❀¦veinticuatro

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01 de Marzo del 2019

SeokJin estaba de visita sorpresa en la empresa. TaeHyung, por supuesto, no estaba demasiado feliz por esto, luego de lo que pasó con JungKook hace unos días, su buen humor estaba por los suelos, volviéndose el mismo cascarrabias de hace unas semanas.

Y que su primo, Don perfección, estuviese frente a él hablándole de quién sabe qué, no era el mejor estimulante —¿Entonces me harías ese favor? —cuestionó el rubio y dedicándole una encantadora e inocente sonrisa.

TaeHyung salió de su ensoñación y sabía que SeokJin le iba a salir con un reproche si le decía que en verdad no había prestado nada de atención, por lo que se limitó a asentir sin interés alguno —Lo que quieras, Jin hyung.

Y SeokJin quiso casi aplaudir de lo feliz que estaba —NamJoon y yo te lo agradeceremos toda la vida. Aunque va a ser algo estresante tener a Solar a tu cargo.

Y ahí fue cuando TaeHyung reaccionó. Dios ¿En qué se había metido? Definitivamente culpaba en su totalidad al mocoso de JungKook. Pero tenía un as bajo la manga —Bueno, pero pensándolo bien ¿Quién se quedará acargo de la empresa? Sabes que me es muy difícil confiar en alguien para que esté a cargo.

SeokJin suspiró — Cómo se nota que me estabas poniendo atención, mocoso — reprochó con sarcasmo y TaeHyung rodó los ojos —Te dije que YoonGi gustoso lo hará, ya sé que no vas a dejar que JungKook se haga cargo así que, él es la mejor opción y como soy prácticamente tu jefe, no acepto peros —con esto, el rubio arrastró su silla con delicadeza hacia atrás para así ponerse de pié — Así que ya sabes, el sábado será día de Solar y TaeHyung mientras NamJoon y yo tenemos una cita luego de siglos.

TaeHyung no quiso replicar. Aunque no le agradaba la idea de ser niñero, SeokJin había hecho mucho por él años antes y cuidar a su hija sólo por un día no sería la gran cosa ¿Qué tan difícil será estar a cargo de una niña con cinco años? Además le serviría como distracción para no pensar más en JungKook que se negaba verle a solas en la oficina y se imaginaba el por qué.

🍥🍥🍥

SeokJin tocó con suavidad la puerta de la oficina de JungKook a plena hora del almuerzo. Ordenó los papeles que antes se encontraban pegados a su pecho y al escuchar el "pase" por parte de aquel chico, abrió con su mano libre.

JungKook por su parte, bostezo un poco sin ganas de ver quién era quizás a sabiendas que era Lalisa con nueva documentación.

El rubio observó el deplorable estado del castaño; ojeras bajo sus lindos ojitos de bambi y un poco desalineado ¿Acaso TaeHyung lo estaba explotando? Aunque pensándolo bien, era bastante casualidad encontrar a JungKook así cuando TaeHyung se encontraba en condiciones similares. Pero lo del azabache era ya de hace ya unos días, de JungKook lógicamente no tenía una idea.

— Pero que cara, Jeon ¿A qué se debe? —JungKook rápidamente alzó la mirada ante la voz que se hizo presente —Buenas tardes, JungKook, que gusto volver a verte — mencionó SeokJin obsequiándole una encantadora sonrisa y consiguiente tomar asiento, posando los papeles en el escritorio.

— SeokJin sunbae — balbuceó Jeon pasando su mano por el rostro tratando de despabilarse. Extendió su mano en el escritorio, arrastrando lo papeles hacia si mismo —¿Qué le trae por aquí? — cuestionó en tono formal, dejando los papeles de lado y atender al rubio como es debido.

— Venía a pedirle un favor a Tae y YoonGi, entonces, aprovechando que YoonGi iba a entregarte estos papeles, me dejó hacerlo por él, quería verte luego de la cena, me has caído bien — confesó aún sus labios curvados en una sonrisa — Pero ahora me preocupa la cara de perro apachurrando que muestras. Aunque tengo una idea de lo que ha pasado.

JungKook apretó los labios entre si, sintiéndose feliz pero a la vez inevitablemente avergonzado ¿Sus dramas amorosos llegaron a oídos de aquel gran personaje postrado frente a él? Era digno para que la tierra le tragará por completo.

—¿U-Usted lo sabe? — tímidamente preguntó y SeokJin estaba enternecido por la reacción de JungKook.

—Sé que TaeHyung gusta de ti y estas confundido por ello, que casi no le hablas por lo mismo, consecuente, TaeHyung siendo un cascarrabias ¿Me equivoco?

Y la respuesta de JungKook fue esconder su rostro al escritorio entre sus brazos, la vergüenza sobrepasandole a niveles escandalosos —¿Cómo se enteró de eso? Estoy seguro que el señor Kim jamás divulgaría algo así —dio por hecho.

SeokJin jamás le diría que YoonGi es algo parecido a una vieja chismosa de la cuadra, por tanto carraspeo — Algún pajarito me lo dijo, pero en fin, eso no importa — el rubio se acomodó en el asiento de cuero y luego miró a JungKook con calidez, el mismo JungKook sintió aquello removerse en su pecho como si alguno de sus padres o hermano mayor le hablaran —¿Cómo dices estar confundido si estoy seguro que tu corazón no se acelera por alguien más como lo hace con TaeHyung? —JungKook bajó la mirada mordiéndose el labio —Piensa en lo que te hace sentir TaeHyung, en lo que te hace sentir esa chica, la respuesta esta más que clara y en tus ojos se ve, en tu actuar se ve, JungKook.

—S-Se supone que soy…

—Calla, niño, eres más gay que JiMin y yo juntos, bueno, no tanto así — aclaró por la mala broma hecha — Pero todos tenemos una excepción. Así como yo fui la excepción de Nammie, tu excepción es TaeHyung —El rubio hizo silencio un momento y sonrió ante los ojitos tristones, tratando de demostrarle confianza —Sé que eres un chico listo y de mente abierta, sé que sabes que el amor no tiene genero, que si TaeHyung hace que tus mariposas revoloteen, poco es lo que puedes hacer, negándolo no harás que estas mismas desaparezcan. No solo existe la heterosexualidad, puede que incluso seas bisexual pero tienes que abrirte y darte esa oportunidad, descubrirte a ti mismo.

JungKook se sentía cada vez más pequeño ante las palabras de SeokJin. Apreciaba tanto el hecho que el rubio se tomara el tiempo de hablarle con calidez, con comprensión al verlo hecho un desastre y no conocerse prácticamente de nada.

—G-Gracias sunbae —mencionó en un pequeño susurro y SeokJin volvió a sonreír suavemente, pero eso se fue cuando una idea cruzo por su cabeza, la sonrisa haciéndose más amplia.

—Tengo una idea de como puedes ponerle fin a tu drama, JungKook.

Y el castaño parpadeó confundido ¿Con que clase de JiMin estaba hablando?

Lo amo tanto, por Deos

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Lo amo tanto, por Deos.
Y creo que solo quedan cuatro más, ggg.

Gracias por leer. 💕

sugar ➳ taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora