Odiar a King.
Al día siguiente, tras que la mayoría haya despertado con resaca.
Meliodas durmiendo en el regazo de Elizabeth; Ban en el piso con una botella; King y Ende dormidos en una mesa, Ende arriba de King; Gerheade comiendo unos frutos secos; Jericho se había ido con Guila temprano; Howser en el piso, junto Gil y Grimore, con resaca; La gigante y el muñeco no estaban presentes.
El enano rubio se levantó con pereza despertando a su prometida.
─... ¿Mel?...
─Tranquila linda, duerme─Le murmuró con una sonrisa, ella obedeció y volvió a caer en los brazos de Mórfeo.
Ofreciendo una sonrisa a aquella escena tan linda de albina, el rubio se levantó y se acercó a la mesa de aperitivos. Había pasado una noche entera con aquellos pasteles afuera ¿Pero qué más dá? Ni que fuera veneno. Tomó un pedazo del cupcake y se lo llevó a la boca, saboreando el sabor de azúcar concentrado embriago su paladar. Mientras aún masticando el panesillo, se acercó a dónde estaba Ban y jaló su mejilla, él abrió sus ojos despacio.
─Ban... ─Dijo en un tono burlón.
─Ay, ¿Qué quieres Capitán?
─Ya es tarde ¿No irás con Elaine a tu luna de miel?
La luna de miel de Ban y Elaine, no era ni más ni menos que una cabaña en un montaña rodeada de flores, la cabaña era pequeña y hogareña, con chimenea. Ellos habían escogido ese lugar porque querían estar solos y estar tranquilos sin preocupaciones; La cabaña quedaba afueras de Camelot, al oriente.
─¡Mierda! ─Levantó de sopetón y corrió a la taberna ya que desde allí irían a su destino.
Los demás al escuchar el grito de Ban, algunos se levantaron y otro abrieron un ojo y después lo cerraron.
─¿Umm? ¿Qué pasa, Capitán?─Preguntó Harlequín mientras se sentaba, cargando a Ende que se había vuelto a dormir en sus brazos.
─Será mejor que recogamos todo rápido, hay que llevar a Ban y Elaine a su luna de miel.
─No hay necesidad de que nos ensuciemos las manos capitán─. Merlín apareció detrás de susodicho y con un chasquido volvió todo a la normalidad y seguido los teletransportó a todos adentro de la taberna.
Como algunos estaban tirados en el piso al teletransportarse cayeron al suelo obligándose a despertar.
Harlequín dejó a la somnolienta Ende en una de las mesas dormida, y con su chaqueta le brindó calor a la de hebras verdes.
─Iré a llamar a Diane, que ella se vino temprano con Gowther─Informó Elaine a la vez que subía las escaleras.
─Uy, hicieron de todo aquí ellos solos─Comentó el capitán con su cara pervertida, como siempre.
Y efectivamente, cuando Elaine bajó no dijo absolutamente nada pero el sonrojo en sus mejillas decía más que mil palabras. Además, como el mundo es cruel Harlequín le leyó la mente a su hermana y siendo sincero sintió impotencia y celos hacia el muñeco de cabello fucsia.
Al pasar unos minutos Diane hizo acto de presencia junto a su pareja en la sala, los dos estaban felices y apegados.
Ende hablaba con Elaine alegremente y la rubia se arrepentía de no haber querido hablar con aquella hada, ya que esta era bastante simpática y positiva. Mentira si negará que no pensó que sería buena cuñada. La hora pasó y llegaron a su destino el cual era el inicio de la montaña, ya que Elaine y Ban seguirían a pie para conoces la zona.
Los pecados, hadas y Jericho salieron de la taberna, los demás se quedaron adentro, tras despedirce, tomaron té para aliviar el dolor infernal de cabeza que los atormentaba.
─Cuídate hermana, si te hace algo este estúpido me avisas ¿Sí?─Pidió Harlequín abrazando a su hermana.
─Ay, hermanito, no te preocupes. ¿Por qué no sales con Ende? Me cae bien.
─Yo... Supongo, se la pediré luego.
•••
─Pon en práctica mis trucos, Ban─Bromeó Meliodas golpeando con su codo a su amigo.
─No soy igual de pervertido que tú, capi.
─Ajá, claroo..
•••
Tras las despedidas el ladrón y el hada emprendieron camino a la cabaña la cual les tomaría llegar unos veinte minutos, se fueron por el sendero rodeado de flores.
─¡Baan! ¡Nos vemos. Pasatela bien con Elaine!─Gritó Jericho poniéndose de punta de pie para que el grito se escuchará mejor.
─¡Siiii!─Devolvió el grito el albino.
La de hebra grisáceas sonrió y empezó a caminar rumbo a la taberna junto a los demás.
─Jericho...
─¿Pasa algo, rey ruco?
Pusó cara de pocos amigos─. No me llames así, ya pareces Ban.
Rió─Dejándome de tonterías. ¿Pasa algo?
─¿Cómo... ¿Cómo superaste tus sentimientos hacia Ban?─Fue demasiado directo ya que la expresión de Jericho cambio drásticamente.
─Hubo un tiempo en el que Howser y yo hicimos una "alianza". Nos ayudamos a superar a Diane y Ban ─Exsaló y relajó sus músculos─. Yo ya más o menos había superado a Ban, pero él estaba enganchado a Diane. Tras haber hablado mucho, muchisímo entre nosotros, apoyándonos en nuestro "desamor", este proceso duró unas semanas. Howser se hizo la idea de que Diane era féliz contigo, y se volvió su amigo cercano, no con malas intenciones. Yo me mentalice que Elaine y Ban eran felices y sabía que él jamás se fijaría en mí asi qué ¿Para qué ser la mala y rechazada de la historia? Tras haber superado mis sentimientos hacia él, me di cuenta que sólo él me veía como una hermana y eso me alegraba; en pocas palabras, de verlo como posible pareja lo ví como otro hermano, bueno, el único que tengo ahora mismo─Finalizó con una sonrisa nostálgica.
─Ya veo...
─King, posiblemente no haz superado a Diane. Pero Ende, aunque suene mal, es un buen partido para superarla.
─Supongo que es agradable y linda.
─¿Ves?─Golpeó con su codo al rey guiñando un ojo─. Ya estás que babeas por ella─Dicho esto salió, corriendo mientras reía, a la taberna.
─¡Jericho!─Gritó ruborizado el rey para salir volando persiguiendo a la albina.
🌸
─Oye Isabel... ─La llamó con la voz tranquila.
─¿Sí?─Respondió mientras limpiaba la mesa.
─¿Por qué odias el amor?
─Es grotesco y asqueroso. Y más sí es sincero.
─¿Por eso odias a Diane y Gowther?
─No odio a Gowther.
─¿Entonces por qué siempre te enojas cuando ves a los pecados capitales?
─Porque hay mucho amor allí.
─¿No que no odiabas a Gowther?
─Odio a King.
