U-28

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La habitación repentinamente se quedó completamente silenciosa, solo el aire entrar y mover las cortinas era perceptible por Akeno, dando paso a una pequeña sonrisa que apareció en su fino y blanco rostro, sus violetas ojos expectantes miraban al joven mago, al auto proclamado hijo del rey de los dragones de fuego que de igual manera solo la miraba con esos ojos verdes que a ella le parecían reflejaban la ilusión de un pequeño niño ante algo completamente desconocido.

- Esta bien - contestó él finalmente, Akeno sin tiempo que perder una vez más recorrió el salón hasta el lugar donde sus cosas se encontraban reposadas, se agachó y las tomó con la mano izquierda, enseguida recorrió una vez el mismo tramo y con su mano derecha tomó la mano de Natsu entrelazando sus dedos con los suyos en un firme pero delicado agarre.

- Vamos - Dijo ella mirandolo, dejando a la vista un cautivador sonrojo que inundaba por completo su rostro. Desprevenido él fue arrastrando fuera de la habitación dejándole sin tiempo para despedirse pero siendo sincero no le importaba demasiado, solo quería salir de ahí, olvidar por un momento el coraje y enojo que en esos momentos en su cuerpo tenia reunidos y que con toda su fuerza de voluntad suprimia, todo para no arrancar la cabeza de ese castaño que no dejaba de joderle y que para mala suerte parecía haber sido importante para Akeno lo que le molestaba aun más si era posible, pero dejando eso de lado la principal razón era que de alguna manera quería repetir lo ocurrido hace tantas horas, experimentar una vez más ese momento que ahora parecía ser tan lejano, sentir su fino cuerpo encontrá suya e inundar cada uno de sus sentidos con su aroma y sabor, solo el ver el simple movimiento de cadera que ella hacía al dar cada uno de sus pasos provocaban que sus malestares disminuyeran, que por alguna razón sus sentidos se concentrarán en ella y que su mente divagara. - Que sucede? - Pregunto ella deteniendo su paso y volteando su vista a él, descubriendo la dirección de su mirada, rápidamente ella se sonrojo y por reflejo se apartó un poco claramente cohibida soltando su mano en el proceso.

- Lo siento... No era mí intención - Dijo él sonrojado al notar que había sido descubierto. Ella tan solo de un par de segundos lentamente se volvió a acercar tomó la mano del mago y para sorpresa del mismo unió sus labios en contra suya en un rápido movimiento.

- Lo siento... yo tampoco puedo pensar en otra cosa... Pero no aquí, tenemos cosas que hacer - Dijo ella aumentado su sonrojo.

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- Que diablos significa eso? - pregunto Issei, después de unos pocos segundos de  verlos desaparecer por esa pequeña puerta, preguntando claramente lo que la mayoría ahí reunidos pensaban y que no comprendían, al no obtener respuesta molesto se dirigió hacia la puerta con la intención de seguirlos e interrogarlos.

- Adónde crees que vaz?- Cuestionó Azazel mirando detenidamente al joven demonio provocando que él mismo detuviera sus pasos y volteara a mirarlo. - No creés que ya causaste demasiados problemas? -

- Yo?!, desde que él llegó es él quién ha causado problemas... Si no estuviera las cosas serían como antes - declaró provocando que sus compañeros pusieran aun más atención a sus palabras pues ellos de igual manera afirmaban sus palabras.

- El cambio... es acaso malo? - Cuestionó Irina para la sorpresa de Xenovia.

- Se supone que eres mí amiga de la infancia... Deberías de apoyarme a mí y no a él - argumento señalando la puerta por donde Natsu y Akeno habían salido, claramente molesto.

- Si, soy tú amiga y por lo mismo tengo la obligación de decirte las cosas que creó o sé que son incorrectas y esta claramente es una de ellas - contestó ella poniéndose de pie para enfatizar su punto.

- Dime algo Issei... Cuál es el problema que tienes? - Cuestionó Azazel sin apartar su mirada del mencionado.

- Yo no tengo ningún problema... - Contestó él desviando su rostro.

- Si lo tienes... Con él o no las cosas pudieron haber cambiado, hablando estadísticamente hay tantas variables que nosotros no tenemos en control que es absurdo, un rayo en un lugar equivocado y un bosque puede arder completamente, son mínimas las posibilidades de que las cosas hubieran seguido de la misma forma, estoy de acuerdo en decir que quizás las cosas serían diferentes pero hay que entender que no sabemos en que sentido, pudieron haber cambiado a mejor... -

- También a peor... - Interrumpió Issei con el ceño fruncido.

- Tal vez... No lo negare, pero depende del punto de vista de la persona a quién le preguntes - sentenció él con una sonrisa.

- A mí nunca me lo han preguntado, se qué él es peligroso, no sabemos si la que dice es verdad o busca algo para hacernos daño... -

- Y si puedo demostrar que es cierto? - Cuestionó Azazel interrumpiendole.

- Eh? - contestó desconcertado el demonio.

- Que pasaría si logro demostrarlo? - Cuestionó él mirando al castaño.

- Nada, no cambiaría nada en absoluto -

- Entonces ese es el problema... O parte de... Mmm... Eres más complicado que una linda señorita... - Contestó él líder de los ángeles caídos mientras comenzaba a reír, segundos después soltó un largo suspiro de resignación y tomó asiento en la pequeña sala. - Ya no importa vayan a casa, Issei ten en mente ésto, las cosas pudieron haber cambiado al momento que Natsu Dragneel llegó, o desde mucho tiempo antes... Vayan directamente a casa no quiero que causen problemas por el caminó - concluyó el mirando acada uno de ellos que simplemente permanecieron en silencio y acatando ordenes salieron.

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- Y a donde vamos? - Cuestionó Natsu con una sonrisa mientras caminaban por el mismo pasillo que ya empezaba a ser familiar.

- Al centro comercial compraremos unas cuantas cosas para la cena y ropa para que puedas estar más cómodo - contestó Akeno aun sosteniendo su mano. Lentamente salieron del edificio que los resguardada sintiendo una refrescante brisa chocar en contra de su piel, ambos aun con la sonrisa moldeada en su rostro caminaron por los patios encontrando a uno que otro estudiante que se sorprendían al ver al chico nuevo de los ahora rumores y la segunda chica más popular de la escuela juntos tomados de las manos.

De esa forma caminaron por las calles pero...

- Es él? -

- Si... -

- Mmm... Esperaba que fuera diferente -

- A decir verdad, yo igual... -

- Pero no entiendo por qué le dan tanta importancia a ése miserable humano -

- Quizás por que provocó que los planes que teníamos cambiarán, por su culpa las tres facciones están alertadas y no nos podemos mover tan libremente, no se la causa, es por eso que estamos aquí... -

- Pará averiguar?... Y si es una amenaza? -

- Ofende tú pregunta... En dado caso es aún más sencillo ¿verdad? -

- Es verdad... Entonces hay que mantenerlo vigilado? -

- Si... Pero enviaremos a alguien más, nosotros tenemos otras cosas por hacer -

- Cierto... -

- Si, es simple no hay que preocuparse ni apresurarse, solo los planes se vieron retardados... todo sigue igual -

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