y está buscándote Jean,—el alfa sostenía por los hombros al menor—si te juntas con el podríamos olvidarnos de todos nuestros problemas.
En un brusco moviendo Jean se soltó de ese agarre.
—no haber papá, no son "nuestros" —tenía razón no lo eran Jean solo ayudo —tu te metiste en problemas intentando prostituirme. Lo siento pero ya no quiero a Alex ahora estoy con Sebastián y quiero que seguir así.
—eres un tonto Jean, siempre lo fuiste...
Fin del flash back
Recordar las palabras de su "querido padre" era doloroso ¿como puede pensar eso de el?.
No importa.
Sebastián pronto despertaría, quería aprovechar el mayor tiempo posible cerca suyo, respirar el delicioso aroma que este desprendía. Sentir sus fuertes brazos rodeando lo en ese fuerte abrazo que estaban dándose.
Estaban tan cerca, así dormido Sebastián se veía muy... Tierno, si eso. Tranquilo no parecía alguien capaz de hacerte daño.
—te quiero —susurro, acariciando los mechones del cabello en el mayor— ¿Sentiras lo mismo que yo?.
—si, Jean — el azabache despertó —siento lo mismo amor —en un rápido movimiento tomó sus mejillas y lo beso. Jean no podía creer que pasaba, estaba hablando solo para si mismo y ahora se había confesado.
Sus manos incitaban a Jean para subirse a horcajadas encima suyo y así lo hizo.
Sus risas inundaron la habitación en segundos por las cosquillas de parte del mayor. ¿Que mejor manera despertar que reír con la persona que amas? Ninguna.
—Sebastián para! —pidió el omega, con la reparación entre cortada y las manos en el pecho del nombrado.
— ¿ya te cansaste? — a Sebastián le encantaban todas las cosas nuevas que están pasando en su vida, Jean ese omega que tenía en su mansión ahora lo quiera, no, no solo eso, lo amaba. Solo faltaba algo para tener la felicidad oficial.
—Jean —este se inmutó de inmediato —eh... quiero que esto se haga de la manera correcta
Este ladeo su cabeza intentando entender.
—¿Quieres ser mi novio? —comido por los nervios, tomo las manos del menor. —se que tienes ya mi marca y tal vez es tonto preguntar pero...
—Si Sebastián, si quiero
El beso que se dieron después de eso fue poco más de uno casto, no podían evitarlo pero se fue más allá de uno tranquilo convirtiéndose en una algo torpe y a la vez sensual.
Con descaro Jean frotaba sus caderas en la hombría de su ahora novio oficial. Sus actividades sexuales como pareja alfa y omega no faltarian en los siguientes días...
—ah! Me haces feliz —el alfa estaba respirando agitado después del tremendo beso del menor ¿cuando había aprendió a hacerlo tan bien?. — gracias por aceptar.
—¿te soy sincero?—asintió mirando sus lindos ojos verdes —te quiero Sebastián, tal vez estoy loco por quererte pero...
—shuu — el mayor beso sus labios para callar los malos pensamientos de su omega podía sentir por el olor que se estaba angustiado.—no estás loco, Jean yo te amo, mi amor eres el omega que robo mi corazón. Yo lamento tanto haberte conocido así por una maldita subasta —sus ojos comenzaba a cristalizarse —pero ahora no me arrepiento por que veo que eres mi destinado —al fin rompió en llanto. Es difícil ver a que quieres llorar pero su omega sabia como controlarlo para que no se sintiera mal.
Si lo había comprado eso lo sabemos pero ya era historia, se amaban.
—hey ya — comenzó a repatir besos en las manos que Sebastián usaba para cubrir sus rostro — amor... —fue cediendo poco a poco hasta que sus labios se encontraron. Esta vez Jean le haría ver el cielo.
No importa lo que diga su padre, si volvio Alex o quien sea, el solo iba amar a Sebastián.
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UN OMEGA ESPECIAL
Short StoryJean huyó de su casa cuando su padre intentó prostituirlo, lamentablemente cayó en manos de traficantes quienes no dudaron en ofrecerlo como mercancía fresca. Jean terminó expuesto en una subasta donde es encontrado por Sebastián, un alfa adinerado...