Una Bella Promesa. [ᴇᴅɪᴛᴀɴᴅᴏ]

31. ¡Vamos a las montañas!

“Se oscurece el sol al mediodía y enmudece la música del alba cuando hay tristeza en el corazón.”

Monte Takao.

Dos horas de viaje en un autobús no le hacían para nada bien a mi trasero.
El viaje a las montañas había comenzado, las personas a mi alrededor estaban emocionadas, que a comparación de mi, yo me sentía fastidiada.
Últimamente he estado muy ajetreada, quiero descansar... pensar con claridad y dudo que este viaje me ayude a lograrlo.

Al pisar tierra firme, el sonido de los pájaros cantores inundaron mis oídos, la superficie rocosa hizo que entrara en contacto con la naturaleza, me quedé observando el paisaje por unos segundos antes avanzar con él grupo de estudiantes de último grado.

Todos caminábamos a la par del guía, mientras nos daba un pequeño recorrido de los alrededores. También, habló sobre la historia del monte.

Después de una hora, empezamos por los senderos que aunque no lo pareciera, son muy largos.

La caminata me agotó rápidamente, haciendo que casi colapsará a medio camino.

—¿Estás segura de que podrás seguir? —sugirió el Uchiha preocupado por el estado de su mejor amiga.

—No lo sé... Esto es muy agotador, ya no soportó tanto ejercicio ¿sabes?, mi cuerpo no están fuerte como lo parece.

Tomé otro trago de agua, ahora necesitaba hidratarme aún cuando estaba por acabarse el agua que llevaba en la botella.

—Descansa, nosotros nos quedaremos contigo.— dijo Sakura, quien estaba al lado de Sasuke.

Así fue como me perdí casi la mitad del viaje por culpa de mi cuerpo débil.

[...]

—¡Wow, ese sendero estuvo de pelos! —exclamó Kiba mientras sostenía una gran sonrisa ese rostro.

Desgraciadamente yo no podría decir lo mismo, pues me había quedado sentada aproximadamente una hora.

—Descansarán un rato y después tomaremos otro sendero el cual nos llevará hasta la cúspide del monte.— comunicó el guía mientras nos observaba.

Todos yacían sentados hablando sobre lo genial que fue el sendero que habían recorrido, que mal que yo nunca sabré que tan genial fue.

Tendré que reunir energías para poder llegar a la cúspide del monte.

Cuándo finalmente el guía indicó el inicio de la caminata por el sendero, todos tomaron sus botellas de agua y accesorios para iniciar aquella caminata.

—Maldicion, ya no me queda agua...—observe mi botella de la cuál ya no salía ni una gota de agua.

Sentí que alguien tocaba mi hombro derecho, volteé a ver de quien se traba y al hacerlo... Me llevé una gran sorpresa.

Al cruzar miradas sentí una sensación cálida en mi pecho.
Pude percibir su nerviosismo, lo que hizo que mi estómago diera un gran vuelco. No quería que esta mirada terminara, quiero seguir admirando su rostro... Tan angelical.

—____... Toma...—sentenció el Uzumaki mientras le daba a su querida compañera una botella llena de agua, lo cuál hizo que la mencionada recibiera la botella sin pensárselo dos veces.— Me sobró una botella... Así que quise dártela.

El rubio sonrió para la chica mientras se rascaba su nuca.

—Gracias...— es lo único que la chica pudo decir, no quería tratar de sonar cortante ni nada por el estilo... Sólo que le ponía nerviosa la presencia del rubio y la mirada penetrante que fijaba en ella.

Un silencio incómodo llegó a su diminuta conversación, ninguno era capaz de hablar.

—Bueno... ¡Nos vemos! —dijo Naruto, para después alejarse de la ubicación de pelicafe.

*Bloqueo mental proceced*

Lo siento mi bloqueo mental y mi infinita flojera no me han dejado actualizar a tiempo. Aunque me esforse demasiado haciendo este capítulo ya que no tenía tanta inspiración.
Soy tan original que actualizó el día de mi cumpleaños :v

By: Mei.