Cuento que merece un final mejor {Caché G!P}

Capítulo 51: Agua

Mini Maratón 1/3
*Lean la nota al final*

La Peli-Azul se puso de pie y salió de la habitación seguida por su hijo.

El dúo se detuvo en medio de la cocina.

-¿Tienes hambre? ¿Gustas desayunar? -Le preguntó mientras encendía la luz del lugar.

Máx se sentó al lado de sus platos de comida en respuesta.

-¿Lo de siempre, caballero? Comida y agua. -Poché le habló a su hijo mientras le servía.

La Peli-Azul abrió la nevera y sacó el galón de jugo de frutas para beber de él directamente, pero fijó su vista en un cereal de chocolate que había allí adentro de la nevera.

-Chocolate. -Murmuró mientras con su mano libre tomaba la caja de cereal.

Volvió a colocarla dentro de la nevera.

-¿Qué puede desayunar Ramón? -Preguntó en murmuro mientras miraba la comida que habían comprado hacia un par de días.

Chasqueó sus dedos cuando tuvo una idea.

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Calle despertó y tan pronto se sentó en la cama tuvo que correr al baño. No se fijó en nada cuando entró directa a arrodillarse frente el inodoro. 

-¿Calle? -La Peli-Azul se asomó por la esquina de la cortina al escucharla.

Al verla allí, salió del agua y se puso el mismo bóxer que había dejado tirado en el suelo antes de acercarse y agacharse a su lado.

-Vete, no quiero que me veas. -Calle intentó apartarla, pero Poché frunció el ceño y se acercó más a ella.

-Que no me muevo de tu lado. -Poché le sostuvo el cabello cuando Calle volvió a poner su atención en el inodoro. -La mini Bestia ya anda haciendo de las suyas. -Dijo con una sonrisa cuando Calle terminó.

La Castaña se sentó en el suelo luego de bajar la cadena y la miró con enojo.

-No es gracioso. -Dijo mientras se cruzaba de brazos.

-No para nada. -Poché se puso seria ante la mirad de la Castaña.

-¿En que momento pasó? -Preguntó y cuando Poché la vio intentando levantarse la ayudó tomándola de las manos.

-Bueno... te lo puedo contar con lujos de detalles. Yo estaba el día en el que pasó. Hace cuanto... ¿un mes o menos? -Preguntó y Calle la ignoró mientras se lavaba al boca. -Pues resulta que alguien muy, pero muy parecida a mi fue víctima de ti. De tu sensualidad, de tu belleza, de tu hermosura, de tu sexy lunar... de ti pues y no pensó en protegerse a pesar de que sabe que sin gorrito no hay fiesta. Ocurre que se tenían ganas y estaban solas... Una cama y se dieron...

-Calla. Sé muy bien como ocurrió. -La interrumpió cuando terminó de lavarse la boca.

-¿Y para qué preguntaste? -Poché se cruzó de brazos.

-No era de forma literal.

-¡Ah! ¿Te sientes mejor? -Le preguntó cuando Calle terminó de secarse la cara.

-Sí, mejor. ¿Qué hora es?

-Son las siete.

-La cita es a las ocho. -Calle se quitó la ropa frente a la Peli-Azul sin pudor alguno y se metió a bañar.