08

128 22 8
                                    

     Jimin se encontraba en un ¿cuarto?, no lo sabia con exactitud, pero observó un poco el lugar a su alrededor y  estaba muy oscuro.  Sintió sus labios ser besados lentamente y con una ternura, pero al pasar los segundos sentía el beso profundizarse, como una necesidad de estar en esos labios, Jimin se estaba dejando guiar por ese beso.

Unas manos subían paulatinamente desde sus caderas hasta su brazos, para después tomarlo de su nuca y pegarse más a él. Sus manos fueron a dar a la espalda para agarra son fuerzas la camisa de esa persona.

Por falta de aire tuvieron que parar unos breves momento, si no fuera por culpa del oxigeno no pararían de tomar esos dulces labios. Jimin entre abrió sus ojos y solo visualizo una cabellera muy bien conocida, pero ¿quien era? ¿tan bebido estaba que no lograba recordar?, volvió a sentir esos labios y el solo se dejaba llevar.

Los labios ajenos abandonaron los suyos para comenzar a besar su cuello, se sintió en la misma gloria, cerró sus ojos con fuerza gracias al éxtasis que comenzaba a tener, inclino su cabeza para que este tuviera más acceso a él.

Sus respiraciones comenzaban agitarse y los gemidos no tardaron en aparecer, cuando él extraño dejo su cuello y volvió a su boca intensificando el beso, una de sus manos volvió a su nuca y otra hacia pequeños círculos en su cadera haciendo que Jimin se volviera  loco de tantas sensaciones.

Volvió abrir sus ojos unos momento y noto que estaba en su habitación, ¿Como había llegado ahí? ¿Esta persona sabia donde vivía? ¿Es que acaso se conocían?, Jimin comenzaba a hacerse demasiadas preguntas a tal punto que sintió que su cabeza dar vueltas.

Trato de observar al desconocido, pero no lograba verle bien su rostro , estaba todo borroso. Comenzó a sentir un poco de miedo y desconfianza, pero su mente se vio en blanco cuando volvió a sentir su boca ser invadida.

– Tienes un sabor embriagador– dijo una voz ronca. 

Jimin sonrió y colocó sus manos alrededor del cuello de él de la voz encantadora. 

– ¿Porque eres tan adictivo?– Preguntó, volviendo a los labios de Jimin.

Jimin hizo una sonrisa de lado y dijo. –No lo sé, descúbrelo

Mientras los besos se intensificaban dicha persona comenzaba a desbotonar la camisa de Jimin, sus movimientos eran tan torpes que no podía hacer ambas cosas al mismo tiempo. Dejo la boca de Jimin un momento para quitarle la camisa.

Comenzó a dejarle un camino de besos desde su abdomen hasta su cuello para volver a tomar los esponjosos belfos de Jimin intensificando nuevamente el beso. Una de las manos fue a dar a sus glúteos para darle pequeños masajes provocando que Jimin ahogara sus gemidos en tan delicioso beso.

El sujeto volvió abandonar los labios de Jimin para volver a dejar un camino de besos húmedos por toda su abdomen, esto estaba frustrando a Jimin ya que solo se dedicaba a besarle, dado que mientras el beso se profundizaba más, el cuerpo de Jimin pedía más.

Jimin volvió a tratar de ver quien era esta persona mientras este se dedicaba a besarle su pecho, ombligo y muslos, solo lograba verle la cabellera y parte de su perfil. Su rostro parecía demasiado familiar y aun no sabia identificar quien era hasta que se enfoco en una de sus mejillas y logro ver una cicatriz muy peculiar, se rehusaba a aceptar que era él, ¿Como era posible? ¿Todo este tiempo fue Jungkook? ¿Como es que habían terminado así?

Comenzó a sentir un pánico horrible, no tenia ni idea como había pasado todo esto y mucho menos porque se había dejado llevar, su respiración estaba entre cortada y su corazón latía a mil por hora, su cabeza comenzó a darle vueltas hasta que no tuvo conciencia de si mismo.

El Destino de Nuestro Amor - [Vmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora