¡Fuera de aquí!
Eres una niñata inservible.
nunca seras igual que yo.
te lo mereces, no mereces el apellido Heartfilia.
¡Vete de aquí ahora mismo!
- papa, mama, hermana - bajé la cabeza avergonzada al recordar aquellas palabras que me solían gritar...
Deshice mi Star dress y me coloqué en posición de defensa para enfrentar a aquél demonio. Fruncí mi ceño y hice una mueca de enfado. Apreté con fuerza mis puños.
- ¿Quién eres? - pregunté con molestia. Algo malo está pasando, y tiene algo que ver con los demonios de éste gremio.
- No se para que quieres saber eso si vas a morir - afirmó el rubia alzando sus manos y sus hombros mientras reía de manera cínica. Genial, ahora tengo que lidiar con un ególatra - Me llamo Jackal y ...
- ¡Rugido del dragón del sol! - grité lanzando mi ataque hacia él. Inmediatamente éste se sorprendió y de un salto hacia el mismo trozo de tierra donde estaba yo. Coloqué el dorsal de mi mano sobre mi boca y me la limpié rápidamente - Menos cháchara y más pelea - afirme.
Mientras tanto, él sonrió cómo si se estuviera divirtiendo con aquella situación. Él alzó su mano e inmediatamente se creó un círculo mágico debajo mío.
Salté de allí viendo cómo los círculos mágicos que se creaban debajo mío comenzaban explotar. Después de unos segundos se me ocurrió algo. Comencé a correr hacía el rubio mientras éste seguía tratando de explotarme. Salté cuando estuve en frente de él y coloqué mi mano sobre su cabeza impulsandolo hacia delante de manera que el rubio recibió el ataque de su propia explosión.
- ¡Agh! - se quejó de dolor. Caí de pie detrás de él y prendí mi puño con mi magia colocándome en posición de ataque. Menos mal, no he caído en el agua por poco.
- ¡Puño sel dragón del sol! - grité golpeandole en la espalda de manera que lo mande a volar contra la pared.
De la nada escuché el sonido de agua chapotear, inmediatamente miré hacia atrás y me encontré con un extraño ser con aspecto de tiburón. Él tenía una leve sonrisa macabras lo que hizo que un escalofrío recorriera mi espalda.
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Él estaba a punto de atacarme y yo iba a tratar de defenderme pero fui muy lenta ya que él consiguió golpearme en el hombro haciéndome una herida algo profunda, pero por suerte no demasiado.
- Agh - gemí de dolor cerrando con fuerza mis ojos mientras retrocedía levemente. Di unos pasos hacia atrás frunciendo mi ceño. Inmediatamente coloqué mi mano sobre la herida la cual comenzó a sangrar.
Entre cerré mis ojos con dolor mientras apretaba con fuerza mis dientes. Joder, esto duele. Alce mi vista siendo capaz de ver a esa especie de tiburón a punto de darme un puñetazo.
Abrí mis ojos de para en par y rápidamente me agache esquivando su ataque, apoyé mis manos sobre el suelo y de un rápido movimiento me lancé contra él - ¡Garra del dragón del sol! - grite y mi rodilla se cubrió de magia, le di un rodillazo en el estómago haciendo que soltara un poco de sangre por su boca.
