antología; skz

angel; minsung

La diferencia entre ángeles y humanos es más fácil de lo que cualquiera podría imaginarse. En ocasiones encontramos a alguien sumamente etéreo que nos hace cuestionarnos sobre su proveniencia; ¿será que aquella figura tan angelical y encantadora proviene de la tierra celestial que reside en el cielo? ¿Acaso la imagen que estamos presenciando es la prueba de que Dios y sus querubines son reales?

Afortunadamente esa respuesta es fácil de responder: la Biblia describe a los ángeles como seres incapaces de reír, pues la emociones (desde el dolor hasta la alegría) son únicamente propias de los seres humanos.

—Jisung deja de mirar así a Minho —Changbin reprendió al chico ante la constante observación que éste tenía sobre Lee Minho—. Ni siquiera te estoy viendo y me siento perturbado —continuó con la mirada sobre sus alimentos mientras los consumía.

—¡Pero, Changbin, no se ríe! —exclamó frustrado con un puchero en su labio inferior.

—Aquí vamos de nuevo —Seungmin suspiró audiblemente.

—Quisiera recordarles que no compartimos clases con ustedes y no entendemos de qué están hablando —Felix intervino.

—En la clase de religión nos contaron que la diferencia entre un mortal y un ángel son las emociones, la que más destaca es la risa —explicó Seungmin acompañado de otro suspiro.

—¿Y Jisung cree que Minho es un ángel porque no le ha visto reír? —los chicos trataron de contener sus carcajadas.

—¡Yah! ¡Podría serlo! Es hermoso y es demasiado amable, todo cuadra —se escudó Han y sus amigos no retuvieron más sus risas.

—Estás perdido, Jisung. Realmente te gusta tanto que crees disparatadas así —Felix limpió una lágrima que escapaba de uno de sus ojos después de reír tanto.

—No se burlen —su puchero regresó, esta ocasión junto con un ceño fruncido sobre sus cejas.

—Bien, bien —Seungmin paró—. ¿Por qué no compruebas tu teoría? Así no sólo acabas con tus dudas sino también nos callas.

—Lo haré —Jisung se levantó con decisión de la mesa y tomó una gran bocanada de aire antes de comenzar a caminar hacia donde Lee Minho descansaba y trataba de tomar sus alimentos en paz. Sus amigos lo miraron sorprendidos mientras se alejaba.

La determinación de Han comenzó a flanquear conforme se acercaba al mayor. Mientras sus afilados ojos tenían cada vez más capacidad de observar los detalles de Lee, sus nervios aumentaban y comenzaba a dudar el continuar.
De repente se detuvo y giró sobre su eje para regresar a su asiento.

Se dejó caer sobre la banca y dejó salir el aire que tanto trato de retener.

—Es demasiado precioso, no puedo hacerlo —habló con un puchero—. Además, ¿qué le voy a decir? Hola, ¿eres un ángel?—recargó su frente sobre la mesa de metal.

—¿Y por qué no? —Felix  cuestionó mientras palmeaba suavemente la espalda del menor—. Podría tomárselo como un cumplido —animó.

—¡Eso es una buena idea! —Changbin celebró—. Está sentado con Chan, podemos hablarle para que quede solo Minho y si llega a ser embarazoso, sólo sean testigos ustedes dos —planeó sonriente.

—Suena increíblemente bobo, pero no pierdes nada intentando —Seungmin finalizó.

El trío miró expectantes a Han Jisung esperando una respuesta. El chico se removió sobre su asiento antes de levantar el rostro.