La Rosa Negra (Editando)

Epílogo

Nunca se debe vivir en el pasado. Hay que vivir el presente sin pensar mucho en el futuro... Sólo se trata de vivir el momento antes de que el tiempo pase y te arrepientas de no haber disfrutado esos buenos momentos.

La vida es un riesgo y hay que vivirla todos lo días como sí fuera el último. Porque puede ser así.

Yo nunca pensé en mi futuro y mucho menos viví mi presente. Sólo me quedé estancada en mi pasado tratando de intentar cobrar todo el daño que sufrí en mi infancia.

Cuando vi una pequeña oportunidad, un pequeño rayito de luz. No la tomé, sólo seguí con la idea de una absurda venganza, pero lo peor es que trabajé para aquel que estaba dentro de mis traumas sin yo saberlo.

La vida al parecer me sigue dando oportunidades para seguir adelante, pero ya no tengo ningún propósito como tal. He estado tantas veces cerca de la muerte que hace mucho deje de temerle.

No tengo idea de cual es mi propósito; no es vida cuando tienes que pasar el resto de tú vida siendo una prófuga de la justicia. Pero no puedo ser egoísta cuando tengo personas a mi lado que siempre han estado a mi lado sin importar la situación, y ahora estamos juntos en esto.

-¿Estás lista? - Viktor entra a la habitación interrumpiendo mis pensamientos.

Suspiro con cansancio. Despego mi mirada de hermoso paisaje de las montañas de Noruega para fijarla en él - Sí, ya puedo caminar sola. Ya no necesito las muletas - me levanto con cuidado y me acerco a él.

- Pero igual necesitas algo de apoyo, no queremos que sufras otra crisis - me tiende su brazo, el cual acepto con gusto.

Ambos estamos vestidos un poco formales pero abrigados por la baja temperatura que está haciendo afuera. Muy parecida a la de Rusia.

- Salen que no se deben preocupar por mi, ya tenemos de quien preocuparnos y mucho más hoy. Hoy es sólo el día de Alex y Ánia, o debería decir, Antoney y Selina. Están completamente listos las identidades, ¿no? - pregunto. Y salimos de la habitación, debemos dirigirnos a donde será la ceremonia, que comenzará en unos minutos.

- Claro que sí, sino no fuera hoy la boda. Que por cierto debemos llegar ya. Alex está que se desmaya - se burla - ¿me quiere hacer el honor de acompañarme está hermosa señorita?

- Con mucho gusto joven Demetry - le sigo el juego.

Será una ceremonia muy pequeña en la iglesia del pueblito en el que nos refugiamos.
Al entrar en la iglesia se siente un poco más de calor por el fuego de la chimenea. Dejamos nuestros abrigos en un perchero junto a la puerta.
Todo se encuentra decorado para una boda sencilla, sólo unas flores y telas por allá y por acá.

Sólo estaremos los que quedamos: Viktor, Eleanor, Froy, Emet, Alisson (que la encontramos tirada a un lado del camino la noche que todo ocurrió. Llegamos a tiempo antes de que muriera desangrada por un disparo que le dió Nikolay), Lauren (la que ayudó a Emet a sacarnos de ahí. Y también actual pareja de Eleanor), unos cuántos recientes del pueblo que nos acogieron con gusto, el cura y yo. Pero obviamente los novios, a menos que Ánia se arrepienta en el último momento.

Yo seré la madrina y el padrino será Viktor. Como desearía que los otros estén con nosotros, y en especial Jenny; le quitaron la oportunidad de ver a su hermana vestida de novia y ver a su futuro sobrino crecer...

Me contaron como morí, como me revivieron en el pequeño hospital donde pudieron llegar.
Pero no desperté hasta una semana después, tenían de haber llegado sólo cuatro días aquí. Tuvieron que sacarme junto con Alisson a escondidas del hospital porque estaban muy cerca las autoridades.
Todo fue muy rápido y duro para todos. Cuando desperté fue como un milagro para ellos, ya no tenía esperanza de vida. Al ser un pueblo pequeño y muy apartado del mapa, no tiene los insumos necesarios para mantenerme con vida. No podían hacer más nada porque no podían trasladarme a una ciudad sin el peligro de ser encontrados.

Después de todo eso, una de las señoras más respetadas y con más edad del pueblo dijo que Ánia está embarazada. Alex se desmayo de la emoción y cuando despertó no se hizo esperar nuestras burlas y felicitaciones.
Tendremos un pequeño integrante a la familia.

***

- ¿Acepta usted, a Selina Ravik como su esposa. Para amarla, respetarla en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe? - El sacerdote le pregunta a Alex. Desde lejos se puede notar su felicidad e ilusión en su mirada.

- Acepto - responde con una gran sonrisa colocandole el anillo.

- ¿Y usted acepta a Antoney Galek como su esposo para amarlo, respetarlo en la salud y en la enfermedad hasta que la muerte los separe?.

- Acepto - acepta Ánia con aguantando las lágrimas y le pone el anillo a Alex.

- Ahora los declaro marido y mujer, puede besar a la novia - al terminar, Alex no se esperó ni un segundo para plantarle un gran beso y nosotros para aplaudir felicitandolos - Les presento al señor y señora Galek.

Después de todo en los peores momentos siempre hay un rayo de luz aunque sea lo más mínimo.
Aquella es la que se convierte en nuestra esperanza, que nos ayuda a seguir y disfrtar de las pequeñas cosas que nos va otorgando el destino.

Nuestra familia está más unida que nunca. La unión de dos integrantes, más la llegada de dos más, resultó que Alisson también está embarazada. Lo que significa que es un Smirnov, hijo del bastardo de Nikolay.

Como extrañaré las peleas de Jenny con Alex, el como estaría ahorita porque Ánia cambió su apellido por el de Alex. Aunque sean los falsos. Y el como Froy estaría babeando atrás de ella.

No es tiempo de llorar, apenas es que nuestra vida empieza y nada nos asegura que no llegará otro tormento a nosotros.

No se que será de Alek y sí me está buscando para encerrarme. El que Nikolay haya quedado con vida sí me asegura que buscará venganza, no importa que lo hayan encerrado y debo prepararme para cuando se le ocurra aparecer.