Teoría Híbrida

Retorno

Al llegar el enorme gusano Skorge les mortro donde hubicarse para no ser devorados. Dentro de su 'Transporte' Tai revisaba la herida del Kantus mientras lo regeñaba.

Co: Ay el amor~ - Se ganó una mala mirada de Tai.
D: Seguro esta cosa no nos come? - Miraba en rededor.
Sk: Ya he estado aquí antes. - Se Recostó dejándose atender.

Marcus estaba muy callado, al Dom voltear a mirarlo esta estaba dormido con su Lancer de almohada.
Baird por otro lado Miraba de lejos a Byron sin decir nada.
Byron seguía dirigiendo al excavador sin notar la mirada pérdida de Raam.
El enorme Theron estaba sentado serca a su príncipe, cada tanto lo miraba. Si bien quería acercarse no se atrevía a interrumpir su labor.

M: Ya llegamos? - Se levantó desubicado.

Los demás no pudieron evitar soltar la risa.
Al salir estaban a las afueras de Jacinto. Dejaron irse al excavador y fueron al campamento Locust, mañana los Gears entrarían a la ciudad.
Tai se fue con el gran Kantus, con la excusa de bijilar su harida.

Co: Nos cree idiotas? Estamos rodeados de Kantus, cualquiera lo puede curar. - Miraba por donde se fueron.
BC: Algo me dice que no van a dormir... Precisamente. - Buscaba con la vista a su par de fastidios.
B: Buscando a tus novios? - Su voz espantó al chico haciéndolo caer de sentón.

La risa de Baird resonaba en aquel hundimiento.
Marcus al estar de nuevos junto a Jacinto no pudo evitar pensar en Anya, aunque hacerlo le produjera frustración.

By: Raam... Estas bien? - Tomaba en sus manos el rostro del Theron.
Ra: Mi... Príncipe. - Trataba de despejarse.
By: Te hizo daño mi voz? - La preocupación se veía en sus ojos.

Raam tan sólo negó, sujetando con cuidado las manos de Byron, apartándolo.
Eso hizo que el lado posesivo del chico saliera a flote de nuevo. Aprovechando que Raam estaba sentado, usó su propio peso para impulsarse y derribarlo quedando sentado sobre el estómago de éste.

By: Lo que dije abajo es cierto... - Miraba fijo a Raam.
Ra: Igual yo, mi príncipe. - Al no hallar donde situar las manos las dejos sobre los muslos del chico.

Byron sonrió victoriosos para luego reclinarse y regalarle un beso a SU guardián.

Ta: Quedate quieto grandote. - Regañaba al Kantus.
Sk: Sabes que me pueden curar? - Miraba al homínido sobre él.
Ta: Es imulsión... Es menos desinfectar antes de que te cure otro Kantus.

Skorge lo miraba hacer su labor, el homínido de veía lindo concentrado, aunque también enojado.
Notó el cuello de éste y antes de ser consciente, su cuerpo ya había actuado. Derribo a Tai dejándolo bajo suyo para luego inmovilizar sus brazos. Tai lo morava sin hablar, hasta que el Kantus deslizó una de sus piernas en medio de las soyas para acto geuido presionar con suavidad su entrepierna.

Ta: Dete.. Ah~ - Trataba de resistir.

Skorge lo ignoró ahora dando suaves mordidas a sus hombros, acompañadas de lametones a su cuello. Tai apenas si contenía sus jadeos, definitivamente ese Locust lo volvería loco. Una voz traicionera en su mente le dijo que talvez eso no sería tan malo.