Parte narrada
Esa misma tarde Verónica le contó a sus amigas todo lo que la pasaba, les dijo que no estaba segura sobre Jorge, que no podía dejar de pensar en otra persona y que esa persona era una chica (aunque ellas ya sabían que Verónica es bisexual), y también les contó todos esos problemas que había tenido con sus padres y demás.
Pero aquella tarde ese no fue el único momento en que Verónica se sinceró con alguien, sino que para poder aclarar sus dudas llamó a Jorge para quedar con él y así poder hablar sobre lo que pasó y lo que les pasa. En esa conversación Jorge le admitió que le gustaba, pero que si ella no estaba segura, no tendría problema, la podía esperar, y fue justo en ese momento cuando ella sin quererlo le dijo que lo sentía pero que ella no sentía nada por él y que sólo podrían ser amigos. Verónica en ese momento ni siquiera era consciente de lo que acababa de decir, simplemente esas palabras salieron de su boca sin permiso y ya. Aunque para su sorpresa la reacción de Jorge no fue tan mala, él le dijo que no se preocupara, que quedarían como amigos y ya, que no había ningún problema.
Antes de seguir contándoos lo que pasó aquel, quería haceros una pequeña pregunta, aunque sé que no me responderéis: ¿Alguna vez os habéis sentido tan agobiados, habéis sentido tanta presión dentro de vosotros, que sin querer habéis acabado explotando y justo en el peor momento posible?, pues eso es justo lo que a ella le pasó, aunque sus padres y su hermano ya supieran su orientación sexual, había alguna cosa que no sabían y es que, uno, ella estuvo enamorada de Olivia durante mucho tiempo, dos, no saben ni de la existencia de Jorge ni de que fue a la discoteca porque quedó con él ni tampoco del beso obviamente. Y por último, esto es algo que ni sus padres y hermano sabían, ni ella tampoco, y que no tiene que ver con lo otro, pero es algo que nadie sabía ni esperaba, y es que en el grupo de amigos de Jorge iba a haber alguien que le robase el corazón a Verónica.
Bueno la cosa es que después de haber quedado con sus amigas y haberles contado todo, Verónica llegó a su casa y nada más abrir la puerta sus padres estaban ahí, en el salón, discutiendo, como casi siempre, y lo peor es que cuando la vieron entrar esa bronca fue en su dirección, no sé si me explico. Los padres se pusieron a gritarla y a decirla que estaba muy rara y que les dijese ya de una vez que es lo que la pasaba, porque anda como si estuviera en las nubes, lo típico de los padres, que se creen que nosotros no podemos tener problemas, cuando los tenemos y de verdad, e incluso peores que ellos a veces. Y aquí fue cuando llegó su momento de explotar.
- Alejandro: ¡Te estoy preguntando!, ¡¿Quieres contestar?! - el padre ya estaba muy encendido de antes, y ver esa reacción por parte de Verónica no le ayudó mucho - ¡Verónica, te estoy hablando!,¡Contesta!.
- Verónica: Está bien, ¡¿Quieres que conteste?!, Perfecto, mira, ¡sabes qué es lo que me pasa, que estoy harta, harta de tener que escucharos pelear, de que luego me echéis a mí la culpa de esas discusiones, de que sigáis sin aceptar que me gustan los chicos y las chicas!. ¡Ah y si quieres saber todo lo demás, te lo voy a decir, hace unos años estuve enamorada de Olivia, durante varios años, hace unos días conocí a un chico, y si fui el otro día a la discoteca fue porque quedé con él, y ahora me gusta alguien vale!, eso es todo, bueno no, de hecho queda algo más, ¡estaba tan harta, tan cansada de estas situaciones de mierda, que hace unos días acabe haciéndome cortes en el brazo!, ¡¿contento?!
- Alejandro: ¿Pero qué estás diciendo? - el padre ni siquiera pudo terminar de hablar, Verónica se fue corriendo directamente a su cuarto - ¡Verónica, vuelve aquí! - y ahí se escuchó un portazo
Verónica no salió de su cuarto en ningún momento, no quería ver a nadie, no quería saber nada de nadie, y así se tiró una semana, una semana en la que no salió de su cuarto excepto para ducharse o comer, pero no fue ni al instituto ni a ningún otro sitio, sus padres tampoco la dijeron nada, ya están cansados de que ella haga lo que quiera y también están cansados de tener que decirla qué hacer, así que no la impidieron hacer lo que la diese la gana. Lo único que hizo durante esa semana fue quedarse en su habitación escuchando música, dibujando, y componiendo alguna canción, esas son las únicas maneras que ella había conocido de expresar lo que sentía, y en esos momentos sentía tantas cosas, que necesitaba expresarlas de alguna forma. Verónica a veces escribe en su diario, pero desde hace unos meses lo único que escribe en él es lo mismo, tristeza, dolor, sufrimiento y sobre todo soledad; se siente tan sola, tan abandonada que ya está tan acostumbrada a ello que ahora cuando se siente bien es cuando está sola en su cuarto.
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La Verdad
FanfictionEn la vida siempre hay circunstancias que hacen que dejes de ser tú misma para convertirte en alguien a quién si te miraras en el espejo no reconocerías. Pero tarde o temprano la verdad es descubierta.