AMAR(te); Julián Álvarez.

O18

No creo que haya mejor sentimiento que saber que la selección gane, y más si es con gran diferencia de goles. Ayer, veinticinco de mayo fue mi cumpleaños y también el partido de Argentina contra Sudáfrica.

Obvio que ahí estuvimos expectantes y muy ansiosas; aunque mi hermano no había convertido ningún gol, hizo un buen partido del cual tiene que estar orgulloso. Tampoco voy a mentir diciendo que el tanto que hizo Julián no me afectó en nada, porque la verdad es que me movió todo y eso me confunde muchísimo.

No lo había visto por unas semanas y eso ya era suficiente, o parecía ser, para despejarlo de mi mente, pero claro; el chico no puede ser más hermoso y cuando lo vi algo dentro mío hizo un click.

Estoy confundida, lo sé, pero analizando bien las cosas el mejor partido es Ivo, porque jamás me hizo sufrir ni la pasé mal con él. En cambio por Julián sufrí mucho; no nos olvidemos que tiene novia y que ella está acá.

En fin, hoy los chicos tenían día libre y algunos de ellos vendrían hasta el hotel donde nos estamos quedando y luego saldríamos.

Bajé hasta el hall para esperarlos y el único que apareció fue Julián.

- Hola- sonrió. Le devolví el gesto y me dijo que los chicos vendrían en cualquier momento.

Fuimos hasta el ascensor y entramos, cuando estaba por llegar a nuestro piso lo frenó.

-¿Qué haces?- pregunté asustada.

- Ya no aguanto más, Sol. No lo puedo soportar. - dijo acercándose cada vez más hasta que me acorraló entre su cuerpo y la pared. - me gustas, me encantas y me hace mal verte con otro.

- Julián- susurré- esto está mal. Delfina está acá, no puedo hacerle esto a Ivo y vos no se lo podes hacer a ella.

- Sol, por favor- nuestras respiraciones se cruzaban y en un solo movimiento nuestros labios también. - yo sé que sentís lo mismo por mi.

Si me costaba respirar, Imagínense lo que sería hablarle.

- Para- dije separándome de él- yo por vos siento un montón de cosas, pero ahora estoy  con Ivo y él me hace bien. No lo voy a dejar. Yo se que soy un capricho para vos.

- No digas eso- acarició mis mejillas- no sos un capricho para mi. Sol yo te amo, te amo de verdad y no estoy confundido. Por vos dejo todo.

No se en que momento pasó, pero sus labios estaban encima de los míos y yo tocaba el cielo.

Finalmente se besaron.

¿Les gustó?