La Verdad

Capítulo 23: Notificaciones

Verónica's POV

Llevamos hablando casi un mes, y la verdad que tengo muchas ganas de conocerla, y creo que pronto podré hacerlo, pero aún no lo sé porque no me contesta a los mensajes. Todavía es por la mañana y aquí estoy sentada en mi cama mirando el Instagram y el Whatsapp, porque me aburro tanto que ya no sé ni qué hacer, de repente me llega una notificación, es una amiga mía enviándome un mensaje.

- Rebeca: Hey!, ¿haces algo hoy?.  - por fin tendría planes y saldría de mi casa, no me demoré mucho y en seguida la contesté.

- No, ¿por qué ?, ¿tienes algo pensado? - de verdad que necesito salir un rato.

- Rebeca: Bueno, no, pero podemos irnos por ahí a dar una vuelta y hablar un rato, que creo que tienes algunas cosas que contarme - menos mal que ella no me vio, pero me puse un poco colorada y sin poder evitarlo sonreí como una tonta - ¿entonces?, ¿qué me dices?.

- Que sí, quedamos, y que además tienes razón, tengo algo que contarte. ¿A qué hora quedamos?.

- Rebeca: ¿En una hora?.

- Vale - le respondí muy emocionada - hasta ahora.

No sé por qué pero estaba muy nerviosa, a lo mejor era el hecho de que le iba a contar a mi amiga todo lo que estaba pasando. Me levanté de un salto de la cama y corrí hacia el baño, tenía que ducharme, secarme el pelo, vestirme, maquillarme un poco...Tenía muchas cosas que hacer y en muy poco tiempo. Hice todo lo más rápido que pude, quedaban veinte minutos y como no sabía qué hacer me quedé en el salón con el móvil esperando a que fuese la hora, porque cada vez que quedamos lo hacemos en la puerta de mi casa ya que a ella la pilla de camino, y luego de ahí pues nos vamos a donde sea. Mientras esperaba a que viniera me llegó una notificación al móvil, lo miré y era una solicitud de amistad en Instagram de un chico, me metí en su perfil para ver como era y la verdad que no estaba nada mal, entonces sin saber por qué le di a aceptar la solicitud, seguí mirando sus fotos y encontré una en la que aparecían este chico y una chica la cual supuse que sería su novia ya que aparecían muy juntitos en una discoteca, pero no tuve tiempo de ver nada más porque el timbre comenzó a sonar así que me levanté y fui corriendo hacia la puerta.

- Rebeca: Hola - estaba muy sonriente, pero a la vez su cara decía lo intrigada que estaba porque le contara todo lo que estaba pasando.

- Hola, ¿nos vamos?

- Rebeca: Sí, venga vayámonos.

Mientras caminábamos le empecé a contar todo, desde que comencé a hablar con esa persona hasta lo situación que había ocurrido unos minutos antes de que ella apareciese, su cara de asombró era lo mejor, no podía para de reírme. Me dijo que estaba genial, que le tenía que haber contado eso mucho antes y que si no quería ir sola a ver a esa persona que ella me iba a acompañar, y respecto a lo del chico me dijo que es muy guapo y que está muy bueno. Durante ese tiempo que estuve con ella el chico me escribió un mensaje

- XXX: Hola, me alegro de que hayas aceptado mi solicitud, es que vi tu foto de perfil y no lo pude evitar. - yo no sabía qué decirle, pero Rebeca sí, me quitó el móvil y le escribió algo, pero no me dejaba ver que es lo que estaba escribiendo hasta que se lo envió.

- Hola, tú también eres muy guapo. - por qué tenía que escribirle eso, me estaba muriendo de la vergüenza y todo por su culpa.

- XXX: Eso me dicen todas. - puff, ya empezamos con los chulitos y creídos de siempre, ¿porqué?, pensé. - ¿cuántos años tienes?. - esta vez contesté yo.

- ¿Eres muy chulito y muy creído tú no? - ni siquiera le dije la edad que tengo, ¿qué se habrá creído este que es diciéndome eso?.

- XXX: Bueno, depende. No me has contestado a la pregunta. 

- ¿Y si no quiero contestar? - de verdad me estaba poniendo nerviosa, y lo peor de todo era sonrisa tonta de mi amiga mirando la conversación y mirándome a mí. - ¿qué pasa?, es que es muy idiota, no le pienso decir nada.

- Rebeca: Ya, bueno, a ver que te contesta. - a los dos segundos me llega otro mensaje.

- XXX: ¿Qué pasa?, ¿que tienes miedo o algo?, no te voy a hacer nada ehh, es sólo por saberlo. - ahora sí que me estaba sacando de mis casillas, por qué tienes que ir de listillo, no le aguanto.

- No, no tengo miedo.

- XXX: ¿Segura?. - ay de verdad este chico es estresante.

- Sí, muy segura.

- XXX: Pues yo no estoy seguro de tu respuesta, así que...¿qué tal si nos apostamos algo a que lo que dices no es verdad? - de verdad me acabo de dar cuenta de que esta es la conversación más estúpida que he tenido nunca. - ¿qué dices? - no sabía que contestarle entonces miré a Rebeca que me dijo que a qué esperaba para decirle que sí, que apostemos algo.

- Está bien, apostemos algo.

- XXX: Como vivimos en la misma cuidad, porque lo he visto, ¿por qué no quedamos mañana en una discoteca y ahí vemos qué apostamos?. - a mí estas cosas no me gustan, pero por la cara de mi amiga supe que ella sí que quería saber qué pasaría, así que no me quedó otra opción.

- Está bien quedamos, pero que conste que no es porque yo quiera, esto es por una amiga pesada que tengo que me está insistiendo.

- XXX: Bueno, pues dale las gracias a tu amiga por haberte convencido, porque veo que eres un hueso duro de roer, y creo que sin su ayuda me hubieras dicho que no. - rodé los ojos y le contesté.

- Lo haré, y sí no soy de esas que se dejan convencer tan fácil.

- XXX: Ya lo veo, tú eres especial. Luego te paso la ubicación y la hora vale.

- Okay. - sé que fui algo seca, pero es que no sabía que decirle, se cree que por que me diga esas cosas, que seguro que se lo dice a todas las chicas, incluida a su novia, la de la foto, voy a caer rendida ante él, pero no. Ya sé que no debería quedar con él porque no le conozco de nada, pero será en una discoteca, habrá mucha gente, no va a pasar nada, aunque tengo que aceptar que me da miedo y a la vez intriga.