TRES REGALOS

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Todo parecía en silencio, mientras le preguntaba a los chicos cuál era la sorpresa...

Jin hermoso...

Mi curiosidad me invadió, queria saber que era exactamente lo que se tramaban, oía solo risas de parte de mis amigos y mi hyung me tenia de la mano sin soltarme ni un instante, era el momento más feliz de todos, porque lo más importante ya lo tenía, el amor de mi hermoso Tae, lo demás ya era como algo sorpresivo, pero nada se comparaba con mi amor, aun tomándome de la mano no podía mirar por la ventana, tenía los ojos vendados, así que solo sentí su respiración en mi oído, dandome un susurro dulce y tierno—¡ya casi llegamos, se paciente amor mío, te sorprenderás cuando lo veas!—manteniendo mi sonrisa firme, apreté su mano con mucho gozo, no quería que se despegará de mi lado, me sentía tan protegido que solo miraba su silueta iluminando el sol por la ventana del coche, el motor seguía su curso y yo fasinado de que acelerará, la adrenalina en mi cuerpo por la velocidad era una de mis debilidades y la primera por supuesto el estar enamorado del chico más hermoso del mundo, todos mis sentidos se conectaron enseguida al escuchar decir a Jimin—¡llegamos!—al ayudar a bajarme del auto, mi hyung siguió guiándome hasta mi sorpresa, todos muy emocionados soltó mi mano y quito la venda de mis ojos, los abrí y vi algo muy hermoso que no me esperaba, algo que empezaría un gran sueño y que todos quería saber las palabras que pudiera decir en el momento, solo mis lágrimas salieron de mis ojos de tanta dicha y felicidad, que solo mis amigos sonreían al verme tan emocionado, me quedé mudo ante tal sorpresa, que solo les pude decir...

—¡Un taller! es hermoso, ¿como es que supieron que era uno de mis sueños?

—Bueno tu amigo Jung, nos dijo—exclamó el pelidorado dándole otro abrazo a Jin.

—Bueno la sorpresa es que tu y yo seremos socios de este taller Jin—añadió Jung, gozando de la sorpresa también.

—Pero amigo, ¿como consiguieron el dinero para montar, tal negocio?

—Es simple, todos aportamos un poco para empezar nuestro sueño—diciendo el pelicastaño oscuro, mientras lo tomaba de su cintura por detrás.

—Pero chicos, yo no puedo aceptarlo, ustedes dieron todo sus ahorros por este negocio, me siento mal al no haber dado nada.

—Por eso ni te preocupes amigo, porque todos seremos socios de este negocio, solo los cuatro, nadie más entrará a nuestro taller—dijo el apuesto pelinegro.

—¡Vamos mi hyung! quiero que conozcas por dentro el taller, aún no tiene nada, pero es amplio y muy cómodo para poder trabajarlo.

—¡Vamos mi hyung Tae!

Los chicos entraron y deciden conocerlo, estaba vacío y necesitaba muchos arreglos que acomodaran para ser útil y poder empezar su taller poco a poco....

—De verdad chicos, no se que decir sino gracias por esta sorpresa, ya quiero graduarme para empezar a ejercer en el negocio—secándose sus lagrimas el apuesto de Jin.

Tae lo toma de su rostro y le seca sus lágrimas con sus dedos, este solo se recargo para que lo siguiera acariciando.

—¡No llores mi amor! debes de estar feliz, aquí estamos tus verdaderos amigos, que siempre estarán para apoyarte y yo nunca te dejare de amar por sobre todas las cosas.

Jin no podía con tanta felicidad, que besa a su Tae, Jung y Jimin estaban felices por ambos que Jung, le dice sin razón al pelidorado..

—Asi quiero que estemos mi Jimin, juntos como nuestros amigos, quiero que todo el mundo se entere, de que eres mi novio.

—Se que somos daddy, pero eso no justifica, que te este amando aún más, ahora estaremos juntos siempre, porque yo te ayudaré a que sea el mejor taller mecánico de toda la ciudad.

VIVIR UN SUEÑO AL EXTREMO {JIKOOK/JINTAE} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora