La dragon slayer del sol

¡Al fin hemos llegado! (3/4)

Pov Lucy.

Acabamos de llegar al gran y enorme consejo mágico. Justo cuando estabamos a punto de entrar por la puerta varios guardias retuvieron al gran grupo que formábamos, en total eramos 10 personas, un grupo... bastante grande la verdad.

Uno de los guardias el cual parecía el líder por el extraño decorado en su falda dio un paso al frente y me miró directamente a mi - Tu debes ser Lucy - preguntó. Yo abrí los ojos de par en par escogiendome de hombros. Muy bien, esto es muy raro, extremadamente extraño - Macarov nos informó de que señorita Lucy vendría. Pero antes de entrar debéis decidir quién será el maestro, pero el maestro debe tener mínimo 20 años de edad - explicó el guardia, eso me cayó cómo un jarro de agua fría. Nadie me habló de eso, y yo apenas tengo 18 años de edad. Y de los aquí presentes tan solo tres tiene más de 20 años, estos son Kaori, Arima y Tom.

Coloqué mi mano en mi barbilla y comencé a pensar, genial tengo que elegir entre una chica tierna, dulce, amable, divertida y algo impulsiva. Un chico serio, de pocas palabras, organizado y que muestra poco de sus sentimientos o un chico extraño, de ojos extraños, forma de ser extraña y supuestos 25 años.

Difícil, difícil, difícil deposición. Coloqué mi mano en mi barbilla y comencé a acariciar su barbilla con su pulgar de manera pensativa.

- Yo creo que Tom es el más indicado - respondió con simpleza la pequeña Wolf la cual tenía su capucha puesta además de que su capa evitaba que pudiera ver su cuerpo, pero por la silueta parecía que estaba cruzada de brazo.

- Je, eso es por que soy el más sabio, el más fuerte o ¿Por qué? - preguntó con un tono algo ególatra. Mientras sonreía de manera socarrona entre cerrando sus ojos.

- Por que eres el más viejo, y pareces aún más viejo por tu pelo - respondió Wolf sin ni siquiera esbozar una pequeña sonrisa mientras me miraba de reojo.

El rostro de Tom en ese momento era muy cómico. Su boca esta abierta hasta el punto que su mandíbula llegaba hasta el suelo con sus ojos abiertos cómo platos.

Kaori, Meredy y yo comenzamos a reír cómo locas, Yukino trataba de disimular su risa colocando su mano encima de su boca para tratar de que su risa no se escuchara. Jellal, Arima y Cody miraban extrañados a Wolf y a Tom. Mientras tanto Sakura mantenía impasible ante aquella situación.

- Sí, de cierta forma Wolf tiene razón Tom es el más viejo de todos - comentó Sakura de manera levemente bromista pero aun manteniendo expresión seria.

- No se cómo sentirme - dijo Tom cerrando sus ojos con fuerza mientras que una sonrisa forzada se dibujaba en su rostro. Una gotita caí por su cien y parecía estar a punto de pegarle un golpe a la pequeña Wolf.

- deja de quejarte y vamos adentro - afirme cogiendole de la muñeca sin previo aviso para después arrastrarlo hacia estar justo en frente de aquél guardia el cual parecía un poco extrañado por la situación.

Solté un suspiro y miré directamente a los ojos negros del guardia - ya está el será el maestro, ahora ¿nos dejas pasar? - pregunté ya un poco cansada de ésta situación.

Ellos se separaron de el frente mío mientras que dos personas abrían la puerta  del lugar dejándonos ver un gran pasillo bastante largo. El suelo estaba hecho de roca, una roca de un color muy claro, casi blanco. Encima de éste hay una alfombra larga de color rojo de tercio pelo con bordes dorados.

Grandes ventanas por las cuáles se colaban distintos rayos de sol los cuales iluminaban el interior de el pasillo. A los lados de las ventanas se veían unas cortinas de color morado con unas cuerdas sujetandolas para que no se soltaran.