Difícil

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¿En qué momento se había convertido en la diana de ese tipo?.

Así se sentía Takahashi Misaki, bombardeado de "dardos" con formas de atenciones, recibiendo incluso cheques en blanco en la casa dónde vivía con su tía.

Ella había nacido en japón pero era de nacionalidad argentina.. Vivió años ahí, pero por varios motivos había vuelto a su tierra natal.. Era una mujer algo veterana y soltera, muy amargada por su mala suerte en el amor. Siempre se desquitaba con él y Takahiro cada vez que sus padres les obligaban a visitarla.

La soportaba y respetaba.. Era su única familiar viva aparte de su hermano Takahiro, le dejaba vivir ahí en su casa.. Pero la relación era difícil.

Sobre todo aquel día.. Jamás pensó que un día en la mañana, su tía estuviera con los restos de los cheques en blanco que él rompió, mirándole con maldad y preguntándole.

"¡¿Misaki sos puto?!".

Lamentablemente él sabía español y logró entender la acusación.. ¡Asami Ryuichi era de lo peor!, por su culpa su tía estuvo a nada de botarle de casa, manteniéndole ahí con la única condición de que comprobara que no tenía una ETS.. Era humillante.. ¡Él era virgen por todos los cielos!.

-¡Misaki!.. Debes ayudar en el mesón por éste día, el lugar está abarrotado, cómo estamos en víspera de navidad debes usar ésto y recuerda la consigna de hoy.

"Jo jo jo ¿Cual es tu pedido para santa?"

Y no olvides tu sonrisa- Dice la muchacha muy animada.

Y no olvides tu sonrisa- Dice la muchacha muy animada

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(Gorro usado por Misaki, imagen no me pertenece.)

-Ah.. Si.. "Jo jo jo y lo demás"- Misaki masculla algo fastidiado.

En cuanto se apostó en la barra, los clientes se amotinaban pidiendo café, cappuccinos, cortados, espressos entre otras bebidas calientes.

Aguantaba con la máxima paciencia posible a más de algún idiota que le molestaba proponiéndole cosas indecorosas, invitaciones a salir.. Entre otras cosas.

¿Qué le pasaba al mundo? ¡Él solo estaba trabajando en una cafetería! ¡¿Por qué la gente le proponía cochinadas?!.

¿Acaso en su cara o frente tenía escrito..

"Lleve su Takahashi Misaki en liquidación, ¡Tutros y muslos tiernos incluídos en el super pack!, aproveche y haga su propuesta indecorosa, ¡Se le hará un 10% descuento extra!".

¡No!.. Él no estaba en venta.. ¿Por qué le proponían tantas porquerías? ¡Estaba harto!.

La tarde se le estaba pasando en un abrir y cerrar de ojos, solo le quedaba una hora para terminar su turno e ir a ver a su hermano para celebrar navidad.. Aunque fuese en el hospital, lo importante era que lo celebrarán juntos.

Frente a sus cansados ojos verdes y mientras preparaba un moccachino, las manos de un hombre traqueteaban sobre la barra esperando atención.

De seguro estaba apurado, era tarde al fin y al cabo. Con letargo pero amabilidad procedió a poner su mejor cara para tomar su pedido mientras terminaba el que estaba haciendo.

-Jo jo jo.. ¿Cual es tu pedido para santa?-

-Que trabajes para mí, Takahashi Misaki-

Lo que le faltaba.. ¡Ese petulante y pervertido hombre!.

-Disculpe no escuché bien ¿Cual es su pedido para santa?-

-Takahashi, lo escuchaste muy bien, trabaja conmigo, no soy un hombre de mucha paciencia, y no cuento con tanto tiempo ¿Por qué no has cobrado ningún cheque?-

-Porque los he roto.. Ya le dije que no me acostaré con usted ¿Qué pasa con los hombres de hoy en día? ¿Tengo algo en la cara que diga que estoy en venta?-

-No precisamente, y no te quiero en mi cama, eso fue solo una prueba y la pasaste-

-Uy pues que métodos los suyos para contratar a su personal, es usted un genio, no le vayan a robar la idea.. O peor aún.. No se lo vayan a llevar los rusos- Misaki suelta en un susurro con cara de "angustia"

-Takahashi-

-Váyase de aquí, si no va a querer algún café, pierde su valioso tiempo-

- Quiero un espresso-

- Doble supongo-

-Aprendes rápido-

-Ugh-

-Takahashi, necesitas el dinero, y yo necesito un buen asistente-

-No.. No trabajaré para usted, por su culpa solo me han pasado desgracias, incluso mi tía pensó mal de mi y casi me echa de casa por ver la lluvia de cheques en blanco que usted enviaba.. Ella.. Me pregunto si era..-

-¿Si eras?-

-Me pregunto si era.. Si era "puto"-Misaki habló muy bajito- ¡No se burle!.. Mis padres siempre fueron tan educados y convencionales, eran muy respetuosos y jamás les escuche decir una grosería de ese calibre, pero mi tía no se corta a la hora de ser mal hablada y mal pensada.

Está tan loca.. Me obligó a ir a un laboratorio a realizarme pruebas para descartar enfermedades de transmisión sexual.. ¡Le dijo a todos que me llevaba porque yo era un pillo!-

-Pero nada de eso que me comentas es mi culpa.. Cielos chico, que vida la tuya- Asami comenta divertido.

-Aquí está su espresso, que lo disfrute, con permiso seguiré atendiendo a los demás clientes-

-Takahashi, no insistiré por mucho más, día a día estoy poniendo a prueba a más asistentes masculinos como lo hice contigo. Aún así, nadie a dado la talla como tú, pero eso podría cambiar de un momento a otro y perderás tu oportunidad-

-Pues eso sería terrible ¿Quién rechazaría trabajar con un pervertido y abusador como usted?-

-Me retiraré, espero tu llamado a la brevedad- Asami deja sobre el mesón su vistosa tarjeta con su número personal, y una cuantiosa cantidad de yenes, que pagaban mucho más que un café.

-Oiga ¿Que significa ésto?- Misaki interroga al hombre que se levantaba de su asiento para irse.

-El dinero para pagar el café, y tu propina porsupuesto-

-¿Usted parece no entender verdad?, no me comprará con su tonto dinero-

-Es tu dinero ahora.. Recuerda que tengo mucho, no necesito que me lo devuelvas-

-Ugh.. Enserio no entiendo cómo es que tiene suerte con las mujeres con las que se a relacionado, es usted un patán-

-¿Es poco dinero?. Quizá necesitas más-

-¿Así que en verdad quiere fastidiarme no?.

¡Atención damas y caballeros!- Misaki menea una campana con un sonido "tilin tilin" navideño llamando la atención de todos en la cafetería.

-Takahashi ¿Qué haces?-

-¡El señor Asami Ryuichi a hecho una gran y generosa donación a los niños sin hogar!- Misaki deposita risueño los billetes uno a uno en la cristalizada caja de donaciones- ¡Un aplauso para ésta alma bondadosa!, Asami san, el café es cortesía de la casa, yo pago, ver personas tan piadosas como usted en éstos días no es común, ¡Espero que el siguiente año sus ganancias se multipliquen! Jo jo jo- Misaki termina con todo el sarcasmo del mundo haciendo que a Asami Ryuichi le ardiera la sangre, pero no de rabia precisamente.. Se sentía desafiado..

Takahashi Misaki pensaba que esa sería la última vez que vería a ese hombre.. Llegando al hospital se daría cuenta que lo vería mucho antes de lo que pensaba.

Tu asistente.. Tu vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora