VIVIR UN SUEÑO AL EXTREMO {JIKOOK/JINTAE}

UNA SORPRESA INESPERADA

Toda mi alma se sentía feliz, mi cuerpo aun temblaba, lleno de pasión y amor, su perfume impectado en mi, me encantaba su olor, mis labios hinchados de tantos besos, mi piel marcada de sus labios sensuales y ardientes que aun me quemaban, mi güerito hermoso de ojos azules, me había hecho muy feliz como nadie en mucho tiempo, sentía la necesidad de tenerlo de nuevo entre mis brazos, lo que me entristeció es que era solo su daddy y eso me dolia, quería gritarles a todo el mundo que yo era el dueño de su corazón y que nada romperá, con este amor que siento en mi, ♥ al darle un beso de despedida, me salí rápido de su casa ya que era hora de irme a casa, su papá estaba a punto de llegar y no quería que tuviera problemas por mi culpa, al partir fui hasta mi mustang, donde lo acaricie por un instante, era una semana de seguir entrenando y ser cada día mejor, estaba ansioso por contarle a mi amigo Jin, después de la escuela iría a verlo a casa, estoy muy entusiasta para la siguiente prueba y ansíoso por correr, tengo muchos sueños a futuro y el principal es mi amor por Jimin, luchare por su amor contra Namjoon, no lo volverá a molestar, ese es mi propósito y lo haré, al llegar a casa mi madre ya dormía, solo le di un beso en la frente y me fui a descansar para empezar mis actividades de la semana.

Al amanecer, Jung y su mamá se levantaron muy temprano a la panadería, el señor Jan todos los lunes iba a visitar su negocio, se veía mejor de salud y muy pronto regresaría a trabajar...

—Muy bien, creo que los dos han hecho un gran equipo, el negocio a crecido y debo confesar que lo han hecho mejor que yo.

—Gracias señor Jan, pero gracias a usted, no he caído en depresión ya me siento mejor y siento que soy eficiente en algo.—Expreso la mamá de Jung, muy alegre.

—Me da gusto que pude ayudarla en esos momentos, Jung sigue luchando por tus sueños y nunca te des por vencido, se que muy pronto lo lograrás, bueno debo irme...¡hasta pronto!

—Gracias Señor Jan, hasta pronto.

El pelinegro estaba satisfecho con su trabajo y no paraba de estar entusiasta.

—Hoy te levantaste de buem humor, ¡verdad hijo!

—Si mama, mucho estoy muy feliz.

—A que se debe tanta felicidad.

—Mamá no te molesta si te digo que, ¡estoy enamorado!

—Por supuesto que no hijo, el amor es algo maravilloso y más si eres correspondido.

—Creo que si soy correspondido, ahh...nunca creí que el amor fuera tan hermoso, y más sentirlo por alguien.

—Bueno, ¿quien es?

—Mama aun no te lo puedo decir, pero pronto lo sabrás.

—Esta bien hijo, cuando te sientas seguro me lo dirás.

—Gracias mami—Dandole un beso en la frente, siguieron trabajando ambos.

En la Uni Jin estaba preparado para entregar sus tareas del fin de semana, había tenido mucho trabajo y eso le estaba agotando, pero valía la pena, ya que quería graduarse y ser un profesional, la profesora le calificó y Ken no había hecho tareas, estaba tan enfocado en su mundo que no prestaba atención a las clases como debía ser...

—Jin, me pasas los apuntes, la verdad estaba tan emocionado con mi primer día, que no preste atencion a lo que dijo la profesora.

—No lo haré Ken, ayer me la pase haciendo mis trabajos y me costó mucho esfuerzo, creo que ya debes madurar en ese aspecto, si no quieres quedarte en el camino.

—De acuerdo, ¡tienes razón Jin! me esforzaré más, gracias de todos modos—Le decí mientras Jin, se iba a su lugar.

El peliplata solo hizo pucheros y cruzó los brazos, sorprendido por la respuesta firme de Jin.