Capítulo XXII.- Este corazón

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POV VALENTINA

Todo el día había tenido la conversación de Diego en la cabeza, me sentía extasiada, juliana puso fin a su relación de novios con Diego solo por estar conmigo, estaba que explotaba de felicidad, sentía que a mi paso iba dejando un bello arcoíris gay de la felicidad, no había visto a juliana en todo el día y no contestaba mis mensajes ni llamadas, me estaba preocupando pero al ver que a las niñas tampoco les contestaba me tranquilice, ya que el asunto no era solo conmigo.
Estaba dando vueltas por todo el colegio y no aparecía juliana, vi a IVARIANA (Ivana y mariana) en el salón de estudio y fui hacia ellas.

V.- Hola niñas!

Iv.- Hola val!

M.-Hola

V.- de pura casualidad han visto a juliana?

Mariana me lanzo una mirada extraña que evite de inmediato Gracias a Ivana.

M.- No, no la hemos visto en todo el día.

V.- saben algo de ella?

Mariana me seguía viendo raro, estaba entrando en pánico.

Iv.- No, no la hemos visto, pero creo que mar hablo con ella en la mañana.

M.- Si, me dijo que tenía proyecto de matemáticas, y que estaría todo el día en su clase, en el salón de álgebra.

V.- y por eso no puede contestar el celular? (Pregunte por curiosidad pero sono con un tono como de molesta)

M.- supongo, pero por qué tanta necesidad de ver a juliana?

Fuuuuck. Mariana soprechaba algo de lo nuestro, pero si juliana aún no le decía era por algo y más después de haberlo negado principalmente para mariana, quien era yo para decirle a ella si Juls no quería.

V.- Ninguna necesidad, solo quería decirle que fuimos los mejores de la clase de mate y todo fue por las asesorías.

Iv.- Que bueno bebecita, se lo mucho que odias las matemáticas.

V.- Gracias bebecita, bueno las dejó, tengo algunas tareas que terminar.

Me fui de ahí tratando de evitar a mariana completamente, siento qué hay algo en nuestra relación que no nos deja fluir y me preocupa un poco por qué juliana está de por medio.

Llegue a mi habitación y estaba odiando que juliana fuera súper inteligente, imagínense que estuviera en mi grupo estaríamos haciéndonos cariñitos, besándonos y estaríamos sumamente felices, pero NO, malditas matemáticas.
Dentro de mis pensamientos de lo que podría hacer con juliana se me ocurrió una grandiosa idea y decidí que era mi turno de prepararle a juliana una sorpresa, ya que siempre era ella la que me sorprendía.

Me paré en chinga para planear lo que tenía en mente, mande a Peter a comprar las cosas ya que no podía salir, me dirijo a nuestro safe place y empecé a acomodar todo. No estaba segura si era lo que ella quería después de un día tan pesado, pero estaba dispuesta a alegrarle el día y mejorarle la noche, y quizá si, como ustedes lo imaginan.

Llego Peter con las cosas y empecé a organizar todo súper bonito, prendí la chimenea ya que era un día frío, acomodé el sillón de manera que quedara cómodo frente a la tele y acomode los cojines que mande a traer en forma de V, J y un corazón.
Le llame a juliana como unas diez veces más y no contesto, eran las 7:30 y no sabía nada de ella aún, sentí un vacío emocional, después de haber cortado con Diego ella no me había dicho nada, pero esta vez mis ganas de verla y estar con ella ganaban, le mande un mensaje, quizá saliendo lo vería y se comunicaría conmigo.

-ESTARÉ-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora