4. Hola, de nuevo.

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"¡No es malo anhelar! Cuando se construye una realidad sobre la base de sueños y deseos, nada se desvanecerá; solo faltará precisar desde lo racional y lo sensible, los puntos exactos donde deberán ir los cimientos de eso que anhelas."

Mis manos temblaban al igual que mis piernas.
Me encontraba en la entrada de mi antigua y 'ahora' nueva preparatoria. Me aterraba la idea entrar a está y verlo a él.

—Vamos, ____—-dijo Konan, quién se adelanto a entrar.

—¡E-espera! —corría hacia dónde ella iba.

Había mucha gente en el partió, al parecer se encontraban todos los estudiantes en el descanso.

—Konan ... ¿Cuál es nuestro número de habitación?

—Es la 428 ... Supongo que tu debes de saber por dónde está.

—Si ...—mire hacia la derecha, y ahí se encontraba mi gran amigo, Sasuke.
El se encontraba viendo su celular- Konan, creo que nuestra habitación está en el edificio de allá —señale el edificio de la izquierda —¿Puedes adelantarte? Tengo que hacer un par de cosas.

Konan me miró con curiosidad.

—Está bien, pero ni se ocurra hacer una tontería —se alejó — ¿Vas a ir a ver a Na...—la interrumpí antes de que digiera aquel nombre.

—No, aún no —dije seria— Te esperó en la habitación.

—E-está bien —camino hacia el edificio.

Suspire. Mi plan era sorprender a Sasuke, llegaré por detrás y le taparé los ojos, tendrá que adivinar quién soy.
Obviamente no lo hará, ni siquiera se espera que éste ahí.

Caminé detrás de él sin hacer mucho ruido, antes de que le tapará los ojos ví que estaba a punto de mandar un mensaje, no sé a quién será.

Puse mis dos manos en sus ojos, el soltó un leve brinquito. Al parecer lo asuste.

—¿Quién eres? —no puso fuerza, no intento quitar mis manos de sus ojos.

No contesté a su pregunta, seguí en mi posición, aguantandome la risa.
Vi como movió su dedo pulgar en la pantalla de su celular, al parecer mando un mensaje a alguien.

—Volveré a preguntar: ¿Quién eres? —estaba a punto de reír, pero algo me paró, mi celular sonó, eso significa que me llegó una notificación, me quedé quieta sin hacer ningún movimiento.— ¿____?.

Palidecí al escuchar mi nombre. No hablé, simplemente quité delicadamente mis manos de sus ojos.
Él rápidamente volteó a verme un poco confundido.

—¿Cómo supiste que era yo?

El sonrió.

—Acabo de mandarte un mensaje a ti.
Después tu celular sonó, era obvió que eras tú.

Sonreí, al parecer me había atrapado.

—Idiota. —me lancé a abrazarlo— te extrañe bastante.

—Y yo a ti, Usuratonkachi.— me correspondió el abrazo— pero ... ¿Cómo es que volviste? Aún no me creo que estés aquí, pienso que es una ilusión.

—Pues ... Verás, estaré aquí de por vida. No pienso volver a irme.

—Me alegra saber eso, ¿estarás en nuestra misma clase?

—¡Si!

La chicharra había sonado, eso significa que el descanso ya termino.
Cuándo llegué, vi a Konan afuera del salón. Me dijo que el profesor "Orochimaru" indicó que las dos esperemos hasta que toda la clase éste ahí, después nos dirá qué pasemos.

—¿Porqué tardarán tanto? No es cómo si casi nadie me conozca.

—Dilo por ti. Yo no conozco a nadie que éste ahí. Pero no importa, no es que me interesé mucho. ¿Y tú cómo te sientes al respecto?

—Sinceramente me siento muy nerviosa.

—¿Estás nerviosa porque lo volverás a ver? No sabes que pensar al respecto ¿verdad?

—Bueno ... Yo ...—la puerta se abrió, el profesor nos observo a las dos y nos hizo un ademán de que entráramos.

—Ellas son las nuevas alumnas —frunci el ceño— Bueno, una una de ellas es de nuevo ingreso y la otra ya ha estudiado aquí —vaya referencia —si quieren pueden presentarse —iba a hablar yo, pero Konan me interrumpió.

—No, no creo que sea necesario —me miro de reojo. Creo que me ha salvado, era obvio que no debía, no quería presentarme.

—Bueno, pueden sentarse como quieran en los dos lugares disponibles.

Mire hacia el frente, en los asientos. Ahí estaba sentado, mirándome, me sonroje al verlo, después de tanto tiempo, aquí está frente a mis ojos. Sonreí, pero mi sonrisa se esfumo al verlo sentado con una chica rubia de ojos púrpuras. ¿Quién era esa chica?

Volteé a hacia otro lugar, ocultando mi sonrojo y enojo. Ahora mismo me sentía cómo una Tsundere.
Vi el lugar de Sasuke, el también me miraba, esperando a que me sentará junto a el.
Mire a Konan, ella se había sentado con Tenten.
Caminé rápidamente dónde Sasuke y me senté a su lado.

—Hola, de nuevo —le sonreí tontamente.







OMG.
Rayis volvió a ver a Naruto. ¿Qué pasará? ¿Cómo reaccionará? ¿Charlará con ella sobre lo que pasó? ¿Corresponderá sus sentimientos? ¿Naruto y Hinata siguen siendo novios?
Y sobre todo ... ¿Quién es esa chica rubia?
Bueno, descubre lo en el siguiente capítulo.
Bye.







By: Mei.

Una Bella Promesa. [ᴇᴅɪᴛᴀɴᴅᴏ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora