Tu asistente.. Tu vida.

Explicaciones.

N..No..

Fue lo único que pudo gesticular cuando la vio.

-Takahashi Takahiro, te ves terrible, ¿Te sientes bien?- La pregunta se oye dulce y afable atemorizando aún más a Takahiro en la camilla.

-Señora Usami- Tragó saliva- Váyase por favor-

-Es lindo que me llames señora Usami, lo que no es lindo es que después de años, insistas en dar lástima para tener a mi esposo-

-No sé de que habla, retírese o llamaré a las enfermeras-

-Bueno querido, sigue simulando que nada sabes, yo sólo venía a confesarte algo importante, a ver si con eso al fin entiendes, que hagas lo que hagas, a Akihiko no lo vas a recuperar jamás, él no va a volver a ti Takahiro- La mujer es rápida en tomar la debilitada mano de Takahiro con fuerza, entierra sus uñas hasta ver que lo lastima, y luego guía la mano herida hasta su pequeño pero abultado vientre- ¿Sientes ésto?-

-N..No- Lloró con la garganta deshecha- Basta, ¿Por qué hace ésto?, ¡¿Por qué me hace ésto después de tanto?!, ¡¿Cuando van a estar conformes?!-

-Éste.. Es el producto de las interminables noches de hacer el amor con mi esposo, ¿Entiendes?, jamás vas a poder conmigo, yo si podré darle descendencia, una familia, yo si puedo retener a mi hijo.. No como el bastardo fenómeno que nunca nació-

La malvada y elegante mujer estaba feliz, el resultado de su visita fue exitoso, la ardiente falta de moralidad la tiene en la cima. En la camilla Takahiro llora con tal dolor que solo podía regodearce a gusto con su actuar.

Justo cuando iba acercarse al equipo que mantiene estable al paciente, una mano sujeta fuertemente la suya. Ella se asusta porque fue cuidadosa de que no hubiese nadie cerca, le causa impresión ver al tipo de aspecto peligroso, quién sin decirle nada la sacó a tirones hacía afuera.

Takahiro no entendía ni quería entender nada.. Su corazón estaba tan triturado en todos los sentidos, está aplastado, le dolía tanto que si no fuera por Misaki.. Preferiría estar muerto.

-Takahiro-

Esa voz.

-T..Tú..- Takahiro lo ve en la puerta, el magnetismo de ese hombre sigue con él, arrastrándole a la perdición.

-Perdóname, cuando supe que te habías accidentado perdí la cordura, nada me importó y volví para estar cerca aunque fuese un momento. Provoqué caos en tu vida nuevamente, Takahiro..- Susurró con el rostro dolido, intentó acercarse pero..

-Vete.. ¡Vete!-

-Me iré- Akihiko dice eso pero no concuerda con su mano cerrando la puerta por dentro- Takahiro.. Te amo-

-¿Qué haces?, Akihiko- Lloró al verlo acercarse sin hablar- ¿Qué quier.. ¡Mmm!-

El beso había sido sopresivo, Takahiro trató en un principio apartar a Akihiko, pero no tenía ni la fuerza.. Ni los deseos de hacerlo.

Jamás se habían dado una despedida, no alcanzaron y no pudieron. La sensación es agridulce, remueve demasiado del pasado. Las lágrimas no solo eran de él si no del hombre que le "atacaba" robándose su saliva, su aliento y su boca.

Cuando respirar se hizo difícil, Akihiko al fin le soltó, besó córtamente sus labios un par de veces más mientras compartían aliento agitado. Takahiro se atreve a verle cara a cara.. Se arrepiente.. Akihiko le contempla con aquel amor que sabía que ambos guardarían siempre. ¿Por qué la vida fue tan injusta con ellos?.

-Takahiro, ni el tiempo ni tus dificultades borran lo lindo y adorable que eres, tu sencilla belleza- Frunció su frente juntándola a la de Takahiro que cerró los ojos con fuerza- Ésto me está matando.. Nada puedo hacer, no podría vivir si ellos acaban contigo como trataron de hacer en el pasado-