—Es tarde, me iré a casa —dijo Jaebeom con un suspiro cansado—. ¿Está bien si te dejo cerrar? —preguntó a Yugyeom que aún estaba terminando de limpiar el piso.
—Tranquilo Hyung, puedo con eso. Chan me espera —contestó el menor con una sonrisa.
—Bien, nos vemos mañana en clases. Me despides de Chris —Yugyeom asintió y Jaebeom tomó sus cosas.
Había sido un día largo, lo bueno fue que pudo adelantar algunas tareas en su descanso y ratos libres. Podría llegar a casa y tirarse en su cama toda la noche sin preocupación, excepto por Nora, tenía que ver que tuviera todo en orden y limpiar su caja de arena. Pero no era gran cosa, lo haría rápido y dormiría, lo necesitaba.
Salió del edificio por la parte trasera como todos los empleados del café, pero se detuvo al momento en que identificó una silueta frente a él.
—¿Podemos hablar? —preguntó con timidez, la irreconocible voz de Mark.
Jaebeom pudo respirar tranquilo al darse cuenta de que solo se trataba de su viejo amigo.
—¿Mark? ¿Qué haces aquí? —musitó Jae acercándose al americano.
—Me enteré de lo que sucedió con Diana —dijo Mark.
El pelinegro sintió su cuerpo estremecerse ante la mención de aquel nombre, ¿cómo supo Mark lo que pasó? ¿Y por qué quería hablar con él? Se aclaró un poco la garganta y rascó su nuca un poco incómodo.
—¿Pero cómo supiste que estaría aquí?
—Bambam y ese chico alto me dijeron que trabajas aquí —explicó el rubio—. Así que vine a buscarte.
—Ya veo —murmuró el pelinegro. Mentiría si dijera que no sentía la tensión que había entre ambos—. Entonces supiste sobre...
—Sí, ella me lo contó todo.
—¿Y quieres hablar sobre eso?
—Jaebeom, no imagino cómo debes sentirte con ello porque no me ha pasado pero creo que podría estar contigo y escucharte para lo que sea —dijo Mark—. Lamento mucho que nos enamoraramos de la misma chica, has visto cómo nos jodió, ya ni siquiera hablamos.
—Mark, desde un principio traté de que eso no nos afectara. Apenas nos estábamos conociendo y no quería arruinarlo, además, tú te veías feliz con ella y estabas cambiando. En verdad creí que habías cambiado.
—Lo hice, cambié por ella. No sé qué me sucedió, de verdad yo no quería perderla —dijo con indignación el americano—. Pero no es el punto, debiste decirme que te gustaba, habría hecho algo al respecto y no me apresuraría con ella.
Jaebeom negó.
—Ví lo feliz que era ella contigo, no sería capaz de arruinar eso. Si yo hubiera sido valiente en ese entonces, habría sufrido la misma suerte de ahora. Ella no me aceptaría porque no me puede ver más que un simple amigo —alzó un poco la voz sintiendo sus ojos arder con sólo recordarlo.
—Bien, tienes razón —calmó Mark—. De verdad no sabes cuánto lo siento, no debí dejar que una chica arruinara nuestra amistad.
—No es tu culpa, yo creí que podría con esto, pensé que no me afectaría y mira como terminé —un leve sollozo se escapó de su garganta y una lágrima silenciosa recorrió su mejilla.
—Jae... N-no te preocupes, habrá alguien que te ame con locura —murmuró Mark sintiéndose mal por su amigo—. Te querrá tanto que te hartarás —sonrió—. Solo necesitas tiempo y paciencia.
—Gracias Mark —sollozó el pelinegro y sin pedir permiso se lanzó a sus brazos rompiendo en llanto.
Por mucho tiempo se lo estuvo guardando, no era lo mismo hablarlo a solas que contárselo a un viejo amigo. Mark se quedó con él un par de horas, hablaron y se pusieron al día lo más que pudieron.
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I'm Not Invisible! [임재범]
FanficUna promesa. Una decisión de no volver amar. ¿Qué sucede cuando alguien interfiere en sus planes? Jaebeom tuvo que perderla para entender que ella era la indicada. ¿Qué tan lejos tiene que llegar ahora para darse cuenta de que es demasiado tarde? AN...