09;Ben bestia

721 47 3
                                    

Qué había echo? ¿Porque me deje llevar por mis impulsos? Ahora tengo que hacer todo lo que Ben me ordené durante dos días

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Qué había echo? ¿Porque me deje llevar por mis impulsos? Ahora tengo que hacer todo lo que Ben me ordené durante dos días. He perdido todo el orgullo que me quedaba y ni siquiera puedo imaginar me lo que Benjamín tiene dentro de esa cabezota, se le podría ocurrir cualquier cosa y lo peor de todo es que no puedo negarme, tengo que cumplir mi promesa. Entre más rápido acabe esto, mejor será.

También tengo que ir a donde Simón para pedirle una disculpa por lo que pasó ayer, la verdad es que no se merecía esto.

—Buenos días Familia.— dije entrando a la cocina.

—Buenos días.— dijeron todos al unísono.

—Asi que tienes que hacer todo lo que el Rubio te ordené durante dos dias.— comentó mi padre soltando una carcajada mientras tanto mi familia lo imitaba.

—Escuchen no es divertido ok.—dije entre dientes.— Es un demente!!

—Tu también lo estás, no veo ningún problema.— está vez hablo Gwilym.

—No les preocupa que tenga que hacer todo lo que un chico me ordené.— dije y todos negaron.

—Hija, Ben no te hará daño.— mamá hablo.

—Solo te llevará a una fiesta Tranquila Sister.

El timbre sonó y corrí haber quien era, para mí mala suerte era quien menos esperaba.

—¿Qué es lo que quieres?.— dije recargando me en el marco de la puerta.

—¿Que me dejes pasar?

—Ben, vas a empezar tan temprano a darme órdenes.

—Asi es, ahora quiero que me dejes pasar para poder saludar a toda tú familia, Gracias.

Me hice a un lado para que el tonto Rubio pasara y saludara a toda mi familia tal y como lo dijo, solté un bufido y fui hacia ellos.

—Oh Camila antes de sentarte puedes preparar mi desayuno.— dijo y todos comenzaron a reír.

—Tienes manos puedes hacerlo tú.— dije soltando humo por los oídos literal.

—Te recuerdo que hiciste un trato que debes cumplir.— dijo para después mandarme un beso al aire.

Comencé a hacer el desayuno de Ben, mientras que el estaba sentado junto a mi familia hablando y riendo de pura estupidez que el decía. 

Mientras preparaba el desayuno de Ben  bestia observe que a lado mío había una lata de chiles y se me ocurrió la gran idea de agregar unos cuantos al sandwich de este, sabía muy bien que a Ben no le gusta el picante, pero le daría sabor a su desayuno.

—Aqui está.— dije entregándole el plato con su sandwich de habanero.— ¡Provecho!

—Gracias Mila qué linda eres.— dijo para después dar le un mordisco a este.— Te quedó muy bueno.

—Gracias, solo le agregué mayonesa, jamón, queso.— mientras yo le decía todo lo que contenía el sándwich el seguía comiendo hasta que llegó a los chiles.— y le agregué mi herramienta secreta...

Note rápidamente que Ben se tornaba de color rojo ahí supe que ya había tocado alguno de los chiles.

—Esto pica Camila.— comenzó a brincar como un loco, todos estábamos muertos de la risa.— necesito agua.

—Toma amigo.— dijo Gwilym entregándole un baso con agua y el comenzó a beber.

Mi teléfono comenzó a sonar y me aleje por unos minutos para contestar.

—¿Hola?— conteste

—Camila, soy Simón.

—Simón Hola, ¿Cómo estás?.— dije muerta de la pena.

—muy bien gracias, te hablaba para darte las gracias por la cena de ayer tu familia me agrada.

—A ellos también les caíste muy bien Simón, y te pido una disculpa por lo de Ben, en verdad lo siento mucho.

—No tienes que disculparte Camila, sabes que estoy de tu lado.— dijo y yo sonreí como una boba.— pero te hablé también por otra cosa.

—Dime Simón soy toda oídos.— dije y el río.

—T-te gustaría s-salir mañana, ir por un helado, al cine, a la biblioteca.— dijo con cierto tartamudeo.

—Claro Simón, te veo mañana en el centro comercial que está cerca de la biblioteca a las 2:00pm

—S-si, te veo mañana Mila, cuídate.

Fin de la llamada.

—¿Con quién hablabas?.— una voz detrás de mí hizo que saltara del susto.

—Eso no te incumbe Ben.— dije

—Si si me incumbe, eres mi mejor amiga y necesito saber con quien sales.— dijo tomándome del brazo.

—Es Simón, solo me habló para agradecer por la cena de ayer, la cual termino por tú culpa.— lo señale con mi dedo.

—¿Por mi culpa?.— dijo con indignación.— querrás decir por nuestra culpa.

—Como sea.— rodé mis ojos.— iré a terminar mi tarea.

—Cami, pasaré por ti a las 7:00 para ir a la fiesta ok?

—Si, si como tú digas.— subí las escaleras corriendo para no escucharlo más.

Entre a mi recámara y me tiré en la cama cubriendo mi cara con una almohada dando un pequeño grito de frustración. Necesito que esto termine ya. 

JUST FRIENDS? | ben hardy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora