°•|Capítulo 3|•°

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—S-sácala ya, d-duele~ —se quejó, incitando al contrario en acelerar los movimientos que hacía minutos atrás

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—S-sácala ya, d-duele~ —se quejó, incitando al contrario en acelerar los movimientos que hacía minutos atrás.

El azabache no sabía qué hacer, los gemidos sordos de su jagi le estaban llegando hasta lo más profundo de su ser.

JiMin estaba desesperado por buscar una salida para poder sacar lo que en los adentros de la chica había.

Y con suma delicadeza, el azabache movió un poco sus manos.

—¡J-jiMin! —se ruborizó más de lo que ya estaba, no soportaba la punzada que estaba sintiendo, así que enterró sus uñas en la fuerte espalda de su novio.

—Ya la voy a sacar, no desesperes, no está tan grande —comentó, sonriendo ladino y quitando el sudor de su frente.

—¡No digas eso si tu cosa está más grande que la muralla china! —gritó, soltando un gemido sordo en cuanto lo introducido en su interior ya había salido.

Su adolorido cuerpo cayó sobre el sofá, pues toda esta situación había sido por la torpeza del hermanito del azabache.

JiMin quería mostrarle a su jagi el adorno que le había hecho a su cúter, pues aunque sonara estúpido, el azabache le había tomado gran aprecio al objeto.

El cúter que T/N le había regalado cuando eran niños, ese cúter en el que le habían tomado uso para cortar figuritas de su anime favorito, Dragon Ball Z.

El pequeño hermano de JiMin había estado corriendo de aquí hacia allá, jugueteando con el incansable Moon, mascota de la familia Park.

T/N había llegado de visita, como solía hacerlo todas las veces en las que JiMin no iba a su casa por cuestión de cuidar a su hermano menor.

Y mientras una acaramelada pareja realizaba una sesión de besos, el pequeño pelinegro conducía sus curiosas manos hasta el objeto que JiMin había dejado sobre la mesa de sala.

Impresionado por el objeto que poseía en sus pequeñas manos, corrió entusiasmado por la nueva cosa que sus ojitos veían por primera vez.

—¡Hyung, hyung! ¡Mire lo que encontré! —gritaba, mientras se acercaba a la zona donde la sesión de besos esparcía calor.

Ambos seres, al escuchar la dulce voz del menor, detuvieron su caliente sesión para observar el curioso objeto que el niño traía entre sus manos.

El rostro de ambos mayores del menor seguro se vio épico, pues las carcajadas del pequeño pelinegro habían dado indicios de que así había sido.

Aunque el menor no midiera la magnitud del peligro en traer un cúter entre sus diminutas manos, JiMin y T/N sabían que algo no muy bueno podría pasar si no le quitaban el peligroso objeto de entre sus manitas.

—Dae, dame eso —habló serio el azabache, dando lentos pasos hacia el menor como si temiera de que éste corriera.

—¡Atrápame si puedes! —se echó a correr, pasando a un lado de su hermano mayor.

—¡DaeHyun! —fue el último grito que se escuchó, antes de que tanto el cuerpo del niño como el de la peli-ceniza cayeran al suelo.

JiMin se aproximó hasta ellos, apartando con cuidado al menor del cuerpo de su chica y llevándose una preocupación intensa.

Pues T/N tenía enterrado el cúter en su muslo derecho.

—¡Noona! ¡Lo siento, lo siento, lo siento! —repetía un asustado pelinegro en cuanto vio un líquido rojo manchar el blanquecino pantalón de su noona.

—Dae, ve por el botiquín de primeros auxilios, ¡rápido! —ordenó serio y preocupado, podría estar molesto con su hermanito, pero también estaba preocupado por lo que el niño le había hecho a su jagi.

JiMin sabía que había sido un accidente, un torpe accidente, pero igual le molestaba la idea de que DaeHyun le haya desobedecido en gran manera.

Su familia no se caracterizaba por ser desobediente, pero el pequeño pelinegro estaba modificando aquel currículum.

—A-ah, Minnie, duele~ —gimoteó del dolor, sacando del trance de enojo al susodicho.

—Tranquila, jagi, no pienses en el dolor… —se le aproximó a su oído y le susurró,— mejor piensa en cómo te hago mía —sonrió entre la zona, ganándose un rojo carmesí en las mejillas de la peli-ceniza.

—¡MinMin! —chilló, apartando su mirada y olvidándose por un momento de su dolor.

Y las cosas se habían repetido como al principio de esta narración.

[…]

⬅️Minnie oppa:
¿Cómo sigue tu sexy
muslo? 6u9 
✅✅

⬅️Glúteos hermosos 7u7:
¿Es enserio, oppa?
✅✅

⬅️ Minnie oppa:
No, me traes tan loco
con ese cuerpazo, uff
😏 Te como entera, mami
7w7
✅✅

⬅️Glúteos hermosos 7u7♡:
¡J-JIMIN!😳
✅✅

⬅️Minnie oppa♥️:
Jajajaja, ya, me
puedo imaginar que
esas bellas mejillas están
cubiertas de un rojo como
tomate
✅✅

⬅️Glúteos hermosos 7u7♡:
S-silencio😳😳
✅✅

⬅️Minnie oppa♥️:
Ven a callarme, nena
6u9
✅✅

⬅️Glúteos hermosos 7u7♡:
¡¡JIMIN-AH!! O//O
✅✅

⬅️Minnie oppa♥️:
Antes que desaparezcas
quiero que sepas que te amo

⬅️Minnie oppa♥️:
¿Me oyes? Ah, no
puedes hacer eso…
Hmmm, ¿me lees?

⬅️Minnie oppa♥️:
T-E  A-M-O 😙❤️

⬅️Minnie oppa♥️:
Sexy girl, you are mine!
😏♡

⬅️Minnie oppa♥️: Sexy girl, you are mine! 😏♡

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