Mi amor de VideoJuegos [Jelsa]

~Capítulo 55: Vacaciones...~

Narra Elsa.

Había terminado mis últimos exámenes de este semestre y las vacaciones había llegado con esto, ahora que estaba en una relación con Jack increíblemente me costaba querer tener aquellas vacaciones que tanto esperaba, después de todo me dolía saber que ya no podríamos estar juntos en el campus. Hoy saldría mi vuelo hacía la casa de mis padres, por eso había decidido ponerme una camisa rosa con detalles de perlas, encima una braga de jean, unos tenis rosados y un pequeño bolso en el que guarda mis cosas más personales. 

Las chicas habían decidido ayudarme a bajar mi equipaje, antes de que saliéramos de mi habitación tome una de mis plantas que decoraban mi escritorio y la guarde en un bolsa de regalo. Bajábamos las escaleras de nuestro dormitorio femenino cuando estornude un poco.

-¿Tienes un resfriado?- me preguntó Mer, quien se encontraba detrás de mí, junto con Anna, quienes juntas me ayudaban a bajar mi equipaje. La verdad no me sentía de mucho ánimos así que me limite a quedarme en silencio -¿O es que alguien esta pensando en ti?- 

Rode mis ojos antes de contestarles -Solo tengo un leve resfriado- en ese momento mientras bajábamos pasamos por una ventana, y en ese momento vi a Jack, quién de costumbre me esperaba fuera de su auto.

Mientras lo miraba no podía evitar sentir tristeza, me había acostumbrado a pasar mis tiempo libre y de estudio junto a él.

-¿Cómo qué es un resfriado? Es más que obvio que alguien esta pensando en ti- dijo Mer sacándome de mis pensamientos.

Sin darle mucha importancia a sus comentarios, suspire fuertemente antes de seguir mi camino. Al llegar donde Jack, al vernos se dispuso a abrir el baúl, para como acto seguido guardar mi maleta, mientras nos preparábamos para irnos no pude contener un estornudo, provocando que Jack me dirigía una mirada que lo único que decía que "PREOCUPACIÓN" en grande.

Antes de que mi novio pudiese decir algo me voltee con una sonrisa hacía las chicas -Vayan adentro, nos vemos el próximo semestre- les dije con una sonrisa.

-Nos vemos el próximo semestre- dijeron al unisono mientras nos dábamos un cálido abrazo.

Luego de que las chicas subieran, Jack y yo hemos entrado al auto directo al aeropuerto. Al entrar y emprender el viaje no pude evitar dejar de mirarlo, sabía que no nos íbamos a separar ni nada por el estilo, pero me estaba costando tener que desprenderme de él, me costaba entender que por un tiempo no íbamos a poder a vernos tan frecuentemente como nos habíamos acostumbrado.

-¿Trajiste la medicina?- me preguntó sacándome de mis pensamientos.

Iba a preguntar a qué se refería cuando estornude sin previo aviso.

-¿Te refieres al resfriado? no, no traje, en realidad no pensaba que amanecería así, no suelo resfriarme, ni enfermarme en general- le dije con una leve sonrisa -Pero no debes preocuparte, es solo un leve resfriado- 

Sin dejar de mirar el camino metió su mano en un compartimiento del auto y me paso un caja de medicina -Tómalo- 

No pude evitar sonreír por el gesto.

-Esto es para ti- dije mientras señalaba mi pequeña planta en la bolsa, el se giro solo unos segundo para ver de que se trataba. 

-¿Nuevo dote?- 

No puede evitar reír por su comentario -No, solo es un pequeño cactus que he estado cuidando, pero no puedo cuidar de el en las vacaciones de verano, así que por favor cuídalo por mí-

-Oh, para extrañarte cuando lo mire- 

-¡Oye.. ! no he pedido un boleto tan rápido apropósito, cuando lo pedí aún no te había conocido-

El transcurso que siguió fue silencioso. Al llegar al aeropuerto, Jack tomo mi maleta y juntos nos hemos dirigido hacía el interior de este.

-Iré a comprar un boleto en la plataforma- me dijo mientras dejaba mi equipaje a un lado de las sillas metálicas de espera. 

-No, esta bien, puedo abordar sola- dije rápidamente, además de que mis padres aún no tenía idea de que me encontraba en una relación, la verdad es que no quería que gastara dinero innecesariamente.

Él, sin escuchar mis palabras se dirigía a buscar un boleto, tome mi equipaje rápidamente para poder seguirlo el paso. Pero él se detuvo, para luego voltearse hacía mí.

-Toma asiento, el equipaje es pesado, querida esposa- dijo provocando que no pudiera evitar esbozar una sonrisa.

Al final no pudo conseguir un boleto, puesto que ya estaban agotados y a decir verdad aquella noticia me había desanimado un poco.

-Olvídalo, ¿sí?- me pidió para luego tomar mi maleta y empezar a caminar, yo he salido a seguirle el paso cuando me tomo de la mano para caminar juntos -Llámame cuando llegues a casa- me pidió a lo que yo asentí con una gran sonrisa -No olvides tomar tu medicina- asentí por segunda vez -Y... compra un teléfono pronto- me suplico entre risas. 

No pude evitar reír con él -Comprare uno apenas llegue a casa- le prometí entre risas.

Mi momento de abordar fue difícil, me había acostumbrado tanto a su compañía, a sus llamadas a nuestra habitación, a nuestras tarde de estudio, que a pesar de que no fuéramos a terminar o a darnos un tiempo me costaba hacerme a la idea. Al final tuvimos una despedida linda y bastante significativa.