Inesperado

Un lugar donde estar

Seijūrō besó al castaño, le gustaba que Kōki se sorprendia y se sonrojara tanto.

-A-aakshi.

-Seijūrō- dijo sujetando su mejilla -. Reo me llamo. Dice que el departamento está quedando muy bonito.

Sonrió feliz -Si. Ya tenemos la sala lista y dos habitaciones. La cocina aún está siendo equipada. Y mi estudio ya están colocando anaqueles para mi material.

-Crei que solo la ibas a adaptar para tu estudio.

-En un inicio así era. Pero luego pensé que podíamos pasar los fines de semana o algún día por allí.

Seijūrō sonrió al percatarse que Kōki estaba incluyendolo -Por supuesto.

Kōki sonrió al sentir la mano sobre su vientre. Ya había transcurrido 3 semanas desde la subasta, y desde hace una semana había estado alejado  del nido, aún recurría a  él durante algunas  noches.

Seijūrō besó al castaño -Los a...

El timbre sonó.

-Al parecer tus amigos llegaron- dijo Kōki. Ese día se iban a reunir para jugar un partido de básquet.

-Voy.

-Termino de vestirme y los alcanzo.

Seijūrō asintió y abandonó la habitación.

Había decidido  armar  un partido para que Kuroko y Reo se conocieran. Invitó al peliceleste y a Kagami. Fue una sorpresa ver que el el novio de Kuroko era el medio hermano de Tatsuya, sabía que tenía uno pero nunca lo había conocido. 

Abrió la puerta del portón y los autos entraron. 

-Bienvenidos.

-Akashi/ enano/Seijūrō.

Rodó los ojos ante el apodo de Kazunari -Pasen.  Todo está preparado en la parte trasera. Y también nos falta alguien más.

-¿Quién?- pregunto Daiki.

-Reo.

-¿Cuándo regreso?

-Hace una semana. Ha estado ocupado trabajando, quiere saludarlos y darle sus recuerdos.

-Reo es un sol.

-¿Ya tiene novio?

-Si. Es un viejo amigo de la universidad.

-¿Quién?

-Kōtaro.

-Sabia que iban a quedar juntos- dijo Kazunari -. Se notaba que estaban enamorados... O algunos Haya-chan.

Fueron directo al jardín, donde el castaño estaba llevado una bandeja con botana.

-Déjame ayudarte- dijo Tatsuya al castaño.

-Gracias- sonrió y miró a los demás -Bienvenidos.

-De verdad se ve muy bien- dijo Ryōta al verlo -. ¿Cómo va el nido?

-Ya lo estoy dejando. Aunque...- su rostro se ruborizó.

-Duermen abrazándose- le guiñó al castaño, quien se ruborizó aún más.

-Deja de molestarlo, Kise.

-Si, Midorima-sensei.

-Buena tarde, Furihata-san. Hemos traído algunos postres y botanas.

-Gracias- tomó el refractario que el peliverde le entregaba-. Voy a colocarlo en algo.

Reo llegó y saludo a todos, y entregó algunos recuerdos.  Miró al pelirrojo y negó.

-Sentimos la demora. Pésimo tráfico.

Reo giró y miró a la pareja, de inmediato reconoció a Kuroko.

-Déjenme presentarlos. Kuroko Tetsuya. Kagami Taiga. Reo Mibuchi.

-Un gusto.

Tetsuya frunció el ceño ante la mirada del Omega pelinegro.

Reo sonrió -Cuentame de tí, Kuro-chan.

La pareja arqueó la ceja ante el apodo.

-Asi es Reo. ¿Reo, le muestra a Kuroko la casa?

-Claro.

Tetsuya fruncio el ceño. Ya conocía la casa.

-Por aquí, Kuro-chan.

El peliceleste miró al pelirrojo y este le asintió.

Kōki regresaba de dejar las cosas cuando vio al par entrar a la casa -Sucede algo?

-No. Kuroko-kun quería el baño. Reo se ofreció a guiarlo.

Seijūrō sonrió a Taiga al ver el ceño fruncido y el gesto de confusión. ..-Ya veo. Ya está todo listo, y los chicos esperan.

-Vamos.