Capítulo 52: Cristales Rotos

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Mini Maratón 2/3

-Vamos, Poché... Solo es hablar con Pau. no mataste a Paisa. Tú no apretaste el gatillo. -La Peli-Azul había llegado a su casa, se había metido a bañar y al salir se hablaba al espejo con firmeza. -¡Tú no apretaste ese puto gatillo! -Gritó con furia y golpeó el espejo.

El sólido golpe hizo que Máximo se pusiera de pie para ver que le ocurría a su madre.

FlashBack

La joven Peli-Azul con un poco más de peso, notable en sus cachetes, con lágrimas en sus ojos y sus puños cerrados estaba parada tras la cinta amarilla de la policía.

Miraba el coche de su padre, miraba los cristales esparcidos por toda la carretera al igual que algunas piezas.

Miraba como el carro había sido pérdida total, como no tenía puerta debido a que los bomberos la habían roto con tenazas mecánicas para poder sacar a su padre del interior.

Se sentó en el suelo, captando la atención de algunos curiosos que se acercaban a mirar la escena mientras la policía removía el otro auto.

Un hombre se acercó a la Peli-Azul en el suelo preocupado, pero la Peli-Azul lo rechazó. Se rehusó a levantarse del lugar hasta que se llevaron el auto de su padre.

-Poché... -La voz preocupada de Paisa se hizo presente y Poché alzó su cabeza.

-Paisa... Se han ido. -Dijo antes de volver a esconder su cabeza y su amigo se sentó en la misma posición que ella a su lado.

-Ellos no se han ido. Siempre estarán en tu corazón y en tu mente. Siempre estarán velando por ti.

-Se supone que yo iría con ellos, pero no quise. -La voz entrecortada de la Peli-Azul.

-Pero por cosas del destino fue así, Poché. -Paisa rompió la escasa distancia entre ambos y la abrazó a pesar del intento de separación de la Peli-Azul. -Escúchame Poché... Debes ser fuerte, debes levantarte y demostrar que puedes. Debes hacer que desde el cielo se sientan orgullosos de ti.

-¿Orgullosos? ¿Te refieres a que desde el cielo me vean beber y acostarme con cuánta desgraciada veo? ¿Qué recuerden cuánto daño le hice a nuestra familia?

-Me refiero a que te levantes en todos los sentidos. Seas la mejor en todo lo que hagas. Que sigas los consejos de tu padre. Que estudies lo que tanto te gusta, que te gradúes como la mejor, tengas un buen trabajo y más adelante una familia. Que trates a esa mujer como Juan Carlos trataba a tu madre, como una reina.

-¿Y a mis hijos como mis tesoros? -Poché levantó su cabeza con una pequeña sonrisa y Paisa sonrió.

Fin del FlashBack

El tímido ladrido de Máx hizo que Poché dejara de mirar el espejo con su puño aún en él y lo mirara.

-Yo no lo maté... -Le dijo a Máx mientras separaba su puño del espejo.

Abrió la pluma del lavabo y dejó que el agua corriera por su puño lastimado. El agua cayó con un pequeño toque de rojo. La Peli-Azul tomó una pequeña toalla y envolvió su mano en ella.

-Yo no fui. Yo no estaba con ellos... -Poché se sentó sobre la tapa de inodoro mientras se ajustaba la toalla. -Yo no estaba con ellos... Yo debí morir aquel día con ellos. Lo hubiera preferido por mucho. -Máx se acercó a Poché y puso su cabeza sobre la rodilla de su madre. -Cierto, debo moverme.

Cuento que merece un final mejor {Caché G!P}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora