La dragon slayer del sol

viaje en el tiempo

Nada mas ver a aquella mujer rubia de ojos cafés me asusté. Es idéntica a mi madre. Me senté en el sintio y mire a todos lados en busca de él ¡Ahí está!

Me arrastré hasta llegara donde se encontraba Kurai y lo abracé con todas mis fuerzas, el sigue dormido y parece cansado. Miré hacia atrás y aquella mujer me seguía viendo.

- no me hagas daño - pedí abrazando con fuerza a mi pequeño amigo el cual poco a poco comenzó a despertarse - por favor - pedí entre sollozos. Sentí como las patitas de Kurai a aferraban a mi. Ya ha desperatdo. Cerré los ojos con fuerza y me tumbe en posición fetal el el suelo.

- Lushy-san ¿Que pasa? - me preguntó con preocupación mi pequeño amigo.

Escuché el sonido de unos zapatos golpear contra el suelo. El sonido cesó. Mire hacia un lado y me encontré con la misma mujer rubia de antes. Ahora que la veo es parecida a mi madre pero no exactamente igual. Me senté de rodillas en el suelo aún abrazando a Kurai.

- ¿Quien eres? ¿Y por que te pareces tanto a ma...- me caye un monento para luego bajar la cabeza avergonzada - quiero decir a Layla? - pregunté a la mujer la cual me miraba con extrañeza. Agitó su cabeza y me regaló una gran sonrisa.

- yo soy Ana Heartfilia - se presentó la mujer. Abrí los ojos como platos. Ana es una antepasada mía la cual vivió hace 400 años. La miré con miedo ¿Donde nos hemos metido? - ¿Quién eres? Y ¿Que te ha pasado para acabar así? - me preguntó poniendo su mano en mi mejilla y acariciando con su pulgar la parte enrojecida de mi mejilla.

- yo- yo soy Lucy Heartfilia - ella abrió los ojos como platos al enterarse de que soy familiar suya. Bajé la cabeza avergonzada encontrandome con la mirada dudosa de mi amigo gatuno.

- ¿Que pasa? - preguntó confundido. Yo simplemente entre cerré los ojos y arque las cejas, no quiero creerlo, esto es imposible.

- Sois del futuro ¿Verdad? - cuestionó ella acariciando mi cabeza con la manos con la que anteriormente acariciaba mi mejilla - 400 años en el futuro - afirmó ella. Yo solo asentí - lo siento niña no puedo hacer que vuelvas a casa - se lamentó ella bajando su mano hasta mi frente. Abrió los ojos levemente y me miró con preocupación.

- Niña, estás enferma, como es que tu madre no se ha dado cuenta - afirmó retirando su mano de mi frente y agitandola. Llevé mi mano hasta mi frente y noté lo caliente que estaba mi frente.

- A mi madre nunca le he importado - solté a Kurai. Puse mis manos sobre el suelo y traté de levantarme del suelo cosa que Ana imitó. Cuando ya estuve de pie noté como mis piernas comenzaban a temblar - ella siempre me ha odiado - bajé la cabeza y unas pequeñas lágrimas comenzaron a caer por mis mejillas. Mis piernas no pudieron mas y caí de rodillas al suelo.

- ¡Lushy-chan/Lucy! - gritaron preocupados ambos. Ana se puso de rodillas en frente mío abrazandome para que no cayera de frente y me dañara aún mas.

- por favor. No quiero ¡No quiero! ¡No quiero volver con ellos! - dije a gritos aferrandome al vestido de mi antepasada la cual me abrazaba con fuerza. Sentí como mi pequeño amigo gatuno abrazaba mi pierna - yo solo no quie - mi vista se volvió borrosa. Cada vez podía ver menos y la fuerza de mis brazos y piernas se perdió totalmente - ro volver - al final caí desmayada en los brazos de mi antepasada.

Pov Kurai

¿Que le pasa a Lushy-chan? Abracé con fuerza su pierna. Por favor no mueras eres mi única amiga.

- Oye gatito ¿Como te llamas? - me preguntó la mujer rubia mirándome de reojo. Ella colocó sus brazos uno debajo de las rodillas de ellas mientras que la otra la colocaba en su espalda. Solté su pierna y alce mis alas para comenzar a volar.