Tu asistente.. Tu vida.

Propuesta.

Al hotel..

Aquel tipo le había metido a su auto sin autorización alguna, y ahora, así sin más ¡Dio la orden de llevarle a un hotel! ¡¿Pero quién se creía?!.. Lo peor de todo es que no podía moverse, pues al meterle al auto con él tratando de salirse, el petulante hombre le había devuelto a su asiento, había cerrado la puerta sin cuidado dejando atrapado "su trasero de pollo" en ésta.

-¡Déjeme ir! ¿Qué se supone que hace? ¡Ésto es un secuestro! ¿Y por qué me lleva a un hotel?.. Oh no.. ¿No me diga que le ponen los jovencitos con trajes de animales?- Misaki pregunta atemorizado tapando con sus manos de pollo, sus "partes íntimas" en el traje.

-¿Ponerme? ¿Tú?, me gustan las mujeres, y no cualquier mujer, un mocoso cómo tú está lejos de ponerme, menos en ese estúpido traje de pollo-

-¿Y entonces?-

-Llegamos Asami sama ¿Necesita que supervise que el joven suba a la habitación?- Pregunta el incómodo guardaespalda.

-¡No se atrevan a ponerme sus cochinas manos encima de mi o mi polluno traje!-

-Quítate ese estúpido disfráz, así no me acompañarás- Exige Asami.

-¡No soy su dama de compañía!.. Ugh..-

-¿Qué sucede?-

-Me pica la espalda, el traje me dio calor y ahora me dio comezón-

-Que muchacho ¿Estás desnudo bajo ese traje?-

-Bueno, es muy ajustado y daba calor-

-¿Sabes siquiera quién uso esa cosa antes de tí? ¿Cómo puedes ser tan descuidado, siendo según tú el "mejor asistente"?-

-Ahgg.. Me pica.. ¡Pica! ¡Pica! ¡Pica!- Exclama angustiado retorciéndose tratando de buscar el cierre de su traje.

-Déjame ver, eres un fiasco mocoso- Asami hace el intento de encontrar el dichoso cierre del traje.

-¡Cállese y rásqueme!- Misaki lo apunta exigente y totalmente desesperado.

-¿Rascarte? ¿Estás escuchándote?-

-Si quiere que suba con usted, es lo mínimo que debe hacer por mi-

-Cuidado con lo que propones ¿Sabes al menos para que te quiero en la habitación?-Asami agudizó la mirada.

-Me da igual, si quiere que le baile en éste estupido traje para sus deleites de viejo excentrico y pervertido, lo haré.. ¡Solo rásqueme!.. ¡Ahhhhh!.. ¡Siii!.. Mmmmm así..-Misaki gimió con descaro y satisfacción pura.

-¿Te gusta?- Asami cuestiona con gracia, viendo a su chofer rascar al muchachito con un peine.

-Oh si.. Es un alivio.. Creo que estoy en una nube.. Gracias Asami sa.. ¿Eh?, usted no..-

-¿No creerías que yo me prestaría para algo asi verdad?-

-Ugh.. ¡Váyase al infierno! ¡Me bajaré!.. O..Oiga señor chofer ¿Usted me daría ese peine que ocupó?, es para rascarme en el camino- Misaki lo pide muy amable sorprendiendo a Asami por el cambio sorprendente de actitud. Tan dócil.

-Te lo regalo muchacho, yo no lo ocuparé- Responde el chofer con un gesto de asco.

-Gracias.. Mm abra la puerta por favor-

-Él abrirá la puerta solo cuando yo lo ordene, no cuando tú lo pidas-

-¡..!-

Luego de una extraña guerra de miradas, al fin habían bajado del auto.

Misaki había intentado irse, pero aquel hombre había mandado a su guardaespalda para traerle de vuelta.

-¡Suélteme! ¡Ya déjenme ir!-