Ellos dos

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Craig Tucker PoV

Había empezado un nuevo día de clases, y aunque debía concentrarme para asegurar buenas notas, en el fondo estaba más pendiente de Tweek.

Ya algunas personas del salón sabían que Tweek estaba en coma, sin embargo tratamos de ser lo más discretos que fuera posible, no armaríamos un alboroto con respecto a su situación. Kenny y Stan lo sabían, yo por supuesto también, Mackey y Garrison lo supieron al poco tiempo gracias a la intervención del rubio de gabardina naranja. Por los demás, nadie lo sabía, y era un problema, habían muchísimos rumores con respecto a Tweek. Lo que se dijo es que el rubio se ausentaría un tiempo debido a lo de sus padres, pero esta teoría se caía a medida que la gente iba a su casa y no encontraba respuesta.

Durante un tiempo se pensó que Tweek había muerto junto a Clyde, fue cuando el nuevo director, Garrison, tuvo que afirmar que Tweek estaba bien. ¿Porqué no dijo lo del coma? Prefería evitar más inconvenientes, ya tenía que lidiar con un estudiante muerto, un ex-director desaparecido, y una conmoción increíble tras el sicariato a los padres de Tweek.

Sin embargo, hubo alguien que fue más inteligente, que sabía que había un pedazo de la historia que aún no se contaba, una persona astuta y bastante analítica, Bebe Stevens.

Bebe fue más allá de lo que oía, indagó sobre el tema, estaba preocupada por Tweek, y al no encontrarlo decidió preguntarle al único que sabía de él mejor que nadie, yo.

Fue así como al llegar al salón de clases ella tomó el asiento de Token por un momento y empezó a hablarme.

–Hola Craig.

–¿Bebe? Bastante tiempo sin conversar contigo.

–Si. Estuviste fuera un buen tiempo recuperándote de la golpiza. Por lo menos tú viviste... Craig, seré directa. Tú eres hoy por hoy el más cercano a Tweek, ¿que pasó con él? y quiero la verdad.

–Tuvo que irse de la ciudad, corría peligro. Dijeron que posiblemente irían tras él después de lo que le pasó a sus padres.

–Ummm... No se si creer esa versión, digo, ¿a donde iría Tweek? él siempre dijo que no tenía más familiares, sólo a sus padres aquí.

–Mira, eso... No lo sé, discúlpame.

–Craig, en tu cara se nota que estás preocupado por él. ¿Sabes a donde fue? o no, otra pregunta, ¿hay algo que me ocultas?

–Bebe, yo... ¿Tú fuiste como la mejor amiga de Tweek antes, cierto?

–Si, ¿pero eso que tiene que ver?

–Bien, te voy a contar la verdad. Salgamos un momento del salón.

Nos pusimos de pie y dejamos el salón. La nueva maestra no llegaba aún, así que podríamos estar en el pasillo un momento, sólo para hablar con más tranquilidad.

Nos hicimos junto a la puerta, en la entrada, mirando antes que no hubiera gente chismosa que oyera la conversación.

–Bien, no hay nadie, te escucho.

–De acuerdo. Bebe, tienes que ser discreta con lo que te diré.

–Listo, no hay problemas.

–Veamos —Suspiré— Como sabes, Clyde murió tras una golpiza, yo estuve hospitalizado por algo similar, y Tweek no fue la excepción. Él no se fue, está aquí, pero internado en un hospital, en coma...

–¡¿Qué?! Maldición, ¿porqué no dijeron eso antes? va a cumplir poco más de un mes así, ¿no crees que es mucho tiempo?

–Bebe, tranquilízate. Yo estoy cuidando de Tweek, y ha evolucionado bastante.

–Entonces... Sabes dónde está exactamente.

–Si, voy a visitarlo todos los días, por eso siempre me voy algo más rápido que todos.

–No sé como lo vayas a tomar. ¿Puedo ir contigo a verlo? Prometo no decir nada, sólo quiero verlo una vez más.

–Claro, no hay problema. Está en el hospital general, 5to piso, ala de urgencias, habitación 17. Iría contigo pero como sabrás tengo que hacer varias cosas.

–Eso explica tu rostro.

–¿Eh?

–Estas demasiado estresado. Mírate, tienes ojeras, tu piel está pálida, has perdido peso. Creí que era por la recuperación, pero te ves muy mal. ¿Has comido bien?

–Bebe... No, eso no importa —Negué rápidamente— es Tweek lo importante.

–Sabes, me siento algo tranquila con esa actitud. No te enojes, pero pensé que tú eras el que había lastimado a Clyde, incluso pensé que le habías hecho algo a Tweek... Por eso tenía dudas. Como sabrás, Clyde estaba enamorado de Tweek, pero bueno, eso fue antes de morir...

–N-no, no lo sabía. ¿Enserio?

–Yo fui la primera y creo que la única en confirmarlo. Pero, nunca se dió, Tweek tenía a alguien en su corazón, alguien que lo ganó muy rápido, y ese fuiste tú.

–Entonces... Mierda, no, no sabía eso.

–Craig, no lo dije para que te molestes. Mira, dudé un poco, sabía que Clyde cambió bastante con Tweek cuando Kyle estuvo con él. Pero, contigo él fue diferente, sabía que lo harías feliz... Y incluso yo, quiero creer lo mismo.

–Yo haré feliz a Tweek, es lo único que me importa ahora, pero para eso necesito que él despierte.

–Bien, quizás si escucha otra voz pueda ayudar al asunto. Por cierto, espero que no te tomes a mal lo que pensé acerca de esto. No te conocía del todo, realmente tenía miedo.

–Es normal pensar eso, de hecho es inteligente. Ojalá al igual que tú no hubiera confiado en cualquiera...

Hice silencio, di por terminada la conversación. Volví al salón y me senté en mi lugar habitual. Token ya había llegado, estaba sentado justo a mi lado, y como de costumbre estaba encerrado en su mundo, con sus audífonos puestos.

–Ah, hola Craig —Dijo él mientras cambiaba la música.

–Hey Token, ¿como va todo?

–Bien, eso creo. ¿Que hay de tí hombre? te noto apagado.

–¿Yo? No, lo normal, nací con esta cara de mierda.

–Si... —Suspiró, colocandose los audífonos en su cuello— Yo digo lo mismo aveces. Pero tienes algo. ¿Quieres hablarlo o no?

–No es la gran cosa —Respondí cortante.

–Viejo, si no es la gran cosa no estarías así, igual si no quieres hablar no hay problema. Es sólo que entristeces el ambiente.

–¿Tanto te interesa?

–¿Somos amigos, no? Debería darme igual como esté un amigo según lo que dices.

–No...

–Bien, ahora cuéntame.

–Es Tweek.

–Tweek... Tweek... ¡Claro! el chico que se hace detrás mío.

–Si, no sé si tenga la posibilidad de volver a compartir con él, ni en la escuela o en el trabajo.

–Ahora que lo dices, se tuvo que ir de South Park mientras investigaban. ¿Trabajabas en el café de sus padres?

–Uno que queda por aquí, trabajaba con él.

–El impacto debió ser duro para él. ¿No has podido hablar con él?

–He intentado, pero jamás responde.

–Bueno, estaría igual si mis padres murieran... ¿Estás preocupado por Tweek?

–Si, algo así.

–¿Y ustedes se conocían de antes?

–No... Nos conocimos este año —Respondí tajantemente, con un suspiro y una mirada al otro lado.

Azabache de ojos azulesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora