Narra Camila:
Abrazé mis rodillas con fuerza mientras el agua caía sobre mi, escondí mi cara entre mis brazos y piernas, encogiéndome lo más posible dentro de la bañera.
Sollozaba sin parar, soltando pequeños gritos de vez en cuando, sintiendo como las lágrimas bajaban por mis mejillas sin parar.
Dios, me siento demasiado mal. Hace tres días que le habíamos dado su merecido a Finn. Y todo ese fandom literalmente me quiere ver muerta.
Las fans de Millie no me dejaban de escribir que yo era la peor amiga de todas. Y los fans de Finn decían que yo no lo merezco, y que jugué con sus sentimientos. No sé de donde sacaron eso último pero me lo han hechado mucho en cara.
Y es que pensé que solo íbamos a hundir a Wolfhard, pero parece que deducieron lo que él y yo exactamente hicimos, por lo que me odian a mi también.
Si, lo sé, fui una perra y una traidor pero...me arrepentí, ya perdí la cuenta de cuantas veces he dicho perdón y, aún así, me siguen diciendo que debería cortarme las venas.
Algo que me molesta es que defienden a personas que nisiquiera conocen, principalmente la gente de Finn, ellos me atacan y me atacan porque supuestamente "lastimé" a un chico que ni su verdadera personalidad conocían, y ahora que ya se mostró no lo quieren creer.
Aunque sé que todo esto es ridículo, la verdad me duele, me está doliendo demasiado todas esas...ridículas, y estúpidas palabras.
En algunos momentos me he puesto a pensar y, si, actué como una zorra, como una perra, fui mala amiga. Pero...estaba enamorada, cegada, fui utilizada. Y ahora odiada.
Solté un pequeño quejido y recosté mi cabeza en la pared que tenía detrás, sintiendo todas esas gotas recorrer mi cuerpo entero.
Apreté mis labios lo más que pude, pero al final se me salió un gran sollozo, haciéndome dar un repentino salto. Con mi mano tapé mi boca, no quería que nadie me escuchase.
Pero parece que no funcionó mucho.
La puerta del baño se abrió de repente, alzé mi cabeza asustada al mismo tiempo de que esa figura corría las puertas de la bañera.
Narradora:
Asher entreabrió sus labios, cuando sus ojos vieron a aquella chica arrinconada en su baño, con agua cayendo a cántaros sobre su desnudo cuerpo, y ella llorando sin consuelo.
Sus ojos estaban hinchados y rojos, el cabello se le pegaba al cráneo y a los hombros, mientras que sus labios estaban más colorados de lo normal, al igual que sus mejillas.
El rubio soltó uno de los suspiros más pesados de su vida, ella frunció el ceño a más no poder cuando vió como empezaba a quitarse sus zapatos y medias.
-¿Qu-qué haces?-pregunta confundida, en un susurro.
Y Asher se sentó a un lado de ella, solamente con su ropa interior, mojándose al instante de ponerse bajo la lluvia. La castaña se apretó a sí misma, mirándolo con sorpresa, mientras que él la miraba a ella, con seriedad y tristeza.
