VIVIR UN SUEÑO AL EXTREMO {JIKOOK/JINTAE}

UNA BODA VELOZ

El chico lo miró intimidante, esperando que fuera una respuesta coherente a lo que tenía que decir el pelicastaño claro.

Tomó su pantalón, buscándolo por toda la habitación...

—Amor, ¿que haces?—mientras buscaba, Tae tapaba su pudor con la bella sabana de color violeta...

—¡Aquí esta!—el chico sacó las llaves de su pantalón y se las dio en su manita de su chico hermoso...

—Unas llaves, que tienen que ver con lo que te pregunte amor...

—Estas son las llaves de nuestra casa—Tae estaba tan sorprendido que no lo podía creerlo...

—Compraste esta casa para mi...

—No yo no la compre, es un regalo de bodas de nuestros amigos, Jimin y Jung...

—Pero no podemos aceptarla, esta muy hermosa y lujosa, a de valer una fortuna...

—Mira quiero que te convenzas de que es verdad.

Jin hablo a Jung a su celular a una video llamada, explicandole de la sorpresa inesperada para ambos...

—Aquí esta mi Tae conmigo, no me cree que fue regalo de ustedes...

—Pásamelo Jin—añadió Jimin, quien estaban juntos también...

Amigo he cierto lo que dice tu Jin, nosotros se la regalamos, creo que mi Jung no compro dos casas, como lo había planeado...

Sino compro tres...

—En serio, si que deja mucho el ser corredor profesional...

—Compro nuestra casa para nosotros y la otra es para mi suegrita adorada que la quiero mucho...

—A ver queremos conocerla—el pelidorado presumió su linda casa en el puerto de Montt, estaba muy cercas del mar y la había adquirido por medio de sus patrocinadores que tenía en sus próximas carreras de gira...

—Esta muy bonita, felicitaciones amigos...

—Gracias, bueno los dejamos se ve que están un poquito ocupados, ¡verdad amor!

—Siii claro creo que hay les falta un poquito de ropa... Chao amigos, no los interrumpímos mas.

Avergonzados estaban de que sus amigos los vieran en prendas menores, colgando tiro el celular besando a su amado, quien le dio las gracias por esa linda sorpresa...

—Gracias por este regalo tan lindo, pronto estaremos unidos en matrimonio y awww... Soy muy feliz mi amor—alzando su barbilla, le afirmó tanta dicha...

—Ahora a dormir mi amor, que mañana empiezan nuestros preparativos para la boda..

—Quiero que sea algo distinto, algo diferente...

—Como diferente...

—Te gustaría casarte en una pista de autos, como lo habíamos soñado...

—Awww... Sería una linda boda, con todos nuestros seres queridos y autos veloces...

—Claro que si, ahora ven aquí, ¡mi hermoso Tae!—abrazándolo le dio un beso tierno en su frente, quedándose profundamente dormidos los dos novios enamorados.

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Un mes después.

Había llegado el gran día de la boda, con muchas cosas diferentes a lo común en una boda.

Como lo habían planeado, la feliz pareja de mi Tae y Jin, hicieron su boda en la pista de carreras más famosa de Puerto Montt, ahí en la plaza principal, donde empezaba la meta de la carrera, estaba el juez y los testigos, los padrinos Jimin y Jung, sus padres, hermanos de ambos novios, su jefe y Hobi, quien les tenía mucho apresión a los chicos.