La primera señal tuvo lugar en una de estas tardes a finales de noviembre, en que intentaba tomar un pasillo diferente al de Ginny, que llevaba siguiéndolo desde que se encontraron de frente en el Gran Comedor. Esa niña sí que podía ser insistente.
Leonis iba unos pasos por delante de él. Draco se preguntaba a dónde se habría metido Hermione ese día, cuando lo escuchó.
Matar.
Matar.
Quiero matar.
Sangre.
Saaaangre.
Matar. Matar. Matar.
—Leonis —El can se detuvo en seco, al igual que él momentos atrás—, ¿oyes eso?
Matar.
Matar.
Quiero matar.
Sangre.
Quiero sangre.
Era una voz profunda, silbante. Tenía una manera extraña de pronunciar las sílabas, una especie de "s" intercalada al final.
Uno a uno, sus músculos se tensaron, mientras daba un vistazo al pasillo vacío.
Matar.
Quiero matar.
Sangre.
Saaaaangre.
Volvió a fijarse en Leonis, que sacudía la cabeza.
—¿De verdad no lo oyes? —Otra negativa.
Draco titubeó al acercarse a una de las paredes de piedra del castillo. Rozó la superficie dura y fría con las puntas de los dedos. Podría jurar que venía de adentro.
¿Cómo era posible?
Matar.
Quiero matar.
Matar.
Sangre.
Cuando una idea cruzó su mente, ahogó un grito y echó a correr en la dirección opuesta a la que había tomado antes. Leonis se apresuró a seguirlo. Trastabilló al bajar las escaleras hacia las mazmorras, se deslizó en medio de un grupo de Sly, estuvo a punto de chocar con un estudiante mayor que le hizo un reclamo al que no prestó atención.
Empezó a golpear la puerta del dormitorio del profesor Snape nada más detenerse frente a esta. Nadie respondió.
Emitió un sonido frustrado y regresó sobre sus pasos, hacia el laboratorio. Volvió a golpear la puerta. Leonis, detrás de él, ladró.
Su padrino tenía cara de que consideraba maldecirlos cuando abrió. Luego su mirada se tornó aún más sería al darse cuenta de que jadeaba.
—Hay algo aquí, que no es humano —Musitó, tirando de su túnica para exigir la atención del huraño profesor, gesto que tenía por mal hábito desde la niñez—. Severus, la Cámara de-
Sabía que los profesores no se tomaron en serio el mensaje, buscaban un culpable en el cuerpo estudiantil o los empleados. Pero si resultaba ser lo que creía, se avecinaban problemas. Graves problemas.
Snape le chisteó para que se callara. Draco se quedó con la boca abierta, las palabras para formular su teoría en la punta de la lengua, cuando se percató de que el profesor jalaba de algo. Alguien.

ESTÁS LEYENDO
Cuenta regresiva
FanfictionDesde que era muy joven, Draco sabía que sólo sería cuestión de tiempo para que el Señor Tenebroso fuese a buscarlo. Fanfiction slash del universo de Harry Potter. Aventura. Fluff/Eventual Drarry. AU. Draco!Elegido/Harry!Slytherin. El universo de Ha...